Peri Rossi: "Los versos no salvan a los que mueren por las bombas en Europa"

La escritora uruguaya Cristina Peri Rossi ha asegurado este viernes que los versos no salvan "a los que mueren por las bombas y los misiles en la culta Europa", en el discurso del acto de entrega del Premio Cervantes que ha leído la actriz Cecilia Roth ya que no ha podido acudir por motivos de salud.

En su discurso, en el que ha recordado su primera lectura del 'Quijote', ha destacado cómo los motivos de las guerras desde siempre han sido "el ansia de poder y la ambición económica, algo típicamente masculino", y ha indicado cómo tuvo claro desde siempre "que en una sociedad patriarcal ser mujer e independiente era raro y sospechoso".

Y frente a las dictaduras, convirtió "la resistencia en literatura, como hicieron tantos exiliados españoles", ha recordado en el discurso, en el que ha destacado cómo desde sus libros, desde su vida, ha intentado "como doña Quijota desfazer entuertos y luchar por la libertad y la justicia, aunque no de manera panfletaria o realista, sino alegórica e imaginativa".

"Ninguna concesión del mercado"

Por su parte, el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, ha ensalzado la figura de la escritora, "exiliada, mujer, lesbiana" y en cuya trayectoria no ha habido "ninguna concesión al mercado" porque su literatura ha seguido "un pulso propio" y ha "preservado intacta la autenticidad".

Tras manifestar que está "feliz" al ser uno de los primeros actos que se ha celebrado sin mascarilla, Iceta se ha confesado "admirador" de Peri Rossi, a quien el jurado eligió como ganadora de este galardón dotado con 125.000 euros (144.800 dólares) por considerar que la literatura de la uruguaya (1941) "es un ejercicio constante de exploración y crítica".

"No ha habido en su trayectoria ninguna concesión al mercado. Su literatura ha seguido un pulso propio y ha preservado intacta la autenticidad que imaginó esa niña de siete años, desde la libertad que otorga la ingenuidad", ha apuntado durante esta ceremonia a la que también ha acudido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Según ha continuado en su discurso, Peri Rossi se caracteriza por una "insumisión que nace movida por el deseo; primero de amar, luego de saber y de hacer para confluir en el de nombrar: esto es la escritura", un oficio que le viene de niña, cuando "devoraba la biblioteca de su tío Tito, soltero y gran lector", ha añadido el ministro con un ejemplar de "La Insumisa" en su mano.

"Rebelde, Peri Rossi, escribe. Estudia biología, pero se licencia en literatura comparada; y escribe", ha agregado el titular de Cultura al tiempo que ha destacado el poemario "Evohé" donde "inaugura el canto al erotismo y a la voluptuosidad de y para las mujeres, un tema revolucionario que se ha mantenido incesante en la producción poética de la autora".

Asimismo, Iceta ha destacado cómo en 1971 la uruguaya se tuvo que exiliar por motivos políticos, por lo que la escritura, ha recordado, se convirtió en la "casa" de esta autora que llegó a Barcelona el 20 de octubre de 1972. A lo largo de su vida la autora se ha mudado en más de veinticinco ocasiones.

"En Peri Rossi las palabras son conjuros que crean las cosas, en complicidad con un lector o una lectora que lee, reflexiona, imagina y siente, o se enoja y se rebela, correspondiendo con su propio deseo. La literatura abre un espacio clave para entender la vida, y vivirla; para detener el instante y su belleza; y denunciar la injusticia. Como si fuera todavía aquella niña en Montevideo", ha expresado el ministro.

Por último, Iceta ha destacado que en Peri Rossi se encuentran "ambas orillas": "Y lo hacen en una lengua compartida desde la que hablará en clara incomodidad identitaria: exiliada, mujer, lesbiana. La literatura se alza frente al horror de lo existente, y Cristina Peri Rossi –como dijo la también Premio Cervantes Elena Poniatowska– escribe «corriendo riesgos sin tener red debajo".

Con este premio, Peri Rossi se convierte en la sexta mujer que se alza con el Cervantes ya que antes lo recibieron la también uruguaya Ida Vitale (2018), la mexicana Elena Poniatowska (2013), la cubana Dulce María Loynaz (1992) y las españolas María Zambrano (1988) y Ana María Matute (2010).