ESTRENOS DE LA SEMANA

'Raya y el último dragón': Disney avanza hacia nuevos confines

Hablamos con los directores y guionistas de este espectacular tributo a los paisajes y culturas del sudeste asiático

'Raya y el último dragón': Disney avanza hacia nuevos confines

'Raya y el último dragón': Disney avanza hacia nuevos confines / Disney

Juan Manuel Freire

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El nuevo gran estreno cinematográfico de Disney, 'Raya y el último dragón', llega este viernes a las salas, pero al igual que 'Mulán', podrá verse en Disney+ por 21,99 euros adicionales. El sistema tradicional de ventanas de explotación parece a punto de pasar a mejor vida, al menos para esta corporación. En una reciente conferencia virtual, Bob Chapek (presidente de Disney) tildaba al espectador actual de "impaciente", "sobre todo ahora que ha tenido el lujo de pasarse un año viendo títulos en casa más o menos cuando le apetecía".

Carlos López Estrada, codirector de 'Raya y el último dragón', anima a la gente a acercarse a los cines y espera que antes o después todo el mundo vea su película en pantalla grande. "Nosotros la hicimos en pantallas pequeñas –explica por videollamada–, en ordenadores e iPads. Y cuando la vimos en pantalla grande nos voló la cabeza". Pero entiende las ventajas, al menos por ahora, de quedarse en casa: "Es seguro y es rápido".

Lo importante es verla, del modo que sea. Hay mucho por disfrutar en este viaje a Kumandra, tierra de fantasía disecada y dividida por una misteriosa plaga que arrasó lo que antes fue un paraíso biodiverso habitado por una comunidad pacífica. Antaño, humanos y dragones convivían en armonía, pero los segundos se sacrificaron durante la crisis para salvar a la población; solo quedó uno que desapareció. Raya (con la voz de Kelly Marie Tran en la versión original) irá en su busca cuando, por culpa suya, o eso cree, la vieja plaga amenace con volver a causar estragos.

Cultura poco representada en Hollywood

Raya no es una princesa Disney al uso: como Vaiana, es una heroína exploradora y guerrera. Osnat Shurer produjo el filme de 2016, también codirigido por Don Hall. "Se puede decir que ambos personajes tienen mucho en común", nos explica la productora. "Las dos pertenecen a culturas que no han sido muy representadas en la pantalla; no al menos en películas de Hollywood. Y de culturas que valoran el 'nosotros' por encima del 'yo'. Además, las dos tienen un pelo estupendo", apostilla necesariamente.

En el intento de diversificar su imaginario, Disney mira en 'Raya y el último dragón' hacia el sudeste asiático: sus paisajes y los rasgos comunes de sus culturas, como la tradición de líderes femeninas o las historias de serpientes míticas y dragones. La película no está escrita, como 'Vaiana', por varios hombres blancos, sino por Adele Lim y Qui Nguyen, guionistas de sangre malasia y vietnamita, respectivamente. "Siempre me ha costado explicar mi cultura en Hollywood", dice la primera, coguionista de 'Crazy rich asians'. "Me encantó tener la oportunidad de celebrarla, aunque fuera a través de pequeños detalles: cómo se hace la sopa; cómo nos reunimos alrededor de la comida, o cómo los niños se relacionan con sus mayores".

Artes marciales apropiadas

'Raya y el último dragón' contiene las dosis previsibles de criaturas adorables, comedia física y emoción descarada, pero también un puñado de sorprendentes escenas de lucha. "Espero que verosímiles", dice Nguyen, coreógrafo de peleas además de guionista. "Bebimos de técnicas regionales como, específicamente, el Pencak Silat [arte marcial de Indonesia], el Muay Thai [boxeo tailandés], el Arnis [el arte marcial nacional de Filipinas] o algo de lucha vietnamita tradicional. Es algo que la distingue de otras películas Disney y, de hecho, la mayoría de filmes de artes marciales".

Mis intentos de comentar la conexión de 'Raya' con los mundos del 'anime' y el videojuego caen en saco roto. "Sobre todo pensamos en wésterns o películas de aventuras; para nosotros, 'En busca del arca perdida' era el estándar dorado", señala Hall. A lo que López Estrada añade con un brillo en los ojos: "¡Pero espero que hagan un videojuego de la peli!".

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