GALARDÓN MUNICIPAL

Eduardo Mendoza: "Barcelona es mentirosa, le gustan mucho las escenografías"

El autor de 'La ciudad de los prodigios' recibe el Premio Barcino de la cita barcelonesa de novela histórica

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Elena Hevia

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En esta edición de Barcelona Novel·la Històrica que necesariamente ha tenido que adaptarse a las restricciones pandémicas y realizarse vía digital, el tema sobre el que girarán todos los actos y mesas redondas, que se celebrarán hasta el próximo 13 de noviembre, no hay que buscarlo demasiado lejos. Es la ciudad de Barcelona, escenario y cruce de culturas, que ha servido de material a innumerables novelas.

Así que si convenimos que la gran novela sobre Barcelona es ‘La ciudad de los prodigios’ (un honor que también podría caberle a 'La verdad sobre el caso Savolta') parece de justicia que el Premio Barcino vaya dirigido a uno de sus escritores más dedicados, Eduardo Mendoza, que lo recibe este lunes en El Born Centre de Cultura i Memòria. El autor, señala el director de los encuentros Félix Riera, ha logrado hacer no solo pedagogía sobre el pasado de la ciudad con sus trabajos sino también "construir una ficción que nos invita a entrar en ella y nos conecta con la verdad". La de Mendoza es, pues, una Barcelona en la que lo importante no es "el metro cuadrado sino el metro pensado".

"Los premios son una transfusión necesaria contra la tentación de dejarse llevar"

El cervantes Mendoza, como es sabido, va sobrado de premios –tiene en su haber el prestigioso y europeo Franz Kafka-, pero este, pequeño y cercano, le hace una especial ilusión: "Los premios son para el escritor un transfusión necesaria contra el cansancio y la tentación de dejarse llevar. Este me gusta porque me lo dan en mi ciudad y porque está vinculado a la historia, una materia que siempre me ha interesado porque deseo saber por qué pasan las cosas. Me gusta poner en marcha el teatro inmóvil de los hechos históricos, pensar en cómo hablaría toda esa gente del pasado y cómo serían sus casas, por ejemplo".

Construir el pasado

Las obras de Mendoza, grandes o pequeñas, serias o divertidas, en cierta forma han construido el imaginario de Barcelona para locales y foráneos, algo que él, habitualmente modesto, no niega: "Vemos lo que nos hacen ver los escritores, los pintores, los músicos y los medios de comunicación que construyen la realidad". En la actualidad y aunque acaba de salir un librito, ‘Por las barbas del profeta’, que reúne sus divertidas conferencias sobre historia sagrada anda embarcado en finalizar la trilogía barcelonesa tocada por su habitual humor descacharrante. Así que parecería obligado hacerle ejercer de profeta, o mejor de pitoniso, frente al incierto futuro de la Barcelona poscovid. "No tengo idea de lo que puede pasar. Pero sí la sensación de que en la vida cotidiana, en la relación entre las personas, se va a producir poco cambio. Otra es que la pandemia nos obligue a replantearnos el modelo turístico. Esto quizá sí vaya a cambiar".

"Todas las ciudades crean una imagen que se corresponde o no con la realidad"

A Mendoza, pese a acarrear la responsabilidad de ser ‘el’ escritor de Barcelona, le gusta tomar distancias y refugiarse varios meses al año en Londres, algo que el covid ha imposibilitado. Alejarse es para el autor una forma de obtener una perspectiva no contaminada. "Pero también me sirve para que me dejen tranquilo", dice divertido. Y es que tomarle el pulso a una ciudad cambiante y proteica no es tarea fácil. Incluso llega a tacharla de "mentirosa", por imaginativa. "Todas las ciudades crean una imagen que se corresponde o no con la realidad. Barcelona, como Nueva York o Estambul, tiene una imagen poderosa, pero nace de una invención, el modernismo, que es el más imaginativo y fantasioso de los estilos arquitectónicos". Apuntala la idea con un ejemplo muy claro. El edificio que albergó el viejo museo de Ciencias Naturales en la Ciutadella, obra de Domènech i Montaner, es conocido como ‘El Castell dels tres dragons’. "Pues bien, allí no hay castillo, ni dragones. A Barcelona siempre le han gustado mucho las escenografías".