CRÍTICA DE CINE

'Zapatos rojos y los siete trolls': Ni Blancanieves ni los siete enanitos

Esta producción surcoreana se nutre de todo el imaginario de las fábulas para introducir reflexiones en torno a la superficialidad de la belleza y la importancia de abrazar la diferencia

Estrenos de la semana. Tráiler de 'Zapatos rojos y los siete trolls'

Estrenos de la semana. Tráiler de 'Zapatos rojos y los siete trolls'. / periodico

Beatriz Martínez

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Los cuentos tradicionales han generado una fuente inagotable de variaciones para su reinterpretación contemporánea. Se acabó el tiempo de los príncipes azules que solo tenían que dar un beso para que todo se solucionara y el de las princesas pasivas que esperaban ser salvadas. En 'Zapatos rojos y los siete trolls', Blancanieves tiene sobrepeso y Merlín se ha convertido en una criatura verde. Unos 'stilettos' encarnados convertirán a la joven en 'la más bonita del reino', pero ninguno de los dos se sentirá cómodo en su nueva piel.

Esta producción surcoreana se nutre de todo el imaginario de las fábulas para introducir reflexiones en torno a la superficialidad de la belleza y la importancia de abrazar la diferencia. Por el camino nos encontramos con brujas, maldiciones, monstruos y muchas aventuras, en definitiva, lo mejor de la tradición, pero con un mensaje contemporáneo. La narración discurre sin sorpresas, no es desde luego una película ni novedosa ni singular, pero al menos sabe tratar con esmero y respeto cada uno de los elementos que la conforman sin resultar ni cursi ni cansina.