Entrevista

Víctor Manuel: “Este es un mundo de buenos y malos a cara de perro”

El cantautor asturiano, firmante de clásicos como ‘Solo pienso en ti’ y ‘Quiero abrazarte tanto’, sale de gira con su banda tras más de un año de parón y actúa este viernes en el Estadi Olímpic, dentro del ciclo Cruïlla XXS

Victor Manuel

Victor Manuel / PACO NAVARRO

Jordi Bianciotto

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Por fin en la carretera.

El último concierto fue el 6 de marzo de 2020. Muchas ganas de salir, sí. En este tiempo ni siquiera he abierto la funda de la guitarra, aunque me entró la euforia cuando me pusieron la primera vacuna y hubiera saltado al escenario en ese momento.

¿Se debería haber hecho más por la música, en aperturas y ayudas?

A toro pasado todos podemos decirlo, pero más apertura me parece difícil. Ayudas, eso sí, me consta que, en Francia, por ejemplo, ha habido más. Pero ahí se nota el poderío de los países.

Ya nos advirtió con su último disco, de 2018: ‘Casi nada está en su sitio’.

Entonces nos descolocaba el ‘trumpismo’ o el exceso de información y la manera de interpretarla. Luego vimos cómo se repetían elecciones y cómo se quitaba a un presidente por una moción de censura, cosas que no estaban en ningún manual. Ahora ya está todo descolocado.

Cualquier tiempo pasado fue peor. Con toda seguridad. No miro para atrás y creo que el mundo es mejor ahora que hace 40 o 50 años. La pobreza disminuye

Cada generación piensa que lo que le ocurre a ella no le ha pasado antes a nadie.

Tendemos al adanismo, parece que todo se haya inventado con nosotros. A veces te preguntan: ¿eran mejores o peores las cosas cuando empezó a cantar? Pues me parece que para trabajar en la música era mejor entonces que para un chaval de ahora, pero es una sensación no justificada. Si miro hacia atrás, las pasábamos putas.

Pensar que el mundo va a peor es de izquierdas, y discutir esa idea es de derechas.

Pues yo creo que cualquier tiempo pasado fue peor. Con toda seguridad. No miro para atrás y creo que el mundo es mejor ahora que hace 40 o 50 años. La pobreza disminuye. Aunque es más peligroso en muchos sentidos: en opinar de todo y tener soluciones globales, y en pensar que podemos pedir la Luna y conseguirla. Llega la pandemia y te pone en su sitio.

¿Hoy es más difícil para un cantante ser transversal?

Lo es, porque el mundo está dividido; ya es un mundo de buenos y malos a cara de perro. Esto comenzó con Bush y las Torres Gemelas. Los populismos son muy poderosos, porque la gente quiere escuchar lo que ya sabe, y que se lo confirmen, y ese es un cepo del que es difícil salir.

No todos los catalanes son como Joan Canadell, pero que tampoco se diga que todos los españoles somos como Fraga o Aznar

Ha defendido el indulto a los presos independentistas. El apoyo a esa medida da mayorías contrapuestas en Catalunya y en el resto de España.

El problema es el desconocimiento absoluto que hay de Catalunya. A mí aún me preguntan si me hablan en catalán cuando voy, y les digo que en mi vida me ha ocurrido eso. Ha habido tanto envenenamiento por parte de algunos medios que la reacción de la gente es normal. Y en Catalunya hay quien no ha ayudado: que un cargo público diga que “los españoles” son de tal manera es un exceso. No todos los catalanes son como Joan Canadell, pero que tampoco se diga que todos los españoles somos como Fraga o Aznar.

¿Ve un camino en el diálogo entre Madrid y Barcelona?

Se debería hablar menos en los periódicos, y menos extemporáneamente. Un presidente de la Generalitat no puede pedir amnistía y autodeterminación, porque él sabe, aunque tenga 38 años, que eso no existe en el ordenamiento político español. No me parece probable que ahora la clase política decida cambiar la Constitución, que además requiere una mayoría de dos tercios. Se debería hablar menos.

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