Estreno

'Rojos' une danza y memoria histórica en el Mercat

Miquel Barcelona, Helena Gispert, Martí Güell y Bea Vergés conectan con el espíritu de figuras artísticas, mujeres creadoras y representantes del movimiento homosexual de la posguerra española

Nuria Aguade Miquel Barcelona Rojos Miquel Barcelona Rojos

Nuria Aguade Miquel Barcelona Rojos Miquel Barcelona Rojos / Núria Aguadé

Marta Cervera

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La memoria de la posguerra española y de la represión durante el franquismo llegan al Mercat de les Flors con 'Rojos', una pieza empapada de recuerdos, rescatados durante dos años en una investigación desarrollada por diferentes localidades catalanas tanto de la Catalunya rural, como de la industrial. A partir de este jueves y hasta el domingo, este ambicioso proyecto culmina con el estreno de la pieza en Barcelona. Miquel Barcelona, Helena Gispert, Martí Güell y Bea Vergés, sus creadores e intérpretes, se ponen en la piel de figuras artísticas, mujeres creadoras y representantes del movimiento homosexual de aquella dura época y acercan sus experiencias a nuestro tiempo.

"Hemos seguido el rastro de la memoria de unos años sobre los que, a pesar de haber estudiado Historia en el colegio, conocíamos poco", confiesa Barcelona, que en sus 20 años en la danza ha trabajado con creadores como Carolyn Carlson, Juan Kruz de Garaio Esnaola, Raffaelle Giovanola, Darío Fo y Àlex Rigola. Este trabajo les ha permitido descubrir testimonios, historias y tirar del hilo de esos recuerdos para plasmar la vida de todos aquellos colectivos personas mal vistos por el régimen.

Memoria colectiva

"No se trata de una obra narrativa, la intención es abrir imaginarios porque la danza es un espacio para la metáfora", comenta Barcelona, director de la pieza cuya curiosidad ha contagiado al resto del equipo. "Coreográficamente jugamos con el 'loop', la repetición y la vibración porque en la memoria todo vuelve". La escenografía de Laura Clos 'Closca' utiliza elementos simbólicos, vigas de madera de tres metros y una tonelada de ropa reciclada triturada. "Es una pieza dura pero estéticamente atractiva. Puede impactar pero es respetuosa con el sufrimiento de las personas que llega tamizado por nuestra propia visión y voz tras una reflexión."

Una mirada que llega hasta nuestros días y que se pregunta por la censura todavía imperante que se refleja por ejemplo "en la prohibición de enseñar pechos en Instagram", recuerda. La música original de Carlos Martorell completa 'Rojos'. "Es un homenaje a los vencidos que da voz a perfiles que se movían en la clandestinidad". En el fondo desea que la pieza sirva para recordar un momento de la historia del que, en su opinión, se ha hablado poco. "Si estamos aquí es porque alguien luichó por mantener la ilusión de lograr un mundo diferente. Hay muchas cosas por mejorar todavía y hay que seguir luchando".

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