El Teatre del Raval acoge una muestra con montajes de talentos emergentes

El teatro catalán está en continuo movimiento. Basta comprobar la gran cantidad de compañías que están en funcionamiento y la proliferación de salas (sobre todo de aforo reducido) que no paran de multiplicarse. No hay nada ni nadie que pueda con ellos, ni siquiera los injustos recortes de subvenciones y el resultado no puede ser más positivo, ya que la temporada se ha saldado con un aumento de espectadores que tiene que seguir creciendo. Para tomar el pulso a la situación actual y mirar con optimismo al futuro, el Teatre del Raval acoge, desde hoy, una interesante iniciativa, se trata de la 24ª Mostra de Teatre de Barcelona.

Este ciclo presenta una docena de nuevos espectáculos que podrán verse durante las próximas semanas cada lunes y martes siempre a las 20.30 horas. Es una oportunidad para que, tanto los programadores como el público en general descubran a los futuros talentos de la escena y las compañías puedan darse a conocer. Pero, además, un selecto jurado compuesto por expertos seleccionará el mejor montaje, que volverá a representarse próximamente en esta sala, así como escogerá a la mejor actriz y el mejor actor.

La Historia y el dolor

Los dos primeros textos tienen trasfondo histórico y están centrados en la Guerra Civil. La muestra se abre hoy con La delació (Gerard Vilardaga e Iris Hinojosa) sobre un guerrillero antifranquista que, en 1949, es detenido por la guardia civil pero consigue escapar aunque alguien lo delata. Este es el punto de partida de una obra que reflexiona sobre los motivos que llevan a una persona a denunciar a otra. Mañana será el turno de Mort a les cunetes (David Pintó y Joan Valentí), que versa sobre los hechos de Súria, el fusilamiento de ocho civiles republicanos encerrados en la prisión de Manresa en 1930 y un noveno, Josep Nin, que logró huir.

Las obras de la próxima semana tienen en común el dolor. La teta lisa (lunes, 14)  de la compañía Saludarte es un espectáculo sobre el cáncer de mama basado en experiencias reales y con coreografías de Ramón Oller pero tratado desde el humor y la cotidianeidad y se centra en una mujer egocéntrica y superficial que ve cómo su vida cambia cuando descubre que padece esta dolencia. Verí (martes, 15), de Scla’ka Si Teatre, se ocupa de una pareja separada tras la muerte accidental de su hijo que se ve obligada a reencontrarse al descubrir que tienen que trasladarlo a otro cementerio. Una reflexión sobre el trauma de una pérdida y su influencia en las relaciones.

Las mujeres y el trabajo

La siguiente pieza está ambientada en el marco laboral. Poka Yoke (lunes, 21) está protagonizada por una operaria y una ingeniera de una fábrica de coches que está en crisis. Ambas mantendrán un apasionante debate sobre el poder, el deber y la justicia con el tema de fondo de los errores humanos que pueden provocar muertes involuntariamente. Fuga (martes, 22) es una propuesta de La Clandestina sobre un hombre que descubre que su abuelo ha desaparecido de la residencia donde estaba internado. Durante la búsqueda deberá repasar su relación con él y los recuerdos que compartió el anciano de su sufrimiento durante la guerra civil.

Los dos siguientes montajes tienen un cariz femenino pero también humorístico. En Elles (lunes, 28), La Melancómica aborda los clichés de género de una forma irreverente y cómica e intenta dar respuesta a las grandes preguntas que nos formulamos sobre las mujeres sin dejar de lado en ningún momento la ironía. Paralelamente Típico tópico (martes, 29) está protagonizada por una docena de actrices. Se ha cometido un delito, pero ¿cuál ha sido y quién ha sido? Esta trama a lo Agatha Christie ha sido urdida por Skizodrama y les sirve para reírse de los tópicos y darles la vuelta provocando las carcajadas de la platea.

Dos preguntas y el pasado

La siguiente semana hay dos ejemplos de teatro interrogatorio, que interpela al espectador y le hace reflexionar sobre cuestiones concretas. Se abre con Trenta-vuit (lunes, 4 de noviembre), que transcurre simultáneamente en los años 1938 y 2038, con un siglo de diferencia y muestra las peripecias de dos individuos que luchan por sus ideales. Las dudas de un piloto aéreo que se ve envuelto en los bombardeos de Barcelona durante la guerra civil y el líder de un grupo activista que se enfrenta al gobierno en medio de una grave crisis climática. La pregunta que plantea la compañía Fils Enredats es ¿puede el pasado influir en el futuro? ¡Biba la rebolución! (martes, 5) presenta a cuatro jóvenes que, hartos de las injusticias del sistema, deciden iniciar una revuelta con un atentado en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid para desafiar al mundo capitalista. Ahora, la cuestión que la compañía Muchos Pájaros nos hace es: ¿quiénes son los locos?

La mirada al pasado será la protagonista de la última semana. Cuadros de humor y amor (Jove Companyia Plató de Cinema) podrá verse el lunes 11 y consta de varios cuentos sobre escenas cotidianas ambientadas en los años 90. Recordaremos cómo era la vida en esa década pero, sobre todo, la relación entre hombres y mujeres y podremos comprobar cómo ha cambiado en todo ese tiempo para pensar si realmente hemos aprendido algo. Finalmente, 80 anys sense ella (Mima Teatre) cerrará el certamen el martes 12 de noviembre. Cuatro estudiantes serán cuestionados sobre sus conocimientos sobre la guerra civil al cumplirse los 80 años de su finalización. Mediante este ejercicio, los chicos descubrirán facetas suyas que desconocían, de su papel en la vida, su origen y su propia historia. Dos meses para descubrir talentos emergentes y temas que nos harán reflexionar. Doce obras… sin piedad.