CRÓNICA

Ruth Iniesta, una gran actriz cantante

La soprano aragonesa triunfó en su debut en el Festival Life Victoria junto a un brillante Rubén Fernández Aguirre

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Pablo Meléndez-Haddad

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Noche feliz, emocionante y triunfal la de la segunda velada de la edición 2018 del Festival de Lied Life VictoriaLied de Barcelona celebrada en el recinto modernista de Sant Pau el pasado sábado. Contó con el protagonismo de un auténtico maestro del teclado como es el vasco Rubén Fernández Aguirre y de la soprano de Zaragoza Ruth Iniesta, un volcán de energía y talento.

El pianista vasco acompañó con total destreza a la intérprete aragonesa, pero también a la joven Núria Vinyals, quien abrió la velada como parte del Life New Artists, el miniciclo dedicado a los teloneros de los recitales oficiales. Mezzosoprano lírica de voz muy atractiva y de ecos sopraniles, abrió fuego con tres hermosas canciones de Granados que le quedaban en el pasaje, salvo Cançó d'amor, ideal para ella. En las notas de paso debería concentrar su trabajo, pero aun así ella supo cómo llevarse las partituras a su terreno tal y como lo demostró en unas muy interiorizadas Cinco canciones negras de Montsalvatge, interpretadas con amplio sentido dramático y ante el hijo del añorado compositor catalán.

Homenaje a Bernstein

Otro hijo de ilustre acompañó el recital: Álex, el hijo Victoria de los Ángeles, que disfrutó con una velada en la que los intérpretes subieron al escenario para darlo todo. Ruth Iniesta se metió al público en el bolsillo con un brillante homenaje a Bernstein: su dominio del teatro musical es absoluto convirtiendo cada canción en oro puro. La cantante española, que en el Liceu debutó en Il viaggio a Reims hace un par de temporadas y que en el Life Victoria realizaba su presentación como recitalista en Barcelona, dictó cátedra en momentos como los alcanzados en ' A little bit in love' (de Wonderful Town) y, sobre todo, en  'Im’a a person too', que concluye el ciclo I hate Music. Iniesta propuso cada frase cargada de sentido, subrayando intenciones con gestos y miradas. Su Wendy de Peter Pan ('Build My House') resultó emocionante, coronada con un soberbio regulador, para llegar al corazón de todos con un poderoso 'I feel pretty' de West Side Story en la que derrochó vozarrón acompañada de la chispeante participación de Judith Muñoz, Violeta Alarcón y Helena Ressurreiçao, todas con el preciso acento hispano.

Dicción clara y transparente

En la segunda parte se ofrecieron las Doce canciones españolas de Joaquín Rodrigo aderezadas como corresponde, con salero y quiebres andaluces si era menester, pero también luciendo un fraseo de ensueño en, por ejemplo, 'Una palomita blanca'. Sus dotes de actriz y de intérprete llegaron subrayados por una dicción clara y transparente tanto en inglés y castellano como en francés.

Fernández Aguirre saltó de estilo en estilo sin arrugarse, dominando cada canción con absoluta sapiencia y brillando con luz propia.

Cerraron el programa dos canciones francesas, también de Rodrigo, cantadas casi como un monodrama por la intensidad dramática aplicada.  

Como regalo hubo más música lírica marca España: se ofreció la 'Habanera'  de Esperanza, de la zarzuela Monte Carmelo de Moreno Torroba, con variaciones belcantistas incluidas.