Siri Hustvedt, Premio Princesa de Asturias de las Letras 2019

Habrá quien todavía siga presentando a Siri Hustvedt, ganadora del Premio Princesa de Asturias de las Letras en su 39ª edición, como la esposa de Paul Auster, pero la escritora norteamericana de origen noruego tiene la suficiente trayectoria literaria de ficción, ensayo y poesía, como para tener una consideración autónoma e importante. Según el jurado del galardón la norteamericano de origen noruego la voz de la autora "es una de las más ambiciosas del panorama actual y incide en algunos de los aspectos que dibujan un presente convulso y desconcertante, desde una perspectiva de raíz feminista". Curiosamente, se da la circunstancia de que su popular marido recibió el mismo galardón bajo la denominación Príncipe de Asturias, en el 2006.  A la escritora la noticia le pilló este miércoles en Londres, donde se encuentra de promoción de su novela, 'Recuerdos del futuro' (Seix Barral). Desde el Instituto Cervantes de esa ciudad se mostró exultante, según informa Europa Press, por una distinción que su marido, curiosamente, ya obtuvo en el 2006. «Yo ya estaba encantada cuando él recibió su premio, así que estoy segura de que él lo está con el mío».

Nacida en Minnesota –feudo de la emigración noruega– en 1955, Hustvedt se dio a conocer internacionalmente gracias a una inquietante novela, 'Todo cuanto amé', que logró que su nombre se apartara definitivamente del apellido Auster, pese a el matrimonio ha compartido algunas inquietudes narrativas como la metaficción o el mundo del arte. Pero la dedicacion a este último en el caso de Hustvedt ha sido más profunda, como crítica de arte.

Paralelamente a la ficción, la escritora también ha cultivado y con gran éxito el ensayo, con un particular interés por la neuropsiquiatría que cristalizó en el muy curioso y aubiográfico 'La mujer temblorosa' –exploración de una rara patología nerviosa que ella misma padece y que la hace convulsionar de pies a cabeza– y a través de numerosas charlas en el ámbito académico como experta en el tema.

Otro de sus caballos de batalla es el feminismo que se ha filtrado en sus novelas – 'El mundo resplandeciente'– y en especial, en los artículos de 'La mujer que mira a los hombres que miran a las mujeres', en los que denunciaba cómo los hombres, significativamente, siguen midiendo su valía exclusivamente frente a otros hombres y ninguneando el valor de las mujeres especialmente si estas son jóvenes. 

En Londres, la autora ha asegurado que la sociedad sigue «necesitando el feminismo porque la historia todavía no ha terminado. Es una forma de librarnos de las cadenas impuestas al ser humano». 'Recuerdos del futuro' (Seix Barral) recoge diversas experiencias de su juventud y etapa de formación en clave memorialística y muchas de las obsesiones que marcan su literatura: como la memoria, la violencia, la frontera entre la lucidez y la locura, el poder del patriarcado. De hecho, Hustvedt tenía que haber venido a Barcelona a presentar esa novela y participar en el festival Primera Persona hace dos semanas, pero un problema de salud se lo impidió.

En la lista de los galardonados con el Príncipe, actualmente Princesa, de Asturias de las Letras, Hustvedt es la octava mujer en lograrlo aunque en los años 1988 lo lograra Carmen Martín Gaite (ex aequo con el poeta José Ángel Valente y en el 2003 el tándem lo formaron la escritora marroquí Fatima Mernisi y la norteamericana Susan Sontag. Doris Lessing lo obtuvo en el 2001, cuando hacía solo dos años que el premio se había abierto a un ámbito internacional más allá de la lengua castellana y le  siguieron la brasileña Nélida Piñon, Margaret Atwood (mucho antes de que se hiciera mundialmente famosa gracias a la adaptación televisiva de su 'Cuento de la criada') y la autora de novelas policiacas Fred Vargas el pasado año.