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El Festival del Fado: un fin de semana para disfrutar con la canción portuguesa

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Eduardo de Vicente

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El fado es esa canción portuguesa que casi nos transporta al país vecino e impregna el aire de melancolía y nostalgia y resulta imposible resistirse a su atracción. Este canto popular urbano se ha convertido en Patrimonio de la Humanidad y podemos disfrutarlo este fin de semana en Barcelona en la tercera edición de un completo festival dedicado al mismo que incluye conferencias, cine, una exposición y, por supuesto, dos grandes conciertos.

Dos artistas que han dado un nuevo impulso al género

El BARTS acogerá estos recitales que se inician esta noche con Cristina Branco (20.30 horas). Es una artista que se inició escuchando jazz y blues hasta que, gracias a su abuelo, descubrió a Amália Rodrigues y todo cambió. Debutó en Amsterdam en 1996 y rápidamente destacó por su particular manera de interpretar y entender este género para convertirse en una portavoz de la poesía y la literatura portuguesas. Desde el respeto a la tradición intentó innovar y consiguió el reconocimiento con Menina (2016), que fue premiado como el mejor álbum del año por la Sociedad Portuguesa de Autores. La confirmación ha llegado con Branco (2018), un disco muy personal en el que cuenta con el acompañamiento de un guitarrista, un contrabajo y un piano, que ha tenido una gran acogida y que será el epicentro del concierto de hoy.

Mañana será el turno de António Zambujo (20.30 horas). Este cantante recupera los fados tradicionales y otros de su propio repertorio, todos ellos con unos arreglos muy personales. Su primer disco data de 2002 y ya en sus inicios acumuló un gran número de distinciones. No pretende seguir las vías previamente trazadas y no resulta extraño que en sus temas suenen ecos búlgaros u homenajes a la música brasileña, nada es intocable siempre que se respete el aroma portugués original hasta el punto que ha traspasado fronteras y se ha convertido en un artista internacional. Con Até pensei que fosse minha obtuvo una nominación al mejor álbum en los Grammy Latinos y llega en su mejor momento con su octavo trabajo de estudio, Do avesso, donde reivindica los valores y los derechos humanos así como la posibilidad que tenemos todos de poner las cosas del revés, como indica su título.

Una conferencia y una película

Este año el festival está dedicado a la relación del fado con el teatro, gracias al cual salió de las tabernas y, en la segunda mitad del siglo XIX, se popularizó entre el pueblo que lo convirtió en la banda sonora de su vida cotidiana y contribuyó a internacionalizarlo. Sobre este tema versará la conferencia que ofrecerá el experto Ricardo Bóia en la otra sede de este evento, la sala de actos del Museu Marítim (hoy, 18.30, entrada libre). En la misma explicará el impulso definitivo que el teatro le dio al fado gracias a las grabaciones discográficas y cómo ha llegado a convertirse en un producto cultural de masas.

El cine también tendrá su representación con O Pátio das Cantigas (domingo, 18 h., Museu Marítim), una comedia musical de 1942 que tuvo tanto éxito que provocó, en el 2015, el rodaje de una miniserie televisiva. La trama transcurre en un patio de vecinos lisboeta y narra el día a día de sus habitantes: amores y celos, alegrías y tristezas, sueños y decepciones durante las fiestas de la ciudad. Esta excusa argumental sirvió para mostrar un ramillete de canciones entre las que figuran tres sambas o el Primeiro fado, un tema pensado para el estreno cinematográfico de la mítica Amália Rodrigues, pero que acabó siendo interpretado por Maria Paula.

Una muestra sobre su relación con el teatro

Para completar estas jornadas con aroma luso podemos visitar la exposición El fado y el teatro (hoy y mañana, de 11 a 20 h., Museu Marítim) organizada con la colaboración del Museo Nacional del Teatro y el Museo del Fado. En ella se muestra la relación entre ambos a través de varios soportes, materiales y documentos. Podremos ver disfraces, modelos, caricaturas originales, fotografías, manuscritos o publicaciones y objetos personales. Una completa recopilación de piezas que nos explican la historia de este oportuno maridaje y que puede servir de espléndido colofón a estos dos días de música y cultura portuguesa.