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La mayoría de películas ganadoras de los Oscar aún pueden verse en los cines

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Eduardo de Vicente

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Ya tenemos resultado para los Oscar de este año, se acabaron las especulaciones y quinielas y el palmarés, guste más o menos, ya lo conocemos todos. Es una práctica habitual que, tras la decisión, las películas ganadoras amplíen las pantallas en las que se proyectan para hacerlas accesibles a más espectadores, pero este año no ha hecho falta ya que la mayoría siguen en cartel. Es una oportunidad estupenda para disfrutarlas en el cine, el medio para el que fueron concebidas (sí, incluso Roma

La ganadora, Green Book (película, guion adaptado y actor secundario) es una película amable, sin estridencias, ambientada en el Nueva York de 1962. Cuenta la relación de un tipo de origen italiano con su nuevo jefe, un pianista afroamericano que le contrata para ser su chófer durante una gira por el sur de EEUU. Un duelo de actores que sirve para denunciar los prejuicios raciales que existen en su país. Quizás no fuera la mejor, pero sí la que ponía a casi todos de acuerdo en que no estaba mal. La proyectan aquí.

La mejor fotografía del año

La otra gran triunfadora, aunque no se llevara el premio gordo, fue Roma, el drama sobre la infancia de Alfonso Cuarón centrado en la humilde indígena que trabajaba para su familia. Se llevó el premio al mejor director, película extranjera y fotografía, en blanco y negro. Para apreciar mejor la justicia de este último galardón vale la pena verla en pantalla grande en el Verdi, la única sala barcelonesa donde ha podido exhibirse desde principios de diciembre… y allí sigue.

Sentirse en el centro de un concierto de rock

Este año las estatuillas han estado muy repartidas por lo que también podemos considerar una vencedora a Bohemian Rhapsody que ha pasado de ser una película a convertirse en un fenómeno con espectadores que la ven dos y tres veces. Esta biografía edulcorada de Freddie Mercury destaca por sus canciones y sus espectaculares números musicales. De hecho fue la ganadora en número de estatuillas siendo la única que consiguió cuatro. No solo se llevó el mejor actor (Rami Malek), sino también el de montaje y los dos de sonido y dónde se puede escuchar mejor que en los cines

La favorita estuvo a punto de ser la gran perdedora ya que tenía el contador a cero hasta que Olivia Colman dio la (pequeña) sorpresa arrebatándoselo a Glenn Close y salvando los muebles para este drama histórico del griego Yorgos Lanthimos que aspiraba a mucho más. Es una especie de Eva al desnudo pero ambientada en el siglo XVIII y cuenta el duelo entre una duquesa, amante y consejera de la reina, y una joven que pretende usurpar su puesto de privilegio. Destaca por sus interpretaciones y su ambientación, aunque no consiguiera esos premios que merecía y que se disfrutan mucho más en las salas.

Un maquillaje imperceptible

El vicio del poder es la gran olvidada, el vitriólico y despiadado retrato de Dick Cheney que es el biopic más original rodado en Hollywood, con mucho humor y sin dejar títere con cabeza. Tuvo que conformarse con ganar en maquillaje y peluquería pese a que Christian Bale y Amy Adams también hubieran sido justos ganadores. Si la vemos en cines podremos admirar mejor el asombroso trabajo realizado en estos departamentos para conseguir que no se notasen las prótesis y otros recursos para que los actores se parecieran a los personajes originales.

Disfrutar al máximo con Lady Gaga

Para acabar, los fans de Lady Gaga pueden escucharla en toda su plenitud en Ha nacido una estrella donde no solo interpreta la canción ganadora, Shallow, sino también muchas otras, algunas de ellos memorables. Al igual que en Bohemian Rhapsody, la pantalla se convierte en el auditorio ideal para escuchar con atención sus temas aprovechando las nuevas mejoras de sonido de las salas.

Sí, también existe la opción de ver algunas de ellas en diversas plataformas o formatos domésticos. No se trata de aferrarse al pasado y no querer avanzar, pero la majestuosidad del cine y los avances tecnológicos en materia tanto de imagen como de sonido hacen que la experiencia no sea comparable a lo que podemos conseguir con un visionado casero. Unos Oscar de cine.