LOS DISCOS DE LA SEMANA

Neil Young, fuerza de la naturaleza en 'Colorado'

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Jordi Bianciotto, Juan Manuel Freire, Roger Roca, Ignasi Fortuny

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Aunque parecía que Neil Young había encontrado a unos pupilos jóvenes y lozanos, Promise of the Real (el grupo del hijo de Willie Nelson, Lukas), para acompañarle felizmente hasta el crepúsculo, los viejos vínculos tiran y he aquí un nuevo episodio, poco esperado, de su larga alianza con Crazy Horse. Hablamos de la banda que le ha acompañado en muchas de sus obras capitales desde hace la friolera de 50 años.

Del encuentro en un remoto estudio sito en las Montañas Rocosas, al que Young hizo traer tanques de oxígeno por lo que pudiera pasar, sale este disco airado y místico, rasposo y melancólico, fiel heredero de una manera de hacer que ha dejado huella en tantísimas escenas: punk, grunge, noise-rock, sonido Americana, trovadores iluminados. En 'Colorado' hay un poco de todo, incluyendo sensibilidad ecológica, zarpazos al sistema y canciones de amor, y Crazy Horse vuelve a relinchar como en los viejos tiempos, aunque dejándose envolver por un halo místico que matiza muchos de sus impulsos y los tiñe de melancolía.

La vuelta de Nils Lofgren

Con una novedad formal: el guitarrista Frank 'Poncho' Sampedro abandona y cede su puesto a quien se encargó de suplir en los años 70, ni más ni menos que Nils Lofgren, liberado en los últimos tiempos de sus compromisos con Bruce Springsteen. Su fino estilismo aporta nuevos matices a esta versión del grupo aun sin desviarse de lo que podemos esperar del 'sonido Crazy Horse'. Siete años después de su anterior asalto conjunto, el un tanto aventurado 'Psychedelic pills', el combo recupera aquí su orden canónico y su gestión serena de la ira.

Young da una de cal y una de arena: del medio tiempo campestre de 'Think of me', que abre el disco, a la oceánica 'She showed me love', donde advierte del asesinato de la madre naturaleza en un trayecto de 13 minutos en que la banda parece tocar movida por una fuerza gravitatoria. Nos damos con canciones cabreadas: 'Help me lose my mind', en la que Young predica más que cantar hasta confluir en un coro purificador, y la acusatoria 'Shut it down', clamando contra el cambio climático "en un mundo de fábricas de carne".

Rebajar la electricidad no implica rendirse: la recogida 'Green is blue' insiste en esas temáticas medioambientales y políticas, y 'Rainbow of colours' apela a las esencias bautismales de los "viejos Estados Unidos". En cambio, 'Milky way', con voces dulces y guitarras ásperas, y 'I do', cerrando el disco rozando el susurro, apuntan al sentimiento y al romance, reflejos del último giro de Young en su vida privada (su boda, el año pasado, con la actriz Daryl Hannah). Otros extremos de este disco de amplios contornos, que Young desea explicarnos mejor a través de un documental sobre su grabación, 'Mountaintop', estrenado esta semana en Estados Unidos y que llegará a Europa el 18 de noviembre. JORDI BIANCIOTTO

OTROS DISCOS DE LA SEMANA

Lieven Scheerlinck, artista folk belga afincado en Barcelona, deja a un lado el solipsismo para concentrarse en contar las historias de otros. Ya solo por la calidez y el primor melódico, se nota que canta sobre gente cercana y querida. En su formato físico, el disco tiene forma de caja de madera con postales y un libro de prosa. JUAN MANUEL FREIRE

Noticia: con 89 años, uno de los grandes maestros del arte del trío de piano publica su primer disco en solitario –o casi: hay 3 piezas a dúo con contrabajo–. Y 'Ballades', colección de fabulosas piezas propias –está su fetiche, Poinciana– más algunos estándares, está a la altura de lo más sofisticado y elegante que haya grabado nunca. Superclase. ROGER ROCA

El mallorquín celebra sus 26 años con un álbum hilvanado desde el sentimiento romántico, su posición imponente como artista triunfador (sus cifras son de escándalo), miradas al pasado y alguna que otra factura cobrada ('¿Y tú qué?'). Un disco cargado de armonía -también vocal-, diseñado y cuidado para las masas en lo que es un ejemplar trabajo de pop urbano. IGNASI FORTUNY

Después de 38 años de carrera, la que fuera bajista de Sonic Youth se estrena en solitario alejándose de toda complacencia. Disco hostil, crepitante y socialmente ácido de art-punk hardcore, con minimalismo industrial y espasmos sarcásticos ('Air bnb'), cocinado de la mano de Justin Raisen (John Cale, Angel Olsen). Feliz regreso. J. B.