LO QUE NO SABÍAS DE...

Las curiosidades del rodaje de la comedia 'Las fantasías'

En plena era covid, los actores se saludaban con el codo, pero luego tenían que hacer una escena besándose

Los hermanos Foenkinos se reparten el trabajo: Stéphane se ocupa de los actores y David, de la puesta en escena

Los directores hicieron que, en la secuencia de la fiesta, bebieran cerveza en vez de zumo de manzana

fanta obrir

fanta obrir / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT

Eduardo de Vicente

Eduardo de Vicente

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El sexo es uno de los principales temas y, reconozcámoslo, un buen gancho comercial para la carrera de una película. Aparece como uno de los elementos del filme pero rara vez se convierte en el auténtico protagonista y más extraño aún es cuando aborda las formas de sexualidad más extrañas. Los realizadores franceses David y Stéphane Foenkinos, autores de títulos como La delicadeza o Algo celosa, han tomado como punto de partida el filme australiano The little death para rodar Las fantasías, un filme de episodios sobre las parafilias sexuales más desconocidas, nada de voyeurismo, exhibicionismo, masoquismo o fetichismo, que ya están muy vistos, solo las más raras. Si el planteamiento nos recuerda a la comedia de Paco León, Kiki, el amor se hace, es lógico ya que ambas se han inspirado en ella.

El reparto es espectacular y está repleto de grandes actores franceses como Karin Viard, Carole Bouquet, Denis Podalydès, Jean-Paul Rouve, Alice Taglioni e incluso han reclutado a la italiana Monica Bellucci. El listado de capítulos consta de seis cortos en los que se abordan la ludofilia (jugar a interpretar otros personajes), la dacrifilia (excitarse con el llanto del otro), la sorofilia (sentirse atraído por la hermana de tu pareja), la tanatofilia (relacionada con la muerte), la hipofilia (excitarse con no hacer el amor) y la autogonistafilia (al ser observado practicando sexo). Su codirector, el escritor David Foenkinos, nos explica los detalles del rodaje de esta insólita comedia.

-Diferencias con la película original. “Hay muchísimas diferencias, es por eso que no se puede hablar de una adaptación. Cuando vimos el filme australiano con Stéphane, le dimos muchas vueltas y pensamos que en el tema de los fantasías sexuales había un potencial de comedia muy muy fuerte. En aquella película tan solo había una historia y media que nos gustaba mucho y la hemos puesto pero luego hemos añadido un 70 o un 75% más. También nos han dicho que había un filme español (Kiki, el amor se hace) también inspirada en ese filme, pero no lo hemos visto. No solemos ver otras películas del mismo tema, para ser lo más libres posible, para no estar influenciados".

-La selección de parafilias. “Cuando decidimos hacer esta película fue muy divertido, ya que vimos toda la lista de fantasías y perversiones tan raras, tan extrañas que existían por lo que teníamos que hacerla. La sorofilia, por ejemplo, alguien que se enamora siempre de la hermana de su pareja, nos sugirió que ahí había una historia, se prestaba mucho a ello”.

Un fotograma del episodio sobre la sorofilia.

Un fotograma del episodio sobre la sorofilia. / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT

-El enlace entre los sketches. “Unir los sketchs es un ejercicio difícil, hay que ligar una historia con la otra, porque no está todo al mismo nivel y es complicado, pero era importante para nosotros dar una cohesión. Con el encadenamiento de las historias, queríamos darle la apariencia de una sola película, por eso los capítulos tenían que estar enlazados”.

-Dificultades del rodaje. “Tuvimos muchos problemas que fueron muy mal para cumplir el calendario de rodaje. Filmar escenas con actores en las que se abrazan todo el rato, durante la covid, no fue una buena idea, pero lo conseguimos hacer entre dos confinamientos y fue completamente surrealista. Tenía que hacerse con un equipo reducido, todo el mundo llevaba la mascarilla y luego los actores se besaban normalmente, todo muy surrealista. Lo divertido era que, cuando se encontraban, se saludaban con el codo y unos minutos después estaban metidos en la cama besándose”.

Algunos miembros del reparto se saludaban con el codo, pero luego tenían que besarse.

Algunos miembros del reparto se saludaban con el codo, pero luego tenían que besarse. / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT

-El recurso de la pantalla partida. ”Hemos intentado trabajar cada secuencia como un universo particular. Por ejemplo en Dacrifilia, como hay lágrimas, los decorados eran extremadamente fríos. La pantalla partida del primer episodio era para nosotros algo simbólico, porque las vidas de la pareja estaban fragmentadas y era chispeante lo que les pasaba. Y era totalmente diferente de su casita de barrio, tan bien ordenada. Esto le daba una energía. Visualmente cuando decidimos entrar en sus fantasías la vida se multiplicaba”.

-El reparto del trabajo. “Un filme requiere mucha preparación. Siempre tenemos que estar de acuerdo los dos en muchas cosas, tenemos que tener una visión común. Luego en el plató, Stéphane es un buen director de actores y se ocupa de ellos y yo me encargo de la puesta en escena, pero tomamos las decisiones juntos y lo llevamos bien. Karin Viard nos llama papá y mamá”.

Los hermanos Foenkinos se reparten el trabajo durante los rodajes.

Los hermanos Foenkinos se reparten el trabajo durante los rodajes. / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT

-La perrita. “Se dice que no se debe rodar ni con niños ni con animales. No habíamos rodado con animales, y menos en plano secuencia. Había dos actores que les gustan mucho los animales y la llamaban cuando estaba ante las cámaras, le decían ven aquí, haz eso. Era muy divertido, no se ve, pero los actores le daban croquetas”.

-Las referencias. “Cuando algo te gusta se pueden hacer referencias, yo en mis libros hablo de las cosas que me gustan. La casa de papel me encantó, pero no considero que sea un homenaje, es que un adolescente de 18 años, como todo el mundo, ve La casa de papel. Lo divertido era que el personaje del padre no la conociera pese a tratarse de una serie mundialmente famosa. En cambio, con el cartel de Identificación de una mujer, de Antonioni, tenía que ser un cartel producido por Gaumont porque teníamos los derechos. Había otros filmes que yo hubiera preferido pero no los conseguimos y éste nos pareció el mejor”.

En el filme aparece el cartel de 'Identificación de una mujer' por una cuestión de derechos.

En el filme aparece el cartel de 'Identificación de una mujer' por una cuestión de derechos. / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT

-Las localizaciones. “Para conseguir buenos resultados y hacer los encuadres necesarios hay que tener unas buenas localizaciones. Nos costó mucho encontrarlas, semanas y semanas buscándolas. La dificultad era mayor en esta película ya que debíamos recrear diferentes ambientes, en función de la edad, del poder adquisitivo y del ambiente cultural de los personajes, teníamos que hacer una radiografía lo más amplia posible. Por ejemplo, el apartamento de Dacrifilia, aunque pueda parecerlo, no es un apartamento de lujo, solo tiene dos habitaciones, cocina y salón y es pequeño. Además, se encuentra en un barrio, que no es muy chic. Nosotros lo que queríamos es que tuviera un toque algo perverso, bastante violento, tenía que hacer llorar. Lo que era importante para nosotros, es que la pareja no fueran parisinos, les pusimos en un barrio, en una ciudad de provincia”.

-Llorar y reír. “El actor Nicolas Bedos hizo un buen trabajo, tienes que saber que es muy conocido en Francia debido a la televisión, es hijo de un cómico, tiene una imagen muy brillante y un humor muy particular, muy ácido a veces. Por eso verle llorar, para el público francés es muy sorprendente y divertido y verle tan frágil. En general, hemos querido jugar con los actores con unos papeles interesantes, insólitos para ellos. Todos son muy famosos en Francia y aquí se encuentran con unas parejas inéditas y hacen unos papeles diferentes a los habituales".

Al público francés le sorprendió ver llorar al actor cómico Nicolas Bedos.

Al público francés le sorprendió ver llorar al actor cómico Nicolas Bedos. / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT

-El reparto. “Fue difícil conseguir a los actores. Ya teníamos escrito el guion, eran sólo cuatro o cinco días de rodaje y todos tenían ganas de venir a divertirse con nosotros, pero fue complicado tenerles a todos al mismo tiempo. Como tuvimos que parar todos los rodajes durante seis meses por el covid, cuando acabó, todos nos pusimos a rodar al mismo tiempo. Había actores previstos que tenían que rodar tres filmes simultáneamente”.

-Una fiesta con alcohol. “Rodar la escena de la fiesta fue muy divertido, los figurantes estaban encantados de participar, sin mascarilla, en un bar, aunque fuera de mentira. El productor primero puso zumos de manzana, pero yo le dije que ni hablar, todo el mundo tenía que beber cerveza, porque se tenía que beber de verdad. Y salió todo muy bien´”.

En la escena de la fiesta bebieron cervezas en vez de zumo de manzana.

En la escena de la fiesta bebieron cervezas en vez de zumo de manzana. / BERTRAND VACARISAS © 2020 MANDARIN PRODUCTION - GAUMONT