LO QUE NO SABÍAS DE...

Los secretos del complejo rodaje de 'Antidisturbios', la serie del año

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Eduardo de Vicente

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Una de las series más polémicas pero también más alabadas de los últimos años es Antidisturbios, el último trabajo de Rodrigo Sorogoyen que, como en El reino, habla de la corrupción y contiene escenas de un gran realismo y varios planos secuencia muy virtuosos. El reparto está encabezado por la catalana Vicky Luengo, que da vida a una agente de asuntos internos mientras que los antidisturbios están interpretados por Raúl Arévalo, Álex García, Hovik Keuchkerian, Patrick Criado, Roberto Álamo y Raúl Prieto, todos ellos, excelentes. Todo apunta a que se va a convertir en la gran ganadora de premios de la temporada por sus secuencias repletas de tensión y su trama con muchas aristas.

La serie sigue los pasos de un furgón de la UIP (Unidades de Intervención Policial) que lleva a cabo un desahucio aunque las condiciones no son las propicias. En el transcurso del mismo, un joven senegalés cae al abismo y fallece. El suceso provoca la investigación de asuntos internos en la que la joven Laia Urquijo intenta averiguar lo ocurrido  y por qué actuaron cuando las circunstancias lo desaconsejaban. Su persistencia la llevará a descubrir un complejo entramado de corrupción política.

Está repleta de momentos memorables con diversos planos secuencia como la persecución a unos ultras futbolísticos o la cena del final, muchísima intensidad y unas imágenes que respiran autenticidad por todos sus poros. Para conseguirlo, el equipo tuvo que emplearse a fondo y trabajar hasta la extenuación para lograr el resultado que quería y, pese a las voces discordantes, nadie puede negar que es un trabajo impecable. La productora ejecutiva de la serie, Sofía Fábregas, nos cuenta las anécdotas del rodaje  

-Viejos conocidos. “Todo es ficción pero, tiempo atrás, antes de que rodáramos en la plaza Nelson Mandela había habido una revuelta muy grande en esa zona de Lavapiés. Con nosotros se encontraban algunos miembros de la UIP que nos asesoraban y fue muy curioso porque coincidieron con algunos figurantes que eran manifestantes que habían asistido a aquel acto y con los que se habían enfrentado. Sin embargo, en esta ocasión, fue todo muy cordial, se reconocían entre ellos y comentaban entre bromas lo que ocurrió aquel día. Eso contribuyó al tono realista de la serie”.

-La otra cara de esa escena. “Esa misma escena era muy complicada, ya que los figurantes debían tirar sillas a los actores que hacían de antidisturbios. Como Rodrigo siempre busca la verdad y está muy comprometido con un tono naturalista estuvieron ensayando con un especialista. Les arrojaban sillas de verdad pero los figurantes sabían dónde tenían que tirarlas para no hacerles daño. Pero, en un momento determinado, algunos de ellos se vinieron arriba, se arrancaron a lanzarlas por lugares que no estaban marcados y tuvimos que apartarles”.

-Las dos caras de la corrala. “Antes de empezar a rodar las primeras secuencias en el desahucio en la corrala llevábamos varios meses sin que lloviera. Lo teníamos todo a punto, el edificio sucio y perfectamente ambientado, pero el fin de semana anterior se puso a llover creando ríos de agua, como si fuera el diluvio universal y todo lo que habíamos preparado no servía. Nos reunimos el domingo para decidir lo que haríamos al día siguiente porque era complejo, pero Miguel Ángel Rebollo, nuestro director de arte, no lo veía tan problemático porque creía que le daba mucha más verdad, lo salvamos. La segunda vez que aparece el edificio, varios capítulos más adelante, está en obras. De hecho solo tuvimos tres semanas para ensayar y rodar la escena inicial y, al dia siguiente, empezaban las obras para habilitarla, así que cuando regresan semanas después, la obra que se estaba llevando a cabo era auténtica”.

-La escena del desahucio. “Pese a la violencia que transmiten esos momentos, nadie sufrió ningún daño, lo único fue que el reloj de uno de los actores (no recuerdo si fue el de Álex o el de Raúl) salió disparado. También salió ileso Alejandro de Pablo, el director de fotografía, aunque tenía que estar constantemente en medio de la escena como si fuera uno más”.

-Los efectos especiales. “Queríamos que el momento de la caída de Yemi fuera muy real y lo ensayamos mucho con los tres chicos senegaleses. El actor que interpreta a Yemi está realmente subido a la barandilla y cae sobre una manta de colchones. Luego en posproducción lo sustituimos por el suelo. Lo cierto es que utilizamos pocos efectos especiales porque prácticamente todo era verdad. Únicamente tuvimos que borrar en algunas ocasiones al director de fotografía, que se veía reflejado en los cascos, y la escena final del barco, que era uno normal, al que añadimos los dibujos”.

-La elección de Vicky Luengo. “Rodrigo estudió muchas opciones con la directora de casting. Mientras que los antidisturbios se parecen mucho a lo que teníamos en la cabeza en principio y son actores más populares, Rodrigo insistió en que el personaje de ella tenía que ser alguien desconocido, para que el espectador no tuviera tanta información. Vio a bastantes candidatas, pero quedó fascinado con Vicky y su trabajo es impecable. Fue una apuesta de director y está agradecidísimo con el día que la escogió. Nos ha demostrado que es muy trabajadora y una actriz como la copa de un pino”.

-La decoración de la oficina y el coche. “Con Miguel Ángel Rebollo visitamos las instalaciones de la UIP en Moratalaz y rodamos en su párking y él lo iba apuntando todo. Nos sorprendió ver las bufandas ultras y banderas que había en su oficina y nos explicaron que era un homenaje a las batallas que los antidisturbios habían librado: partidos de fútbol, revueltas, etcétera y en la serie sale tal cual es, muy fidedigno. El furgón era lo mismo, les preguntamos qué llevaban en la guantera y nos comentaron varios detalles como un bote de miel y otros objetos. Los guionistas lo incorporaron inmediatamente, incluso las pegatinas son las mismas que llevan”.

-Papá Villarejo. “El actor que interpreta a Revilla es el padre de Sorogoyen, que ya aparecía en El reino. Es un juego de palabras Re-Villa / Villa-Rejo. Incluso en los créditos finales aparece acreditado como Paco Revilla porque, en realidad, se llama Rodrigo Sorogoyen, como su hijo. Otro guiño es que, cuando Vicky investiga el caso, aparece el nombre de una empresa corrupta, Pérsica, que ya había salido en El reino. A Isabel Peña (la cocreadora de la serie) y a Rodrigo les hacía gracia ponerle el mismo nombre”.

-Persiguiendo a los ultras. “Era un plano secuencia muy complicado, pero estaba muy ensayado. Lo más complejo es que no nos daba tiempo a prepararlo y teníamos que ensayarlo cuando finalizábamos el rodaje diario. Fue muy duro a nivel físico porque cada día era acabar de rodar y empezar a ensayar el plano secuencia”.

-El plano secuencia de la última escena.” La escena de la cena final es muy compleja por su  clímax dramático. No hay pirotecnia ni acción, solo personajes. Estaba toda muy medida y se rodó como 14 veces. Los actores tenían momentos increíbles y empezamos a pensar en desistir del plano secuencia para mostrar lo mejor de sus brillantes interpretaciones. Eran como las 3 de la mañana y Rodrigo les dijo que hacían la última. Todo el mundo se relajó y fue la buena. Era muy emotivo porque era muy dura dramáticamente y, además, era el día que algunos actores se despedían de la serie. Pero, en esta última toma, surgió la magia y es la que finalmente se ve en la serie”.

-La gran pregunta¿habrá segunda temporada?: “No te puedo contestar ahora, quizás dentro de un mes pueda decirte algo”.