LA EMOCIÓN DE LA VOZ

El Cor de Noies del Orfeó Català se gradúa en Berlín

El joven grupo barcelonés supera con nota su debut en la Philharmonie en un concierto junto a diversas corales dirigido por Simon Halsey

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Una calurosa ovación del público culminó el maravilloso concierto en la icónica Philharmonie de Berlín del Cor de Noies del Orfeó Català, junto con otros coros, este domingo por la noche, en el que se interpretaron dos piezas de compositores de hoy. Abrió boca el estreno de 'Friday afternoon', del estadounidense Nico Muhly, que sonaba por primera vez con orquesta y coro. Una pieza exigente que Simon Halsey capitaneó con extrema precisión. Se notaba su tremenda experiencia, correspondida además por la concentración y entrega tanto de la treintena de instrumentistas -la mayoría de la aclamada Filarmónica de Berlín- como de los cantores desde los 7 a los 23 años pertenecientes a una docena de coros, la mayoría de Alemania, aunque también había uno procedente de Roma.

En la segunda parte del concierto interpretaron 'There was a child', un oratorio moderno de Jonathan Dove para solistas, coro adulto y coro de niños que puso la piel de gallina interpretado por las 530 voces participantes, que alcanzaron momentos de gran intensidad. 

Aunque el tenor Toby Spence estuvo mejor que la soprano Kirsten MacKinnon, en conjunto el público disfrutó con este concierto incluido en el proyecto social de los coros de la Philharmonie. 'Vocal Heroes', así se llama este proyecto de Halsey -máximo responsable coral del Orfeó Català que desde hace años trabaja en Berlín, Birmingham y Ámsterdam con proyectos similares- destinado a dar a conocer la música a colectivos con dificultades para acceder a ella.

Agotado

No había entradas. Costaban cinco euros y se habían agotado. Muchos tenían a familiares entre el público. Las chicas del coro catalán, dirigido por Buia Reixach y con voces de 16 a 25 años, tenían a una treintena de socios del Orfeó que se habían desplazado al evento.

En el concierto los cantores sintieron y transmitieron la fuerza de la música. La pieza de Dove, de quien las chicas del Cor de Noies ya escenificaron ‘El monstre al laberint’ en el Grec hace casi un año, conectó con la audiencia. Aunque recuerda a un chico que falleció en accidente a los 19 años, es una obra llena de luz cuya música combina momentos de gran intensidad con otros muy líricos, a partir de una magnífica selección de poemas de John Keats, Emily Dickinson y Walt Whitman, entre otros. Bien dosificadas, las proyecciones que acompañaron la puesta en escena contribuyeron a resaltar ciertos pasajes.

"Pone los pelos de punta cantar esta música dedicada a un chico que murió cuando tenía nuestra edad. Pero el concierto nos ha hecho pensar en él y creo que estará contento de ser recordado", afirmó Judit Canovas, una de las integrantes del Cor de Noies tras el concierto. Tanto ella como sus compañeras estaban exultantes y fueron a pedir al compositor que les firmara la partitura. "Al principio venir aquí imponía un poco. Pero no hemos notado diferencia con los coros alemanes, donde el nivel es alto. Todas las voces han empastado bien", añadió la cantante. 

Subir el listón de la calidad musical de los coros del Orfeó Català y ponerlos en el mapa era el objetivo principal que Mariona Carulla y su equipo se propusieron tras el descrédito del Palau a raíz del 'caso Millet'. El fichaje de una personalidad como el inglés Simon Halsey -esta es su tercera temporada y acaba de renovar por dos más- está dando sus frutos. El concierto en Berlín es un ejemplo del nuevo rumbo emprendido. Y se suma a una lista considerable de actuaciones en el extranjero de los diferentes coros, que han alzado su voz en países como Austria, Italia, Portugal, Inglaterra e incluso en China esta misma temporada. Pero siempre se puede mejorar.