PREMIO BBVA SANT JOAN

Rafael Vallbona mira el siglo XX desde la Cerdanya

'La casa de la frontera' reconstruye la historia de una familia que mantuvo un comercio abierto en la misma divisoria entre Francia y España

Rafael Vallbona.

Rafael Vallbona. / periodico

Ernest Alós

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A Rafael Vallbona le invitaron a una porrusalda (porros, patatas, bacalao) bien caliente en la casa de unos amigos de la Cerdanya después de un recorrido en bicicleta que le dejó al borde de la congelación. El abuelo de la casa, Miquel Grau, dejó caer que se la habían enseñado los vascos durante la guerra. ¿Qué vascos? Unos funcionarios del Gobierno vasco, incluyendo un tal Aguirre, que se habían instalado en el comedor de la casa, situado en la mismísima raya de la frontera entre España y Francia, en el barrio de la aduana de Puigcerdà. Allí había una historia, se dijo. Y la había, aunque ha tardado nueve años en convertirla en 'La casa de la frontera', una novela "en que el 90% de lo que hay es no ficción", que el pasado mes de junio logró el premio BBVA Sant Joan y esta semana llega a las librerías publicada por Edicions 62.

La casa en cuestión, justo antes de llegar a la aduana dee Bourg-Madame, fue comprada por la familia Grau en 1882, en 1934 se convirtió en el Hostal Iris, reconvertido después en colmado, y desde 1986 incorporó una tienda especializada en bicicleta y deportes de montaña, Esports Iris. Su posición estratégica, cree Vallbona, la hace tan adecuada para trazar a partir de ella "un fresco del siglo XX" como cualquier gran ciudad donde se produjeron los grandes acontecimientos políticos. "La periferia también ha sido protagonista de la historia", defiende durante la presentación del libro, recordando "los refugiados y fugitivos de la primera y la segunda guerra mundial y de la guerra civil, y el contrabando en una dirección o en otra, y la llegada de la modernidad desde Francia en los años 60". Y el 'boom' turístico y residencial a partir de la construcción del túnel del Cadí . 

Aunque Vallbona se cuida de distinguir entre el punto de vista de los habitantes del valle y de los visitantes. "Nos dicen que los barceloneses nos vamos el domingo por la tarde por el túnel de Cadí y los montones de nieve se quedan, se ponen negros del humo de los coches, y se hielan, y acaban rompiendo más piernas que el esquí".

La guerra civil

Uno de los episodios reflejados en la novela ya fue utilizado por Vallbona en una novela anterior, 'La comuna de Puigcerdà': el control de la Cerdanya por parte de los anarquistas con un personaje, el Cojo de Málaga, convertido en cacique de la comarca hasta que en Bellver se cansaron de él y le pegaron un tiro. "Posiblemente fue la priemra revolución anarquista que triunfó", sostiene.