CRÓNICA DE FESTIVAL

El rap y trap hechos aquí asaltan el Cruïlla

El festival celebró el jueves una jornada particularmente urbana con directos de Lildami, Ayax y Prok y Natos y Waor

Concierto de Ayax y Prok en el Festival Cruïlla

Concierto de Ayax y Prok en el Festival Cruïlla / periodico

Juan Manuel Freire

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Tras la apertura con Black Eyed Peas del miércoles, el Cruïlla celebró este jueves una segunda jornada extra, dedicada al rap y trap de aquí, con entrada a precio bastante asequible. El intento del festival de hacerse con la atención de un público joven que quizá, en próximos años, se podría plantear desembolsar lo que cuesta un abono completo.

Arrancó, todavía con el bochorno de julio a pleno rendimiento, el trapero Lildami, quien canta (sobre todo) en catalán sobre asuntos cotidianos de amor, sexo y vida. Presentaba 'Flors mentre visqui', un primer álbum “profesional” con ambiciones claramente pop: colaboran en el álbum gente como Oques Grasses o Dorian. Al Cruïlla no acudieron estos invitados, pero Lildami estuvo bien acompañado por el rapero/productor Sr. Chen y la vocalista Emotional Goku, quien se marcó ganchos vocales estilo Skylar Grey.

Fue ella quien puso más carácter reivindicativo a la actuación: antes de 'Pussy song', recordó que las tres personas encima del escenario rechazaban “cualquier forma de odio” y que “la revolución será feminista o no será”. Lildami se guardaba sus palabras más idealistas para 'Noi de l’espai': “Com Bruce Willis a Armageddon/ em sacrifico perquè els meus nens tinguin un futur millor”.

Rabia de clase obrera

Llegó después el turno de los granadinos Ayax y Prok, quienes volvieron a demostrar su increíble aceptación entre el público barcelonés: fans de todas las edades, vestidos con camisetas y repitiendo a voz en grito casi cada verso de estos hermanos gemelos, anticapitalistas, antifascistas y anti todo lo que coarte la libertad o vaya contra las clases más desfavorecidas.

Su primer golpe fue 'De Graná a Maracay', al que siguieron odas antidesahucio ('Desahucio', son más), reflexiones optimistas sobre el amor ('Ese cosquilleo', con una intro tomada prestada a 'El indomable Will Hunting'), recuerdos a la Policía Local ('Polizzia'), recuerdos a los que ya no están ('Dama de la guadaña'), o la líricamente muy creativa 'SakaLaKalashnikov', en la que hay pequeño guiño al referente más claro del dúo, Kase.O (y, por extensión, esa bestia del rap hardcore llamada Violadores Del Verso).

Entre una actuación y otra, distrajeron al personal las batallas de gallos entre Arkano y Blon, alrededor de cuestiones tan diversas como “¿es mejor la paella o el arroz al horno?” o “¿merece la pena el amor?”. A la hora de cierre de esta edición, acababan de saltar al escenario Natos y Waor, encargados de rubricar la jornada con su rap de letras intensas y sonido ecléctico, amigo por igual del sonido noventero, el moderno R&B o los ramalazos EDM.