Crítica de cine

Crítica de 'Querido Evan Hansen': un musical sobre la ansiedad

Algunas decisiones de realización y adaptación musical entorpecen la transcripción cinematográfica de este premiado musical con de tintes sociales

Película 'Querido Evan Hansen'

Película 'Querido Evan Hansen'

Quim Casas

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La historia del cine musical, hoy de nuevo reactivado, está repleta de obras triunfadoras en los escenarios del Broadway neoyorquino y el West End londinense que no funcionan igual de bien al ser trasladadas a la pantalla. 'Querido Evan Hansen' ha ganado varios premios Tony y Grammy y se está representando con éxito en el teatro Noël Coward de Londres. Pero algunas decisiones de realización y adaptación musical entorpecen, en su transcripción cinematográfica, el buen funcionamiento de este drama de tintes sociales: su protagonista es un alumno de último año de secundaria que padece TAS (Trastorno de Ansiedad Social) y está en el punto de mira mediático tras el suicidio de un compañero de clase.

Los cuantiosos números cantados -todas las canciones parecen la misma- están filmados con un exceso de rigidez, lo que anula la buena disposición de actrices como Julianne Moore y Amy Adams ante el envite. Pero ellas, la madre del joven y la madre del chico muerto, son figuras secundarias en una trama centrada totalmente en las evoluciones del alumno con trastorno de ansiedad. Además, Ben Platt, quien lo interpretó en Broadway en 2016, repite el mismo papel en la película. El problema es que ahora tiene 28 años y es poco creíble como estudiante de secundaria, aunque sea en el último curso.

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