Los rivales de Almodóvar en la carrera de los Oscar ya están en la cartelera

El 2019 ya está apurando sus últimos días y con ellos llega el habitual balance anual. En el caso del cine empieza la carrera de premios que decidirá cuáles han sido las mejores películas de estos últimos meses. Un buen baremo suele ser fijarse en la lista de las preseleccionadas por los distintos países para competir por el Oscar. La representante española, Dolor y gloria, se encuentra entre las escogidas, e incluso podría optar a premios mayores como director, guion o actor. Por lo que respecta a la categoría de mejor película extranjera, la mayoría de las favoritas coinciden estos días en la cartelera. Son las previsibles futuras ganadoras de los premios locales (Goya, Cesar, David di Donatello, etcétera). Es una buena oportunidad para descubrirlas y valorar las auténticas posibilidades del filme de Pedro Almodóvar.

La favorita es una película surcoreana

La principal rival es la surcoreana Parásitos, de Bong Joon Ho (Memories of a murder, Snowpiercer), que ya le arrebató la Palma de Oro en Cannes. Cuenta las peripecias de un matrimonio que está sin trabajo y vive con sus dos hijos en unos míseros bajos desde los que ven la calle. Subsisten gracias a pequeños robos y empleos clandestinos. Todo cambia cuando el chico consigue casualmente un empleo como profesor de inglés de la hija de una familia rica y hace todo lo posible por colocar a su familia. Pero un hecho inesperado amenaza su nueva y privilegiada situación.

Es un inteligente y muy bien tejido filme que radiografía las clases sociales con ironía y astucia y que tiene dos partes claramente diferenciadas. Durante la primera es una comedia dramática sobre la manipulación de las personas, mientras que en la segunda se produce un giro y se convierte en un filme de intriga y casi de terror. Es inquietante pero tiene momentos extraños casi de comedia, visualmente es muy curiosa y el tramo final, muy metafórico, es muy sorprendente y violento.

La sorpresa en Francia

En Francia, la sorpresa ha sido Los miserables, Los miserables,drama que supone el debut del malí Ladj Ly, inspirado en su corto homónimo de 2017. El protagonista es un policía que se incorpora a su nuevo destino en el barrio de Montfermeil, donde Victor Hugo escribió Los miserables. Ahora es una zona dominada por los musulmanes pero el robo de un cachorro de león de un circo de gitanos provoca un conflicto de consecuencias imprevisibles.

Retrata en tono casi documental los bajos fondos, los enfrentamientos raciales y los abusos policiales. Todo transcurre en un espacio de dos días de verano con un calor sofocante que provoca que la gente esté más nerviosa de lo normal. La primera parte de la película se dedica a presentar a los variopintos personajes que pueblan el barrio y la segunda mitad es más de acción con muchísima tensión. Es un filme para descubrir el origen de la violencia y la falta de adaptación en lugares como el que describe y tiene un desenlace brutal e implacable. Estos dos filmes serán también sus competidores en los Globos de Oro junto a la también francesa Retrato de una mujer en llamas (un romance lésbico de época) y a la coproducción chino estadounidense The farewell (sobre una joven oriental establecida en EEUU que vuelve a China para despedirse de su abuela moribunda).

La mafia vista por un veterano

Acaba de llegar a nuestras pantallas El traidor, del veterano realizador italiano Marco Bellocchio (Buenos días, noche, Vincere), un drama basado en hechos reales. Arranca cuando las familias de la Cosa Nostra se reúnen en Palermo en 1980 para sellar la paz y repartirse el tráfico de heroína, pero poco después estalla la guerra entre bandas. Uno de los principales dirigentes, Tommaso Buscetta, se ha ido a vivir a Río de Janeiro donde descubre que su familia está siendo eliminada. El juez Giovanni Falcone intentará convencerle para que delate a sus antiguos socios.

Un riguroso y muy bien documentado análisis de la lucha contra la mafia que arranca a principios de los 80 y muestra la evolución de los personajes a lo largo de dos décadas. Es muy realista, dura y retrata muy bien el mundo mafioso sin ahorrarse escenas violentas. Las escenas centrales del juicio resultan esperpénticas, repletas de alboroto y casi surrealistas mientras que el tramo final es muy inquietante. Tras lo ocurrido, viven con miedo en EEUU, cualquier puede querer matarlos, deben ir cambiando de casa y acostumbrarse a pasar a vivir con menos recursos.

El 'Ocean's eleven' de los Darín

La apuesta argentina es la que tiene, a priori, menos opciones pero es la más agradable de ver, La odisea de los giles, una comedia dramática de buen rollo en la que Sebastián Borensztein repite con Ricardo Darín, con quien ya trabajó en Un cuento chino y Capitán Kóblic, y recluta al hijo del actor, Chino Darín. Está ambientada en la Argentina del 2001, donde un grupo de tipos humildes deciden unirse para montar una cooperativa y comprar un almacén de grano cercano a su localidad. Pero un banquero y su abogado aprovechan el corralito para quedarse con su dinero. Sin embargo sospechan que esconden el botín en un zulo y pretenden robarlo.

La película pasa del drama inicial a una comedia de robos que vendría a ser una especie de Ocean’s eleven con Ocean’s elevenpringaos. Aquí no hay tipos de americana y corbata, son gente de pueblo entre los que figuran un anarquista o dos hermanos con pocas luces. El grupo está formado por individuos muy pintorescos, pueblerinos, paletos, pero también muy entrañables. Te identificas con ellos y deseas que todo les salga bien. Es un elogio de los olvidados, de la gente que pasa por la vida sin hacer ruido y que decide dar un golpe encima de la mesa y dar la vuelta a su destino.

Cuatro opciones muy distintas para conocer el mejor cine que se hace en el mundo, más allá del gigante norteamericano que acostumbra a copar las salas con sus blockbusters. Una oportunidad para conocer los títulos de los que más se va a hablar en los próximos meses… y con razón.