El público infantil toma la gala 'Catalunya Aixeca el Teló'

"Queremos un teatro como el vuestro!". Así de claro hablaron los niños que participaron en uno de los vídeos que más hicieron reír a los asistentes de la gala 'Catalunya Aixeca el Teló', celebrada este lunes en el Gran Teatre del Liceu. Cansados de no poder tener "un teatro como el de los adultos", con los mismos estándares de calidad y profesionalidad, las nuevas generaciones, ese público de hoy y del futuro al que tantas veces se apela en los discursos oficiales, dejaron oír su voz. 

Hasta 150 jóvenes actores y actrices participaron en la gala, presentada por Nonna Cardoner, esa pequeña gran actriz de 12 años que ha aparecido en series como 'Benvinguts a la familia'. Y en la sala tenían a algunos de los máximos responsables culturales y políticos, así como una nutrida presencia del representantes del mundo del espectáculo. José Guirao, ministro de Cultura en funciones; Mariàngela Vilallonga, 'consellera' de Cultura de la Generalitat, y Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, entre otros, escucharon cómo los 'peques' reclamaban mejores presupuestos para el teatro infantil y mayor presencia de las artes escénicas en los programas escolares. 

Premio para La Calòrica

Por segundo año consecutivo, durante la gala se desvelaron y entregaron los Premis Catalunya Teatre, reducidos a tres categorías. La Calòrica ('Els Ocells', 'Fairfly') triunfó como mejor compañía, la Sala Beckett como mejor espacio "por su programación coherente y su apuesta pionera en autoría catalana" y Tricicle recibió el Premio a la trayectoria artística entre una gran ovación. 

La fiesta, con la que desde hace 18 años abre oficialmente la temporada de artes escénicas, fue un toque de frescura pero desigual, con humor y canciones. Oriol Vila y Raquel Salvador (Nico&Sunset), creadores con hijos pequeños y autores de propuestas divertidas como 'Oh mami!' y 'Paradise', dirigieron con buen rimo la gala, animando a Cardoner y sus colegas a transmitir su pasión por las artes escénicas. En definitiva, el teatro es un juego. Los fallos y aciertos durante una función son solo parte de ese juego, de esa magia del directo imposible de reproducir en las pantallas que hoy en día absorben tanto a pequeños como adultos.