Daniel Martínez: "La relación público-privada debe ser motor de la reconstrucción cultural"

Daniel Martínez, presidente del Grup Focus, un empresario con gran experiencia en el mundo de la cultura, tiene claro cómo emprender la recuperación del sector en España tras la dramática situación provocada por el covid-19. La clave está en "potenciar la colaboración público-privada en toda España", según explicó en el foro Primera Plan@ de EL PERIÓDICO, en el que se mostró convencido de la capacidad para superar la crisis, siempre que administraciones y el sector privado colaboren al máximo.

 "Es el modelo históricamente seguido en Barcelona, donde ha existido una relación muy estrecha entre lo público y lo privado", señala. Por eso, Martínez cree que "la relación público-privada debe ser clave y motor de la reconstrucción cultural. El sector privado está a disposición del sector público para andar conjuntamente en esta tremenda travesía que debemos iniciar. Barcelona ha de recuperar el liderazgo perdido".

"La mayoría del sector no ha podido acudir a financiación bancaria y a otras medidas de auxilio", dice Martínez

Aunque poco a poco la actividad ha empezado en librerías, cines, museos y algunos teatros, el presidente de Focus teme que la industria cultural tarde en recuperarse. "El sector necesita seguridad", dice Martínez, quien reclama mayor agilidad y capacidad de respuesta a la Administración ante el tsunami derivado de la pandemia.  "La mayoría del sector no ha podido acudir a financiación bancaria y a otras medidas de auxilio", critica. "El coronavirus ha puesto en evidencia la debilidad de un sector que está sometido a un adelgazamiento por la falta de inversiones y de políticas culturales".

El 2% del presupuesto

Martínez califica de "inconcebible" el perjuicio económico para la cultura. "El 'president' Torra valoraba en 800 millones las pérdidas del sector cultural debido a la pandemia en Catalunya sobre un total de 30.000. Eso es un 2,6%, por lo que podría acceder a la petición del 2% del sector cultural", señala, recordando la reclamación  impulsada este año por la plataforma Actúa Cultura, que de momento no ha sido escuchada. La Generalitat destina menos del 1% de su presupuesto a la cultura. 

"La Administración ha hecho muchas promesas, pero no ha llegado ni un solo euro extraordinario"

Aunque esta semana la inauguración del Grec ha dado una alegría al sector, Martínez vaticina que "la recuperación será muy lenta". "Confiemos que en septiembre lleguemos al vestíbulo de la normalidad". Advierte de que "las consecuencias de esta crisis se agravarán más si no hay una inmediata y decidida voluntad política de rescatar al sector", pues  hasta ahora "la administración ha hecho muchas promesas, pero no ha llegado ni un solo euro extraordinario".

El valor de la cultura

La Generalitat ha adelantado el cobro de subvenciones ordinarias, "pero no ha podido pasar de aquí". La lentitud de la administración y la burocracia son aspectos a mejorar.  Y más teniendo en cuenta la contribución de la cultura durante el confinamiento. "Sin cine, música, literatura, teatro, danza o artes visuales, el confinamiento habría sido casi un cautiverio.  La cultura frente a la crispación y la impostura ha sido un modelo de serenidad y de humildad". En su opinión, la ciudadanía entiende perfectamente su valor, no así los políticos, que "ensalzan la cultura como si fuera un mantra y dicen que es un bien de primera necesidad, pero no aportan ni recursos y ni políticas".

El objetivo debe ser "recuperar la actividad y que no se haya perdido un solo puesto de trabajo", dice

Si de algo ha servido el  confinamiento es para unir todavía más el sector de forma transversal. "La pandemia ha hecho de cemento entre los diferentes sectores culturales, algo vital para negociar con la Administración". Entre sus reclamaciones, destaca la bajada del IVA, "una medida ya aprobada en Alemania",y medidas para la recuperación económica.  "Necesitamos ayudas a fondo perdido, mantener lo máximo posible las herramientas de los ertes para las empresas y subvenciones directas, ágiles y decididas a los artistas porque son la base. Sin ellos esto no existe". El objetivo debe ser "recuperar la actividad y que no se haya perdido un solo puesto de trabajo".

Pero lo esencial es superar el miedo a salir de casa y disfrutar de la cultura en vivo y en directo. "El público va a marcar el ritmo de la recuperación, económica y anímicamente", admite. "Hay que recuperar la demanda y contrarrestar el déficit sufrido". Espera que en septiembre, cuando reabran con todas las medidas de seguridad los teatros, pensemos que "todo ha sido como un mal sueño".  No quiere ni imaginar qué podría pasar si vuelve a haber  un repunte grave del virus la próxima temporada.