Los libros para el confinamiento de Carlos Zanón, Marta Sanz, Irene Solà...

Buscar refugio en un libro durante el confinamiento puede ser una buena forma de evadirse por un rato de la amenaza del coronavirus. Diez escritores, desde sus casas, diseminadas por media geografía nacional y más allá, recomiendan cada uno una lectura bajo la que cobijarse durante estos días inciertos y aceptan compartir cómo están capeando esta necesaria y obligada cuarentena. Ellos son Carlos Zanón, Irene Solà, Manuel Baixauli, Rosa Ribas, Marta Sanz, Agustín Fernández Mallo, Care Santos, Maria Climent, Juan Gómez-Jurado y José Luis Correa.  

CARLOS ZANÓN

“A mí me gusta estar encerrado con mis libros, mi música, a mi bola. Pero, claro, esto es muy loco”, constata Carlos Zanón confinado en su casa de Barcelona. El autor de novelas como ‘Taxi’ (Salamandra) y ‘Yo fui Johnny Thunders’ (RBA) y del retorno del Carvalho de Vázquez Montalbán –‘Problemas de identidad’ (Planeta / Columna)- tiene "la sensación de que todo el mundo está en una cárcel". "La sensación de que no puedo coger un tren o un coche y largarme de aquí me rompe un poco la cabeza. Trato de concentrarme, pero para escribir es difícil. Mis novelas siempre juegan con el momento en que son escritas y ahora no tengo ni idea de qué va esto del presente", confiesa el también comisario de BCNegra.

Zanón recomienda MERIDIANO DE SANGRE, de Cormac McCarthy (Literatura Random House y Debolsillo): "Es un libro portentoso en cómo está escrito, en los personajes, en el aliento de la narración, en el aspecto tan subversivo de la maldad, de la violencia lejos de la civilización por parte de los civilizados. Parece escrito desde cualquier época. Uno de sus personajes, el juez Holden es claramente Ahab sin barco, es Brando haciendo de Kurtz. Una barbaridad de libro".

IRENE SOLÀ

Irene Solà, autora de la celebrada ‘Canto jo i la muntanya balla’ (Premi Llibres Anagrama 2019, también traducida al castellano), pasa el confinamiento en el pueblo de Malla, en la comarca de Osona. "Estoy en casa, con mi compañero, con momentos de preocupación y momentos en los que cuesta asimilar todo lo que está pasando, procurando leer, escribir, viendo cine, cuidándome y cuidando a los míos… deseando que cuando todo esto se acabe hagamos un esfuerzo para retomar, disfrutar, potenciar y cuidar la cultura. Y con muchas ganas de volver a las calles, a los bares y a las montañas".  

Solà recomienda: LAS COSAS QUE PERDIMOS EN EL FUEGO y NUESTRA PARTE DE NOCHE, de Mariana Enriquez (Anagrama): "'Las cosas que perdimos en el fuego’ son cuentos de la autora argentina, cuentos desenfadadamente de terror, y ahora, mucho más que cuentos de terror. Y si alguien los prueba y quiere más, o si prefiere una novela muy larga donde sumergirse durante la cuarentena, Mariana Enriquez acaba de publicar ‘Nuestra parte de todo’ (Premio Herralde 2019), una novela punzante, especial e inmensa, por la que nadar durante muchas horas". 

MANUEL BAIXAULI

Sobre su confinamiento, desde su pueblo natal, Sueca, cerca de València, Manuel Baixauli afirma tener "una sensación extraña". "Pensaba que podría hacer algunas de aquellas cosas que siempre vas postergando. La realidad, pero, es que no paro de hacer tareas de la casa y cosas con los hijos y apenas tengo tiempo de ver, por las noches, una película. Leer, poco. De escribir, ni por asomo", admite el autor de la reciente ‘Ignot’ (Periscopi) y de la premiada ‘L’home manuscrit’ (Proa). 

Baixauli recomienda:  UN TIEMPO PARA CALLAR / UN TEMPS PER GUARDAR SILENCI, de Patrick Leigh Fermor (Elba / Quid Pro Quo): "Es un librito, exquisitamente editado en catalán por Quid Pro Quo, que relata, a través de la experiencia personal, el paso del autor por diversos monasterios de Europa. A partir de las rutinas estrictas de los monjes y de la descripción de los lugares, transmite una calma y una espiritualidad que impregnan al lector –tanto da que sea o no religioso- y que, creo, va muy bien en tiempos como los que sufrimos".  

ROSA RIBAS

"Miro la primavera desde mi ventana y lucho por avanzar en la escritura, cosa que, poco a poco, voy consiguiendo", cuenta desde su casa, en Fráncfort, donde vive desde hace casi 30 años, Rosa Ribas. Sin embargo, la autora de la reciente ‘Un asunto demasiado familiar’ (Tusquets / Capital books), nacida en El Prat de Llobregat, asume: "Como a muchos, el confinamiento me ha mostrado lo falaz de la fantasía del tiempo ilimitado para leer y leer… Estos días cuesta concentrarse. Por eso estoy leyendo y releyendo obras breves, intensas, absorbentes, como ‘De noche, bajo el puente de piedra’, de Leo Perutz". 

Ribas recomienda: DE NOCHE, BAJO EL PUENTE DE PIEDRA, de Leo Perutz (Libros del Asteroide): "Es una novela maravillosa. Leo Perutz, con su enorme capacidad de fabulación y con un lenguaje que parece fluir sin esfuerzo, tiene esa gracia especial de los narradores centroeuropeos de convertir a los lectores en oyentes de un gran cuento, como si nos hablasen al oído y estuviéramos leyendo con los ojos cerrados. Es una de las historias de amor más hermosas que he leído y, además, transcurre en Praga. ¿Qué más se puede pedir?". 

MARTA SANZ

Marta Sanz, a la que la crisis del coronavirus pilló al inicio de la promoción de ‘Pequeñas mujeres rojas’ (Anagrama), espera que su recién publicada nueva novela "supere hibernaciones y confinamientos". Desde su casa de Madrid cuenta que pasa la cuarentena "intentando descansar". "Pero no lo consigo –asume-. He establecido rutinas alimentarias, gimnásticas, higiénicas, televisivas, lectoras, escritoras y de contactos afectivos y profesionales. Le tiro a mi gata una pelotita azul y me había propuesto que esta experiencia fructificase en algo creativo. Pero, en realidad, no lo logro: por mucho que busque el entretenimiento, el sentido del humor o esa profundidad que nos reconcentra y nos hace olvidarnos de lo que nos rodea -como a las sabias despistadas-, la enfermedad resulta para mí muy invasiva. No es inspiradora, sino paralizante. No encuentro el tono para hablar: ¿apocalíptico?, ¿festivo?, ¿buenrollista?, ¿patético?, ¿zen? Intento tomármelo con calma, pero en realidad estoy deseando que regrese la auténtica primavera para abrazar a las personas que quiero, disfrutar de las cosas triviales. Y naturalmente todas las tardes a las ocho en punto salgo a aplaudir. Es imprescindible".

Sanz recomienda: REWIND, de<strong> J</strong>uan Tallón (Anagrama): "Es una novela sobre el duelo, la capacidad de hacer memoria y la vivencia de la felicidad como espejismo. Un libro, de extraña melancolía, que habla de cómo los seres humanos salimos adelante después del derrumbe. Las voces de los personajes traman una tela armoniosa en torno a la modificación de la vida después de un suceso terrible. Un libro maravilloso".

AGUSTÍN FERNÁNDEZ MALLO

Asegura Agustín Fernández Mallo, autor de 'La trilogía de la guerra' (Seix Barral), que el confinamiento, en su casa de Mallorca, no ha cambiado excesivamente su cotidianidad. "Cuando estoy en casa hago lo mismo que antes. Lo que sí ha trastocado son las conferencias y los talleres con los que los autores solemos sobrevivir y que ahora para mí se han cortado en seco. Y por lo demás, suelo aplicar el dicho de que ante una  situación absurda tienes que afilar la creatividad. Así que estoy escribiendo mucho y me dedico a acabar proyectos que tenía empezados, como las siete canciones que he lanzado a la red junto a mi mujer, Pilar Rubí. Lo que tengo claro que esto va cambiarlo todo, como lo hizo el 11-S, que no solo transformó la geopolítica sino el modo de hacer arte y ficciones", informa Elena Hevia.

Fernández Mallo recomienda:  PEQUEÑO MUNDO ILUSTRADO, de María Negroni (Wunderkammer): "Es un libro construido como un gabinete de curiosidades, como una enciclopedia personal con entradas breves que se van fijando en detalles tanto de ficciones, objetos o hechos históricos que se concretan en muñecas automáticas, relatos de Borges o un aspecto de ‘Ciudadano Kane’. Es un libro perfecto para un momento como este en el que estamos recluidos porque me está llevando a miles de kilómetros. Es a la vez un libro erudito y entretenido". 

CARE SANTOS

"Hacía un año y medio que no paraba, el verano pasado no tuve vacaciones, así que me he tomado estos días como una oportunidad para calmarme, aunque no lo consigo del todo", confiesa Care Santos, que ha visto aplazado el lanzamiento de su nueva novela, ‘Seguiré els teus passos’ (Columna; en castellano en Destino), una de las novedades previstas del próximo Sant Jordi, incierto e insólito. "Estoy leyendo mucho, rebajando la montaña de libros pendientes. Necesito leer. Leer es lo que me hace más feliz y en estos tiempos de realidades tristes, los libros nos salvan. Los necesitamos más que nunca. Además, estoy escribiendo una novela en la que iba con retraso y haciendo vídeos de píldoras poéticas en las redes: dos poemas cada día, uno en castellano y otro en catalán. Disfruto mucho con ello porque siempre he sido buena lectora de poesía y así puedo compartir esta pasión", explica desde su casa, en Mataró, la autora de ‘Media vida' (Premio Nadal 2017). 

Santos recomienda:  LA PIEDRA LUNAR / LA PEDRA LUNAR, de Wilkie Collins (Alba Editorial / La Magrana): "Wilkie Collins no me falla nunca. Sus libros son gruesos, ideales para quien tiene horas para leer, personajes muy bien dibujados y tramas complejas, siempre con un punto de misterio y originalidad. La trama de ‘La piedra lunar’, la primera novela de detectives de la literatura, dicen, gira en torno a una supuesta piedra mágica originaria de la India, cuando era colonia británica. Es una lectura divertida, ágil y deliciosa con personaje que es un mayordomo muy inglés, muy enfadado y que lee ‘Robinson Crusoe’ como si fuera su Biblia particular. Es decir, que contiene una buena dosis de sentido del humor". 

MARIA CLIMENT

Maria Climent vive el confinamiento en su Amposta natal, adonde ha vuelto hace un mes. "Lo llevo bien y mal. Bien porque por ahora no me duele nada y no me falta de nada y hace dos semanas que voy en ‘leggins’. Mal porque mi única vida social es mi madre. Y gracias, y con mucha honra. Comparto casa con ella para hacernos compañía en estas horas graves. Quizá no me esperaba una vuelta tan brusca al pueblo, pero ¿quién controla nada, de esta sonada vida? Yo no". La autora de la celebrada ‘Gina’ (Alfaguara / L’Altra Editorial) constata que tampoco le ha cambiado mucho la rutina, pues ya trabajaba desde casa y por internet, ya que también es ‘community manager’. "De hecho, estos días he tenido aún más trabajo porque mis clientes iban locos por cambiar el contenido de las redes. Es decir, vida normal, si no fuera porque a mi jornada laboral le añado toda la psicosis de la pandemia y la sobreinformación".

Climent recomienda: DOCTOR PORTUONDO, de Carlo Padial (Blackie Books): "‘El sillón desde el que me sentaba a esperar mi turno ofrecía unas vistas panorámicas a la desesperación humana bastante espectaculares’. Una frase de una novela que parece un documental y que podría describir el panorama actual del país. Bueno, del mundo. Si en estos días de mierda necesitamos algo es hallar a alguien más angustiado que nosotros y, si puede ser, que nos haga reír. Esa persona es Carlo Padial, un neurótico brillante capaz de frases como ‘antes de rendirte, mira en tu interior. Luego ríndete’. Aquí narra su relación con el doctor Portuondo, ‘un psicoanalista cubano exiliado en Barcelona que gritaba a sus pacientes, juraba en nombre de Freud y bebía Johnnie Walker’. Crea un mundo donde su ridículo lo sientes tú, y su absurdo y sus neuras. Y consigue transmitir una desolación vitalista donde entenderse y aprender a reirse de uno mismo es la base de todas las cosas para intentar hallar cierto encanto en esta cosa absurda que es la existencia". 

JUAN GÓMEZ-JURADO

"Estoy leyendo todo lo que puedo, e intentando dejar la cabeza en su sitio. ¡No está siendo fácil en estos días difíciles!", cuenta desde su casa, en Madrid, Juan Gómez-Jurado, autor de ‘thrillers’ superventas como ‘Reina roja’ y ‘Loba negra’. 

Gómez-Jurado recomienda: TRILOGÍA ‘LA TIERRA FRAGMENTADA’, de N.K. Jemisin (Nova): "Estoy acabando 'El cielo de piedra', la tercera parte de esta trilogía, y es absolutamente brillante. Nadie había conseguido ganar tres Premios Hugo consecutivos y me parece maravilloso que haya sido esta obra. Jemisin reflexiona sobre racismo, esclavitud y condición humana con un trasfondo medioambiental y, además, tiene una maravillosa habilidad para crear personajes complejos en contextos totalmente nuevos. Ciencia ficción interseccional en su contenido y espectacular en su imaginario. Totalmente recomendable". 

JOSÉ LUIS CORREA

Para el canario José Luis Correa, creador de la serie negra del detective Ricardo Blanco, cuya última entrega, ‘Las dos Amelias’ (Alba Editorial), presentó en la pasada BCNegra, lo del confinamiento, en su casa de Las Palmas, "está siendo extraño". "Nada es lo que debería ser. Podría decir que me resulta insoportable y, sin embargo, lo estoy llevando bastante bien. ¿Será una suerte de síndrome de Estocolmo? Después de atender los correos de mis estudiantes de la universidad, me consagro a aquello a lo que normalmente no dedicaba tanto tiempo: leer, ver películas antiguas, desempolvar una bicicleta estática que ni recordaba que tenía, jugar a los juegos de infancia que solo necesitan de papel y lápiz. Hasta desayuno en casa, antes lo hacía en la cafetería de la Facultad, con calma y deleite", cuenta. "Por otra parte -añade-, cuando todos te repiten a diario que es un buen momento para escribir una novela de principio a fin, apenas puedo pergeñar breves párrafos a salto de mata. He descubierto a vecinos que ni siquiera sabía que tenía, a la hora de los aplausos de las siete en Canarias. Y, sobre todo, pienso. Uno se da cuenta de que pasa la vida corriendo hacia ninguna parte con las horas contadas y ahora se dedica a reflexionar sobre la diferencia -permítaseme la referencia a José Luis Cuerda- entre qué es lo contingente y qué lo necesario".  

Correa recomienda:  SÁNCHEZ, de Esther García Llovet (Anagrama): "Nikki y Sánchez, dos personajes marginados y marginales que se reúnen para vender un galgo a una mafiosa que amaña carreras para pagar las deudas de juego del protagonista que da ‘apellido’ a la novela, recorren, a modo de ‘road movie’, el extrarradio de Madrid bajo la lluvia de estrellas de San Lorenzo: ‘Qué noche tan exótica esta; tan larga, tan frondosa, tan animal’. Se topan con todo tipo de personajes que están a punto de morir o de matarlos. Nos descubren un mundo que parece que nadie quiere ver, aquel que uno esconde debajo de la alfombra cuando llegan las visitas. Es una trama disparatada y loca, de ritmo palpitante, frases cortas y punzantes que envuelven y atrapan al lector como esta: ‘con el tiempo me ocurre siempre como con el dinero, cuando me pongo a perderlo lo pierdo todo’".