LA CUENTA ATRÁS DE LOS PREMIOS DE LA ACADEMIA DE HOLLYWOOD

Roger Deakins versus Rachel Morrison, duelo en la cumbre

Un veterano nominado 14 veces se disputa el Oscar a mejor fotografía con la primera mujer nominada en esta categoría

Los directores de fotografía Roger Deakins y Rachel Morrison

Los directores de fotografía Roger Deakins y Rachel Morrison

Juan Manuel Freire

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Será difícil que en los Oscar de este año se repita un clímax como el del baile de sobres del 2017, pero habrá tramos con emoción. Hay intriga por saber, digamos, si la estatuilla al mejor director es para el solo quinto afroamericano (Jordan Peele) o el solo quinto latinoamericano (Guillermo Del Toro) nominados en esa categoría.

Y otro duelo con interés es el que enfrenta, en el apartado de mejor fotografía, al 14 veces nominado (la última, por 'Blade Runner 2049') Roger Deakins con la primera directora de fotografía nominada en los noventa años de historia de estos premios: Rachel Morrison, por 'Mudbound'.

¿A la decimocuarta irá la vencida para Deakins? Así debería ser, seguramente. Pero, ¿piensa despilfarrar la Academia la oportunidad de hacer historia premiando a Morrison? No tengan eso tan claro. 

Roger Deakins, el tercer Coen

Cultivado en la Bath School of Art of Design, Deakins (68 años) inició su carrera a mediados de los 70 en el campo del documental y de los videoclips (filmó mucho a Madness). Uno de sus primeros trabajos más reseñables fue '1984', dirigida por Michael Radford, con quien colaboraría hasta tres veces, igual que con Sam Mendes y Denis Villeneuve.

Pero su relación artística más fructífera no es ninguna de estas. Poco después de debutar en Estados Unidos con 'Las montañas de la luna', rodó 'Barton Fink' con los Coen, de quienes se haría casi inseparable: ha trabajado en 12 de sus últimas 14 películas. Fue nominado al Oscar por 'Fargo', 'O brother!', 'El hombre que nunca estuvo allí', 'No es país para viejos' y 'Valor de ley'. Antes de 'Fargo', ya había estado nominado por 'Cadena perpetua' de Frank Darabont.

El nombre de Deakins ha sido, a lo largo de los años, garantía de experiencia placentera desde un plano estético. Su dominio de la luz y el color, a menudo exaltado en tonos profundos, ha dado vuelo a películas tan distintas como, por citar varias al azar, 'Lunes tormentoso' (con toda la lluvia maravillosa prometida por el título), 'En honor a la verdad' (el desierto de Tejas convertido en un Kuwait espectral) o 'Duda' (a la gloria por la austeridad).

'Blade Runner 2049' ha sido discutida en muchos aspectos, de su guion a la labor de los intérpretes, pasando por el relajado montaje, pero nadie discute la labor de Deakins, quien se atreve a bañar de luz cálida la mansión del villano y a filmar el clímax final en un mar a oscuras.

Rachel Morrison, futuro de la profesión

Incapaz de decidirse entre fotografía y cine, Morrison (39 años) se graduó en ambas carreras en la Universidad de Nueva York. Al comienzo de su trayectoria trabajó, curiosamente, en el programa de MTV 'Room raiders', ese en el que un hombre o una mujer elegían a su pareja para una cita después de inspeccionar a fondo sus dormitorios.

Tras esta inolvidable mezcla de reality y thriller de invasión doméstica, pasó a un tema más serio (los servicios educativos en prisión) con el documental 'Rikers High', que le valió una nominación al Emmy. Después de trabajar en la película indie 'Palo Alto, CA' (no confundir con la 'Palo Alto' de Gia Coppola), volvió a la telerrealidad con 'The hills', emblemática emisión de MTV sobre jóvenes con dinero que beben, se pelean, se enrollan y acaban casi siempre llorando.

La buena recepción en festivales (incluyendo Sitges) del thriller de ciencia ficción 'Sound of my voice', revelación de la actriz-guionista Brit Marling, dio un empujón a la carrera en el cine de Morrison. Poco después estaba rodando 'Fruitvale Station' con Ryan Coogler, futuro director de 'Black Panther', quien la volvió a solicitar para este exitoso blockbuster.

Hace unos años, pintó la comedia hip hop 'Dope' con colores seductores, pero ha sido la fotografía mucho más cruda de 'Mudbound' la que más nominaciones y premios (por ahora, sobre todo nominaciones) le ha valido.

El futuro es suyo, y de otras mujeres, espera Morrison. Hace unos días explicaba a 'The New York Times Magazine': "La dirección de fotografía tiene que ver con cosas que nosotras hacemos bien: es multitarea, es empatía y es conducir imágenes hacia las emociones humanas".