La 'consellera' Borràs aspira a destinar 65 euros por habitante y año a la cultura

La 'consellera' de Cultura, Laura Borràs, ha señalado este martes que le gustaría en el futuro poder destinar unos 65 euros por habitante y año a la cultura, lo que supondría un presupuesto de unos 487 millones de euros, el doble del actual.

En su primera comparecencia parlamentaria como titular de Cultura, Borràs ha reconocido, sin embargo, que "un objetivo de mandato posibilista" sería llegar a los 320 millones de euros y "fijar el objetivo final para una doble legislatura".

Durante la comisión, los grupos de Ciudadanos, PSC y PP le han reprochado que hubiera firmado el Manifiesto Koiné, en el que se reclamaba que el catalán tuviera estatus de "lengua territorial" en una Catalunya soberana, a lo que la 'consellera' ha respondido que lo firmó a título personal y defendiendo que se trata de un documento que "explica el contexto en el que nos encontramos".

La 'consellera', asimismo, ha recalcado que quiere situar la cultura en "un lugar central de las políticas transversales del Govern" y que los recursos se puedan "homologar" a los estándares europeos vigentes.

Propuestas para los próximos meses

Reactivar la tasa del audiovisual que anuló el Tribunal Constitucional, crear un carnet cultural de Catalunya, programas para incentivar la lectura o desplegar el plan de museos, el Plan Estratégico de Monumentos y Yacimientos, así como la ley de patrimonio inmaterial, son otras de las propuestas del departamento para los próximos meses.

Laura Borràs ha afirmado que la cultura forma parte "inseparable" del estado del bienestar y, a pesar de que "este 'mantra' ha sido repetido por todos los agentes profesionales del ámbito cultural, sin embargo, no ha conseguido, después de diversas décadas, encontrar un eco apropiado en el marco de la asignación de presupuestos".

En una sala en la que se encontraban algunos de sus colaboradores más próximos, así como representantes de instituciones como el TNC o el Institut Ramon Llull, se ha comprometido a trabajar para revertir esta tendencia y para crear "una comisión delegada del Govern en Cultura", con la participación de otros departamentos con los que se establecen relaciones de forma directa, pero también con "Salud, Exteriores o Justicia".

Citas de escritores

Durante un discurso en el que no ha olvidado incluir citas de escritores, desde Stendhal a Montserrat Roig o Mercè Rodoreda, ha abogado para "preservar la memoria y para preservar el futuro" y ha subrayado que "la cultura no se debe medir solo en términos de rendimiento económico". "Reivindico la valiosa y necesaria inutilidad de la cultura", ha apuntado.

Tampoco ha obviado cómo han transformado al sector las nuevas tecnologías y lo que ha supuesto de creación de nuevas disciplinas y profesiones y ha mantenido que "la política lingüística es un elemento fundamental para la cohesión". Por otra parte, ha hablado de "internacionalización" de la cultura catalana y de que debe ser "puente" en el área mediterránea.

La oposición

En el turno de intervención de los grupos de la cámara, el diputado de Ciudadanos, Héctor Amelló, ha sostenido que la visión de Borràs es "supremacista, excluyente, reaccionaria y sectaria" y ha agregado que ha puesto la cultura "al servicio de su ideología".

El diputado socialista Rafael Bruguera ha lamentado que hubiera firmado el Manifiesto Koiné porque cree que vulnera artículos del Estatut y porque "sin la inmigración no podríamos entender la Catalunya de hoy". A su juicio, debería rectificar, "en caso contrario, sabe mal, pero creemos que estaría inhabilitada para ejercer".

El diputado del PP Alejandro Fernández se ha mostrado totalmente de acuerdo con Bruguera, a la vez que ha acusado a la 'consellera' de "cierta hispanofobia" por algunos de sus tuits.

En el turno de réplica, Borràs ha leído el punto cuarto del Manifiesto Koiné en el que se ve el "multilingüismo como una riqueza" y en el que se apuesta "por medidas para que todo el mundo se sienta reconocido e incluido en un país normal, también en lo que respecta a la lengua". "Si alguien no está de acuerdo con ello, tenemos un problema", ha concluido.