CASTELLANO

La RAE introduce en el diccionario expresiones como posverdad, buenismo y postureo

La versión en línea 23.1 incorporá más de 3.000 enmiendas y también matiza que "sexo débil" es una expresión "despectiva o discriminatoria"

El Periódico / Agencias

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'Buenismo', 'postureo', 'posverdad y 'aporofobia' son algunas de las nuevas palabras incluidas desde este miércoles en el Diccionario en red de la Real Academia Española, según han anunciado hoy el director de la institución, Darío Villanueva, y la directora del texto, Paz Battaner. Las academias de la lengua española, tanto la RAE como las latinoamericanas, han ido incorporando a lo largo del año 2017 3.345 modificaciones entre nuevos artículos, nuevas definiciones en artículos ya existentes o matizaciones en las definiciones, además de supresiones de vocablos que ya no se utilizan.

Entre estos cambios se encuentra también la matización de que "sexo débil" se trata de una expresión "despectiva o discriminatoria", como ya anunció que haría el pasado mes de marzo. 'Sexo débil' es una expresión que existe en inglés, en francés y en italiano, ha recordado Villanueva, y que en su día "se utilizó positivamente", contexto que con el tiempo se ha modificado. El director de la RAE ha insistido en que el diccionario "no crea o inventa palabras y no es "una fotografía del vocabulario de hoy, sino también del que hemos heredado".

Dentro del ámbito del debate sobre sexo, feminismo y lengua, respecto a la inclusión del término "heteropatriarcado" el director de la Real Academia ha indicado que están "en ello" y que esperarán a la consolidación de su uso ya que uno de los criterios para introducir neologismos es la frecuencia en su utilización. El director de la RAE ha insistido en que "jamás" harán un Diccionario "políticamente correcto" ya que sería "destruirlo" pero ha explicado que están trabajando en que sea el "más igualitario" hasta la fecha.

Cambios de criterio

En el Diccionario se ha revisado la denominación de "oficios" que solo estaban en género masculino, como "jueza", que se recogía hasta ahora como "mujer de juez", o "embajadora", como "mujer de embajador". El diccionario también distingue ahora entre carácteres sexuales primarios y secundarios y modifica las definiciones de 'macho' y 'machismo'.

El diccionario ha incorporado términos que reflejan nuevas realidades sociales o conceptos que han entrado en el lenguaje común, como 'acoso escolar', 'antropocentrismo', 'aporofobia' ("fobia a las personas pobres o desfavorecidas"), 'buenismo' ("actitud de quien ante los conflictos rebaja su gravedad, cede con benevolencia o actúa con excesiva tolerancia"), 'especismo' ("Discriminación de los animales por considerarlos especies inferiores") o 'posverdad' ("distorsión deliberada de una realidad, que manipula creencias y emociones con el fin de influir en la opinión pública y en actitudes sociales").  

También entran términos vinculados a las nuevas tecnologías: 'audiolibro', 'clic', 'cliquear' y 'cliqueo', 'craker', 'hacker', 'holter', 'pinchar' 

La incorporación de los usos del español en América Latina también ha dejado su huella, con entradas nuevas o modificadas como 'chicano', 'chusmear', 'vallenato', 'juan', 'lacho', 'ña', 'ño',  'latino', 'leche asada', 'macegual' o 'niguatoso'. También se van incorporando, a medida que la academia considera que ya están acuñadas, palabras de uso coloquial: en esta nueva versión, por ejemplo, 'bocas', 'notas', 'pasada' y 'postureo'. Algunos campos temáticos han entrado también en el diccionario, como el yoga, con palabras como 'asana' y 'chakra'. 

Anglicismos

Villanueva ha aprovechado la presentación de la nueva versión de Diccionario en línea para hacer un llamamiento contra la incorporación "indiscriminada" de anglicismos en la lengua castellana. "Si bien la Academia no está cerrada a la incorporación de extranjerismos, sí nos preocupa la reiteración excesiva del uso de palabras en inglés sin que sea necesario", ha apuntado.

La 'versión 23.1' del diccionario incorpora algunos anglicismos ('clic', 'táper', 'trávelin' y, aunque en estos casos en cursiva,  'craker' , 'hacker', 'fair play' y 'holter') y palabras procedentes de otras lenguas, como 'halal', 'hummus', 'kosher', 'umma' o 'sharía'.

Entre los anglicismos innecesarios, por tener un equivalente en castellano, el director de la RAE ha puesto como ejemplos 'black friday', 'take away', 'save the date', 'dress code', 'prime time', 'streaming', 'product manager' o 'community manager'. 

Actualización contínua

La RAE no ha publicado una versión impresa del Diccionario desde el año 2014, y no tiene fecha fijada para hacerlo: sin embargo, la revisión anual de la versión en red equivale ya a una nueva edición de la obra. Así, si la última edición impresa es la 23ª, la actual versión en línea puede ser considerada la 23.1. La obra está disponible gratuitamente en la web de la academia con el patrocinio de la Obra Social La Caixa. El año pasado el diccionario en línea recibió 600 millones de consultas, y en el 2017 se espera superar ampliamente los mil millones.

En su intervención, Paz Battaner ha recordado que «la RAE ha actualizado su Diccionario desde 1780. Por tanto, el que hoy presentamos, es un trabajo que viene condicionado por la actividad normal de funcionamiento de la corporación». La novedad de esta versión es que «una vez digitalizado el DLE, estas actualizaciones se harán de manera continua».

Más allá de la posibilidad de que anualmente vayan incorporándose en línea versiones 23.2 o sucesivas, la RAE y la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE) han iniciado la redacción de la 24ª edición del diccionario, que renovará completamente su estructura y, ha indicado Villanueva, "será digital desde su misma concepción".