UN ANTES Y UN DESPUÉS

La gran donación de Picasso a Barcelona

El Museu Picasso celebra 50 años de la firma del acta que supondría el ingreso, entre otros, de 236 óleos y 1.149 dibujos en la colección

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Mauricio Bernal

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Con solemnidad notarial, el pintor Pablo Picasso escribió: "Yo Pablo Picasso, de nacionalidad española y vecino de Mougins, en memoria de mi inolvidable amigo Jaume Sabartés, hago donación a la ciudad de Barcelona…" Era el 8 de mayo de 1970, y con ese lenguaje ceremonioso el artista malagueño ponía palabras a uno de los episodios más significativos de la historia del Museu Picasso: la donación de 236 óleos, 1.149 dibujos, 17 carnets y cuatro libros de texto con dibujos y anotaciones de la colección familiar, obras de juventud que se convertirían en el núcleo de la colección del museo de la calle de Montcada. Ocurrió hace 50 años y así quedó consignado en el acta levantada para la ocasión. La donación daba definitivamente músculo a la institución. El museo recuerda que la noticia causó un envidioso estupor del otro lado de los Pirineos.

Fue un año capital, marcado por la anexión del palacio del Baró de Castellet y el cambio de nombre de la institución

Todo había empezado, por supuesto, con la donación de 'Arlequín', en 1927: el primer regalo de Picasso a Barcelona. Luego se habían sucedido capítulos cargados de intención, como la adquisición de la Colección Plandiura por parte del ayuntamiento y la Generalitat, en 1932, 32 obras de Picasso incluidas; la apertura del museo propiamente dicha, en 1963, con una colección cuyo centro de gravedad eran las obras de Picasso que había donado su secretario personal Jaume Sabartés; o las posteriores donaciones de Dalí (1963) y Sebastià Junyer Vidal (1966), que engrosaban la colección original; y entonces llega 1970 y Picasso pega ese puñetazo colosal, con ese regalo, cuantioso y valioso, de la colección que su familia atesoraba en Barcelona. Fue un año, el de 1970, capital, marcado no solo por la donación del artista sino por la ampliación del museo con la anexión del palacio del Baró de Castellet, número 17 de Montcada. Los tópicos existen para describir estas coyunturas: fue un antes y un después.

Inauguración descafeinada

“El extraordinario valor artístico del conjunto de obras donadas por Picasso se acrecentó, así, singularmente, desde un punto de vista histórico y humano", recordó luego Raimon Noguera, notario y facilitador de la operación gracias a sus contactos con los políticos de la época, en especial con el alcalde de Barcelona, Josep Maria de Porcioles. Estaba previsto que la inauguración de la ampliación y de la nueva colección tuviera lugar el 18 de diciembre de ese año, y las invitaciones ya estaban cursadas para lo que se preveía como un gran acto, pero entonces entró en escena el Proceso de Burgos: enterado de las penas de muerte a los enjuiciados, Picasso llevó a cabo su particular protesta por la vía de empequeñecer el acto: dio instrucciones de retirar las invitaciones a todos los cargos oficiales y de eliminar toda declaración pública. Simbólico por cuanto implicaba el definitivo cambio de nombre del museo –de Colección Sabartés, como había tenido que ser bautizado al principio por las diferencias de Picasso con el régimen franquista, a Museu Picasso–, el acto quedó despojado de pompa.

Una exposición que será festivamente inaugurada en diciembre recordará aquel año capital

Por eso, el 18 de diciembre es la fecha que ha escogido el actual director del museo, Emmanuel Guigon, para inaugurar la exposición que él mismo comisaría junto a Sílvia Domènech –responsable del Centro de Investigación y Conocimiento del museo– en torno a la efeméride capital. La muestra incluirá documentación representativa de aquel año fundamental y propondrá un diálogo entre el archivo del museo y su colección. Será una inauguración festiva, como no pudo serla la de 1970. Mientras tanto, y para que la fecha exacta de la donación no pase desapercibida, el museo pondrá este viernes a disposición del público fotos y recortes en torno a ese momento crucial en sus redes sociales. Un aperitivo.