Guía para ver los espectáculos de los reyes de la comedia teatral catalana

En estos días algo grises no podemos lamentarnos y dejarnos llevar por la desidia, hay que buscar remedios a la negatividad y, para ello, lo mejor es reír, dejarnos llevar por las comedias, que pueden evadirnos de la realidad  y ayudarnos a desahogarnos un poco. Algunas de las mejores compañías teatrales cómicas catalanas tienen parte de sus obras por Internet y nos hemos dedicado a buscarlas para facilitar la tarea. Para disfrutarlas simplemente hay que clicar en el enlace subrayado en azul.

Las obras maestras de 40 años

La Cubana cumple 40 años, ya que nació en 1980, y en todo este tiempo ha cambiado el género con su original manera de interactuar con el público, con su espontaneidad y frescura y al convertirse en una auténtica fábrica de crear humoristas. Tras pasar por esta compañía nunca vuelven a ser los mismos y es como un cursillo acelerado de improvisación. Mientras esperamos la llegada de su nuevo montaje, Adiós, Arturo, podemos repasar en la red sus obras maestras.

Empezamos por <em>Cómeme el coco, negro</em> (1989), un espectáculo de revista algo cutre y vintageque sorprendía a los espectadores porque, cuando entraban en la sala, descubrían que ya estaba empezado. Por ello empezó a correr la voz y la gente llegaba 30 minutos antes del inicio de la función. Pero las auténticas sorpresas llegaban después... José Corbacho, Santi Millán, Anna Barrachina, Mercè Comas o Mont Plans eran algunos de los protagonistas en esta primera etapa. Cegada de amor (1994) era una original combinación cinematográfica-teatral en la que colaboró el cineasta Fernando Colomo en la que, literalmente, los personajes salían de la pantalla como en La rosa púrpura del Cairo, un experimento sencillamente genial con referencias a Pedro Almodóvar y a las estrellas infantiles tipo Marisol o Rocío Dúrcal.

<em>Una nit d’òpera </em>(2001) estaba protagonizada por unos amantes de este género que pretendían acercarlo a la gente, presentando una versión de Aida asequible para todos los públicos, pero lo que acabábamos viendo era la trastienda del espectáculo desde los distintos puntos de vista de sus trabajadores. Con ella se incorporaba una nueva generación de actores como David Fernández (el futuro eurovisivo Rodolfo Chiquilicuatre) o Mónica Pérez (Buenafuente, Homozapping). Campanadas de boda (2012) era una parodia de los enlaces matrimoniales con dos partes diferenciadas. En la primera mitad vemos los preparativos de la boda entre la hija de una florista y un actor de Bollywood pero, en la segunda, el teatro se convierte en una sala de ceremonias y el público, en los inesperados invitados. En 2016, la compañía adaptó un texto original ajeno, Gente bien, un sainete clásico de Santiago Rusiñol sobre lo ridículos que pueden resultar los nuevos ricos pasándolo por su particular lectura y convirtiéndolo en una opereta que transcurría en cuatro épocas diferentes llegando hasta nuestros días.

Del Tricicle a la 'troupe' de Toni Soler

Tricicle ha decidido durante estos días emitir en su canal de YouTube algunos de sus espectáculos íntegros semanalmente. El miércoles pasado pudo verse Sit, su particular homenaje a las sillas, y esta misma noche (20.15 horas) ofrecen <em>Manicòmic.</em> Una vez emitidos desaparecen, pero en su mismo canal podemos encontrar cientos de gags de este famoso trío mímico y momentos memorables como su encuentro con los argentinos Les Luthiers. Fuera ya de su página oficial, también encontramos su Terrific.

El satírico grupo televisivo de Minoría Absoluta, con Toni Soler al frente, también puede entretenernos con dos de sus montajes más irreverentes, La familia irreal, una vitriólica visión de la monarquía, así como <em>Polònia: el musical</em>, una irónica mirada sobre el procés. Por cierto, un apunte. La gran mayoría de estas obras han sido filmadas por TV3 pero los enlaces son de aficionados que los colgaron en su momento. Quizás sea el momento de que TV de Catalunya decida abrir un poco más sus archivos teatrales…

Una pareja mítica y el cómico más añorado

La comedia más representada en la historia de nuestra ciudad fue La extraña pareja, que se mantuvo en cartel en los 90 durante cinco años y supuso un éxito sin precedentes. El tándem Paco Morán-Joan Pera adaptó a su manera la obra de Neil Simon que popularizaron en el cine Jack Lemmon y Walter Matthau introduciendo constantemente nuevos chistes hasta el punto de que no había dos representaciones iguales. Puede verse el especial que rodó TVE en 1995 y la última función, en 1999, con mejor calidad. La pareja volvió a reunirse en el 2002 en Mamaaa!, sobre dos hermanos que se disputan la herencia de su madre.

En nuestra selección de grandes cómicos no podía faltar el gran Pepe Rubianes. ¡Cuánto le echamos de menos! ¡Cómo nos hubiera gustado reírnos con él del procés, la crisis de la monarquía o la actual pandemia! La única de sus obras íntegras que puede hallarse en YouTube es La sonrisa etíope, una combinación de sus monólogos y danzas africanas, pero sí pueden encontrarse <em>playlists</em> de su genial <em>Rubianes solamente</em>, otro espectáculo que se eternizó en la cartelera y que, también, cada día era diferente y no sabía cuánto podía durar porque ("señores, no les quiero entretener…") siempre se salía del guion, empezaba a enrollarse y ni él mismo sabría cuándo acabaría. Los genios de la comedia teatral catalana que nunca dejarán de hacernos reír.