CaixaForum ofrece gratuitamente sus 'Nits d'Estiu' en 'streaming'

Desde hace ya varios años, CaixaForum celebra la llegada del verano con una programación pensada para que disfrutemos al aire libre o en su auditorio de espectáculos teatrales y musicales de gran calidad. Pero este año la situación es muy distinta a lo que esperaban por lo que han tenido que buscar soluciones imaginativas y seguras para continuar a nuestro lado. La respuesta es una edición virtual de sus populares Nits d’estiu que podrán verse gratuitamente en su web y luego estarán disponibles en su Àgora Digital para que podamos visionarlos cuando queramos. Algunas propuestas han sido previamente grabadas, otras se emitirán en directo desde diversos rincones del recinto e incluirán, en algunos casos, entrevistas exclusivas con los artistas y otros alicientes. Unas noches de verano abiertas a todos.

Un montaje muy sincero

La oferta teatral se abre hoy con 360 grams, de Ada Vilaró360 grams,, un montaje multidisciplinar y poético que fusiona palabra, cuerpo y danza. En el mismo, la artista en solitario comparte con el público una experiencia muy íntima y lo conmueve. Solo tiene un pecho pero defiende que, por ello, su cuerpo no deja de ser hermoso. Cuenta Vilaró que “cuando la vida te parte en dos se despliega ante ti la oportunidad de atravesar el dolor y redescubrir el misterio de la belleza. Es una belleza política que combate la superficialidad y desafía los estereotipos. Me transforma y te transforma. Una belleza que es lo que es con su diferencia. Una verdad que abraza y quiere la vida”. El proyecto nace de una experiencia personal, muy íntima y frágil que se atreve a compartir. Un montaje arriesgado, valiente, sincero y muy revelador en el que el público podrá participar y asistir, al final, a una entrevista con la creadora a cargo de la periodista Júlia Bertran.

La danza reflexiona sobre el pasado y el cuerpo

La danza también tendrá un peso importante en este ciclo empezando por Sa mateixa (miércoles 15), creada por dos prestigiosas artistas: la coreógrafa Lali Ayguadé y la cantante y compositora Joana Gomila. Su proyecto, con dos bailarines, dos músicos y la voz de la intérprete, consiste en la fusión de la música mallorquina y la danza contemporánea e incorpora elementos tan inesperados como jotas, polcas, electrotonadas, Ibiza-trips o el contraste entre el campo y la ciudad. Una fotografía familiar sirve de excusa para hacer un viaje de la tradición a la contemporaneidad y confrontar la espontaneidad de la vida con la presencia de los ancestros. Transcurrirá por diversas zonas emblemáticas del centro y acabará con entrevistas a los artistas.

Joana Gomila también ha aportado su música en Las muchísimas (miércoles 29) de la compañía de la coreógrafa Mariantònia Oliver, que se emitirá desde el vestíbulo del edificio. Es una obra inclusiva interpretada por 15 mujeres de más de 60 años que muestran con orgullo su diversidad, su experiencia y su ausencia de prejuicios. Una acción que intenta mostrar la variedad de cuerpos por medio de los cuales se vive el amor, el placer, el dolor o las lágrimas, una muestra de femineidad que rompe los moldes establecidos.

De una 'performance' al ballet clásico vertical

La siguiente artista invitada es Mireia C. Saladrigues quien interpretará la performance Gestos protètics (miércoles 12 de agosto) acompañada por tres bailarines en la sala donde se celebra la exposición On som. On podríem ser y propone un interesante diálogo con esta muestra de arte contemporáneo. Busca nuevas maneras de moverse interpretando las cámaras como extensiones de los movimientos de los cuerpos experimentando con todo tipo de gestos y bailando con la complicidad de la tecnología.

Finale (miércoles 26 de agosto) es una pieza de danza clásica creada por Saioa Fernández y Sheila Ferrer, pero ¡atención! lo suyo es la danza vertical y bailan suspendidas en el aire como si estuvieran flotando. El impacto visual es impresionante. Su actuación está grabada sobre la fachada del CaixaForum con planos aéreos y primeros planos de detalle de las artistas que muestran una perspectiva diferente de la habitual. La arquitectura es utilizada para reforzar los movimientos en un contexto distinto para trasladar el ballet más tradicional a un entorno que provoca una lectura diferente de piezas como El lago de los cisnes, El Cascanueces o Giselle. Nos sorprenderán.

Un pianista polifacético y un trío circense

La música es otro de los apartados irrenunciables de estas jornadas y así podremos ver y escuchar al pianista y compositor menorquín Marco Mezquida (miércoles 22) que hará una actuación muy especial ya que compartirá sus vivencias personales con la ayuda del periodista y musicólogo Xavier Chavarria. Se trata de uno de los músicos más consolidados del panorama actual, ganador del premio Ciutat de Barcelona  en el 2019 por su álbum No hay dos sin tres junto al guitarrista Chicuelo. Ha grabado más de una veintena de discos y ha actuado junto a Dave Liebman, Carme Canela o Perico Sambeat y formó dúo con Sílvia Pérez Cruz. Y, además, se adapta a cualquier estilo: música clásica, contemporánea, jazz, pop o flamenco. Un artista muy completo.

De Escandinavia llegan los Dreamer’s Circus (miércoles 5 de agosto), un trío que combina las músicas tradicionales nórdicas con otros estilos y que interpretan mediante el violín, la cítara, el piano y el acordeón. Su repertorio está abierto a la experimentación con referencias al folk, la clásica y el minimalismo para crear una propuesta circense de ensueño. Llevan juntos más de 10 años y han sabido conjugar sus diferentes raíces musicales para inventar un género particular que han volcado en sus cinco álbumes el último de los cuales, Blue White Gold, busca nuevas sensaciones mediante esta original fusión.

El humor de la música clásica

Quienes quieran reírse mientras escuchan música clásica tienen su cita con Desconcerto el miércoles 19 de agosto. Se trata de un proyecto muy divertido de la Orquestra de Cambra de l’Empordà bajo la dirección de Jordi Purtí. Los músicos salen al escenario pero el director no aparece por lo que aprovechan para improvisar sobre temas famosos, se enfrentarán con él por el tipo de repertorio y habrá luchas entre virtuosos. Las cuatro estaciones de Vivaldi se convertirán en una persecución musical y ni la obertura de Guillermo Tell o el Rondo alla turca de Mozart estarán a salvo. Todo es posible. Humor gestual y físico para encajar sus bromas con una sonrisa. Un concierto o anticoncierto que redondeará estas noches veraniegas más necesarias este año que nunca.