LA GRAN CITA DEL CINE FANTÁSTICO DE CATALUNYA

'Desenterrando Sad Hill', la resurrección del cementerio de 'El bueno, el feo y el malo'

El documental de Guillermo de Oliveira relata la conmovedora restauración del escenario del duelo final de 'El bueno, el feo y el malo' por parte de un grupo de entusiastas de la obra maestra de Leone

ICULT  SITGES documental DESENTERRANDO SAD HILL

ICULT SITGES documental DESENTERRANDO SAD HILL / periodico

Julián García

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La escena cumbre de 'El bueno, el feo y el malo', de Sergio Leone, tiene lugar en el imponente cementerio de Sad Hill, con su círculo central empedrado y las más de 4.000 cruces a su alrededor, en el que se enfrentan en duelo triangular Clint Eastwood, Eli Wallach y Lee van Cleef. Aunque la acción transcurría en el lejano Oeste durante la guerra de secesión norteamericana, Sad Hill se alzaba en suelo hispano, concretamente en los términos municipales de Contreras y Santo Domingo de Silos, en la provincia de Burgos. La gran estructura construida por un regimiento de militares españoles fue abandonada justo después del rodaje y quedó sepultada por el paso del tiempo, sin que nada, salvo insignificantes vestigios entre matojos, hiciera recordar que ahí se rodó una de las películas más grandes de la historia.

En el documental 'Desenterrando Sad Hill', presentado este domingo en Sitges, el cineasta vigués Guillermo de Oliveira relata la conmovedora de aventura de un grupo de entusiastas a los que la obra maestra de Leone marcó sus vidas y que en los últimos años han dedicado su tiempo a reconstruir piedra a piedra la legendaria localización del cementerio. Una emotiva labor de arqueología sentimental, de preservación de la memoria fílmica y de reivindicación del arte como espacio de culto. "Sobre todo es una historia muy  bonita sobre unas personas dispuestas a hacer algo tan poético e idealista como desenterrar y devolver a la vida el cementerio de su escena favorita de siempre", explica De Oliveira en conversación con este diario.

El documental ha crecido en paralelo a la laboriosa restauración de Sad Hill. "Soy un fanático de las localizaciones, de esos que se van a Filadelfia y se hacen la foto en la escalera de 'Rocky'", recuerda el director. "Un amigo me dijo que había escuchado por la radio que el cementerio de 'El bueno, el feo y el malo' no solo seguía existiendo enterrado bajo 48 años de vegetación, sino que había una asociación de gente de Burgos que quiería restaurarlo”. A finales del 2014, De Oliveira empezó a seguirles la pista a través de Facebook y, cuando vio que la Junta de Castilla y León les daba permiso para empezar a desbrozar y cavar, decidió ponerse en acción. "Mi idea inicial era grabar un par de fines de semana para hacer una pieza de Youtube o, como mucho, un cortometraje. El documental ha ido creciendo en paralelo a la laboriosa reconstrucción de Sad Hill, con financión a través de 'crowdfunding'. Ni yo me podía imaginar que podría entrevistar a la gente que he entrevistado, ni tampoco podía imaginar que todo aquello acabaría bien, porque al principio solo eran cuatro gatos".

Entrevistados de lujo

Tiene razón el director, porque a base de una tenacidad a prueba de bomba consiguió entrevistar a personajes estrechamente vinculados al universo de Leone y, en concreto, de ‘El bueno, el feo y el malo’, como el montador Eugenio Alabiso, el diseñador de producción Carlo Leva, el biógrafo Christopher Frayling, el compositor Enio Morricone y, atención, el mismísimo Clint Eastwood. También habló con reconocidos fans del filme como Joe Dante, Alex de la Iglesia y James Heitfeld, cantante de Metallica. "Solo me da pena no haber podido contar con Tarantino, pese a los meses de esfuerzo, porque él siempre ha dicho que es su película favorita de la vida", explica De Oliveira, que ha venido a Sitges acompañado de dos de los miembros más activos de la Asociación Cultural Sad Hill, Joseba del Valle y Sergio García. “Ellos son, en realidad, los protagonistas de esta historia. Sin ellos nada de esto habría sido posible”.

Uno de los momentos más emotivos (de esos que hacen brotar lágrimas a chorro) de ‘Desenterrando Sad Hill’ tiene lugar el día en que la asociación celebra el 50º aniversario de ‘El bueno, el feo y el malo’, la noche del 24 de julio del 2016, con el camposanto felizmente restaurado. Cerca de 4.000 fans de todo el mundo acuden a disfrutar de su película favorita en una pantalla gigante instalada al aire libre. Antes, se proyecta un vídeo en el que Morricone y Heitfeld les agradecen el esfuerzo de haber hecho revivir el recuerdo de un viejo sueño. Y por sorpresa, sin que nadie allí lo sepa salvo el propio De Oliveira, aparece Eastwood en pantalla mirando a los ojos del grupo de utopistas. La emoción de los allí reunidos, el júbilo sincero de su grito al ver a la leyenda dirigiéndose a ellos, es sobrecogedora. Como si todo en la vida adquiera sentido en ese momento.