NOVEDAD EDITORIAL

Una novela llamada 'Novel.la'

Quaderns Crema insufla nuevos aires a su catálogo con el debut del catalán Pol Beckmann

El escritor Pol Beckmann, en el jardín de un céntrico hotel barcelonés.

El escritor Pol Beckmann, en el jardín de un céntrico hotel barcelonés. / periodico

Elena Hevia

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Pol Beckmann se llama en realidad Pol Beckmann. Es un autor debutante con el que la veterana editorial Quaderns Crema pretende nutrirse de sangre nueva. Lo curioso es que siendo nueva, la obra de Beckmann (Barcelona, 1991) se desliza suavemente por unos raíles que ya son marca de la casa. Así que se podría decir que se parece a Sergi Pàmies, en lo tocante a sencillez o a Quim Monzó, por sus ganas de jugar con el lector. Y remontándose más atrás su literatura comparte con Francesc Trabal el perfume de la modernidad y del sentido humor. Beckmann lo demuestra ya desde la portada, en el mismo título. ¿Qué ha escrito? Una novela. Pues su novela se llama así. ‘Novel.la’. “Más allá de la posible ocurrencia, el título no es gratuito”, asegura Beckmann, 27 años, que ha trufado la obra de referencias metaliterarias gracias a su protagonista, un escritor obsesivo y enloquecido que pese a llamarse Bekman (con solo una ka y una sola ene) no es exactamente Beckmann. “Cogí lo que tenía más a mano, una deformación de mi nombre como el personaje es una posible deformación de mí mismo”. Pero, espera que el lector no crea que el autor está tan desequilibrado e insatisfecho como su criatura.

Aviso para navegantes, la novela parte de un triángulo amoroso muy poco convencional formado por el escritor, su esposa y Sofía, una mujer de ensueño de la que solo en la página 50 sabremos exactamente quién es. ¿Alguien real o un producto de la locura? “Aunque en la novela ocurren cosas ‘bizarras’ y el protagonista lo es, no la concebí para ser una novela gamberra”.

‘Novel.la’ se mueve en ese terreno inestable en el que la realidad y la ficción se confunden, un tema que a Beckmann le interesa particularmente porque nutre la mayor parte de los cuentos todasvía inéditos que escribió antes que esta novela. “Ese equilibrio entre realidad y ficción es algo que todos en mayor o menor medida acabamos construyéndonos. Cuando pensamos en nuestros planes de futuro, posibles o más bien imposibles, lo que hacemos es jugar con nuestra fantasía, algo que necesitamos para sobrevivir al tedio cotidiano y la rutina”, explica el autor que recientemente se asomó al ensayo ‘La verdad de las mentiras’ de Mario Vargas Llosa, que le reiteró esa idea. “Vargas Llosa habla de la necesidad humana de fabulación, para que la vida nos parezca más cómoda. Eso es, sencillamente, el origen de la literatura”.