El Ayuntamiento de Barcelona dice no necesitar el Hermitage

La llegada a Barcelona de una sucursal del museo Hermitage de San Petersburgo sigue siendo incierta. El proyecto no cuenta, por el momento, con la bendición del Ayuntamiento. En declaraciones a ACN, el comisionado de Cultura, Joan Subirats, asegura que no es una iniciativa que desde el Consistorio “sientan la necesidad de llevar a cabo”. En primer lugar el comisionado quiere garantías de que el proyecto “sea rentable económicamente”, ya que, dice, de ninguna manera el Ayuntamiento asumirá el mantenimiento de la franquicia. Además Subirats, se pregunta si caso de llevarse a cabo el proyecto, que tiene carácter privado, tendrá “la calidad artística necesaria” y asegura que le sorprendió el escaso espacio expositivo previsto en el proyecto que le mostró hace unos meses la directora ejecutiva, Rosa Carretero. “No sé si aquel era el último proyecto en el que están trabajando”, ha dicho Subirats. Para despejar todas esas dudas el Ayuntamiento ha encargado un informe económico, otro artístico y un tercero urbanístico que espera poder tener pasado el verano.

El proyecto de la franquicia de la pinacoteca rusa se anunció en el 2012, bajo el mandato de Xavier Trias, pero seis años más tarde el proyecto sigue en dique seco. Lo único que han conseguido sus impulsores es el cambio de utilización de la nueva bocana del Port de Barcelona, necesario para poder instalar el equipamiento.

Entre las incertidumbres que tiene el Ayuntamiento se suma el fallecimiento de Jorge Wagensberg, desaparecido en marzo de este año, que sumía las funciones de director artístico y científico del futuro museo. “Hemos de ver como se concreta el proyecto, porque no sabemos qué repercusiones ha tenido su lamentable desaparición en su continuidad”, apunta el comisionado.