Dolo Beltrán: "Con 'Copilotos' quiero reivindicar los 40"

Dejando atrás una década como cantante de Pastora, Dolo Beltrán estrenó el año pasado su carrera solista con ‘Copilotos’, un disco que desarrolla su lado más electrónico sin apartarse de la canción pop. Lo muestra, acompañada de tres músicos, este viernes en El Molino (Festival Mil·lenni).

¿Se decidió a grabar en solitario porque Pastora se separó contra sus deseos?

Bueno, en teoría abrimos un paréntesis, solo que se ha alargado. Aún nos queda hacer un disco para Sony. Yo estaba bien en el grupo, pero Pauet [Riba] quería dejar la música y Caïm [Riba] aprovechó para emprender un proyecto en solitario. Hubo un parón allá por el 2013. El último concierto fue en Formentera.

Aquí firma por primera vez tanto músicas como letras. ¿De dónde sale la motivación para hacer estas canciones?

De las ganas de reflejar un momento, el de cumplir 40 años, cuando con el parón de Pastora parecía que había terminado una etapa en mi vida. No me daba la gana resignarme y quise hacer un disco positivo, de bailar y reivindicar los 40, una edad que no tiene nada que ver con ser mayor. El mensaje del disco es transmitir ganas de bailar la vida.

¿A qué ‘copilotos’ se refiere?

Esta canción se la hice a mi pareja, es una canción de amor, pero luego me quedé embarazada, de modo que durante la creación del disco tuve un copiloto dentro de mí. Y de hecho he necesitado otros copilotos para sacarlo: Sergio Fernández, ‘discjockey’ y productor, el guitarrista Jordi Busquets… Así que no es del todo preciso hablar de disco en solitario.

¿No se siente del todo a gusto siendo Dolo, cantante solista?

Sí, pero ahora estoy pensando en formar un grupo. Con Jordi estoy preparando un nuevo disco, si todo va bien para sacarlo en la primavera del año que viene, y me apetecería más ponerle un nombre de banda. Aún no lo tengo claro.

El disco suena muy electrónico y ‘dance’. ¿Son esas sus raíces musicales?

Sí, la música electrónica de finales de los 90, los primeros 2000, de Massive Attack, Gus Gus… Todo aquello me atrapó. Y cada vez me gusta la electrónica más dura: Gui Boratto, Eelke Kleijn…  Música que me flipa bailar. Entonces, mi propósito es que las canciones electrónicas no sean vacías, que no sea todo “rhythm of the night”, para escuchar a las cinco de la madugada.

¿Diría que hace canciones porque necesita hacerlas?

Sí, y sobre todo estar en un escenario. Al final creo que todo esto es por eso, por estar ahí arriba. De cría, cuando me apuntaron a extraescolares e hice teatro comencé a sacar mejores notas y me empezó a interesar más la vida.

Con Pastora cultivó un personaje. ¿Ya quedó atrás?

Sí, eso fue sobre todo al principio. Yo venía del teatro, de trabajar personajes, y al salir al escenario siendo yo misma no sabía qué hacer, ¡salía con gafas de sol! Pemi Fortuny, de Lax’n’Busto, me dijo “¡quítatelas, mujer!”. Lo hice y entonces me salió aquel acento. Era como ponerme una máscara. De todas formas, en el escenario siempre hay un poco de caricatura tuya.

"Me apetece reivindicar que soy hija de inmigrantes y que el catalán lo he aprendido sin que nadie me obligara"

¿Interpreta canciones de Pastora en sus conciertos?

Sí, en versión acústica. ‘Lola’ la suelo cantar, y para abrir los conciertos. ¡La canto y me olvido de ella! Nunca me he cansado de ella, ¿eh? Me sigue dando buen rollo.

Participa en la nueva campaña de Plataforma per la Llengua, ‘El català, llengua comuna’. ¿Qué le ha movido a implicarse?

Me apetece reivindicar que soy hija de inmigrantes, de Sant Boi, y que el catalán lo he aprendido de mayor, sin que nadie me obligara, y que me ha dado muchas alegrías. Porque a veces, desde fuera, parece que aquí si no hablas catalán te meten una paliza.