ENTREVISTA

Estopa: "Seguimos siendo unos flipados"

David y José Muñoz actúan por primera vez en Cap Roig dentro de una gira de verano reducida a seis conciertos

David y José Muñoz, en Sant Ildefons.

David y José Muñoz, en Sant Ildefons. / periodico

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Estopa planeó tomarse el 2017 como año de descompresión tras la gira ‘Rumba a lo desconocido’, y así está siendo, pero con seis excepciones: los seis conciertos que está ofreciendo estos días en otros tantos festivales, uno de ellos, el de Cap Roig, única cita en Catalunya, que acoge al dúo este domingo por primera vez. Hablamos por teléfono con José, el menor de los hermanos Muñoz, que, entre actuación y actuación, pasa unos días en Cádiz.

Así, ¿la gira ‘Rumba a lo desconocido’ tiene una prórroga? Nunca habíamos hecho una gira de festivales, y este año lo queríamos dedicar a componer pero también quitarnos un poco el mono de escenario. ‘Rumba a lo desconocido’ sigue estando en el repertorio, aunque estos conciertos representan más el conjunto de nuestra carrera.

Nunca habían actuado en Cap Roig. Sí, y todo el mundo nos dice que es un lugar perfecto. Haremos un concierto un poco más largo de los que estamos haciendo en esta gira y podremos tocar canciones más sutiles que en la mayoría de festivales no podemos tocar. Cap Roig permite esa sutileza.

De hecho, este año habrán ofrecido siete conciertos: el 23 de abril debutaron en Londres, en el O2 Shepherds Bush Empire. Sí, cuando actuamos por primera vez en un país siempre tenemos dudas, pensamos que vendrán cuatro gatos, y cuando llega el momento vemos la sala llena en un 80 o 90% de españoles. Europa para nosotros es una aventura. Pero cuando vemos el público no necesitamos hablar mucho inglés.

Sí que les haría falta para entenderse un poco con Boaz Berman, de la compañía israelí Mayumana, que está de gira con el musical ‘Rumba!’, basado en las canciones de Estopa. ¡Es la primera vez que podemos escucharnos sentados en el patio de butacas!

“¿El nuevo disco? Por lo que nos está saliendo ahora, más rumbero que rockero. Aunque vamos con calma...”

José Muñoz, de Estopa

La idea de Estopa que transmite el musical, ¿se ajusta a la suya? Nos sorprendió la historia que crearon, a lo Romeo y Julieta. No quisiera hacer un ‘spoiler’, pero en el argumento hay dos bares, el de los hermanos Muñoz y el de los Jiménez, este en honor a Jero, "el de en medio de Los Chichos". Hay un amor imposible y las canciones, que entran muy bien. Es algo más que un musical, va más allá.

Los musicales suelen hacerse en torno a grupos que ya no existen: Abba, Queen, Mecano… ¿Con este, se hacen la competencia a sí mismos? No, porque en estos momentos no estamos ofreciendo nada nuevo. No es competencia, al revés: ese espectáculo da más grandeza a las canciones.

Estos días se conmemoran los 25 años de los juegos de Barcelona y de aquel cierre a ritmo de rumba con Peret, Los Amaya y Los Manolos. ¿Se acuerda? Claro, perfectamente. Tendría yo 13 años. Lo que más me gustó fue ese espectáculo con los maestros. Se despidieron los juegos de una manera muy rumbera que es también muy catalana. El mejor sonido que se puede dar de Catalunya es la rumba.

¿Ya estaba entonces en su ambiente en casa? Sí, sí, nuestros padres nos ponían a Los Chichos, Peret, Bordón 4, también Pata Negra… Mucha rumba catalana y rumba del sur.

Aún no tocaban la guitarra. Mi padre sí. Nosotros comenzamos un par de años más tarde. Y durante un tiempo fuimos David y Jose, hasta que en 1998 o 1999, al firmar con la discográfica, nos convertimos en Estopa.

Hay grupos que se arrepienten de haber elegido un nombre con precipitación. ¿No es su caso? No, no, hicimos nuestro ‘brainstorming’ y queríamos que fuese un nombre sin artículo delante y que fuera impactante, tipo Molotov, Ketama… Y nos salió Estopa. Aunque la gente luego nos diga “los Estopa”. Y 20 años después seguimos siendo unos flipados: nos emocionamos y nos flipamos con nuestros proyectos.

Este 2017 lo han querido dedicar, sobre todo, a componer. ¿Cómo se imagina un próximo disco de Estopa? Por lo que nos está saliendo ahora, más rumbero que rockero, aunque el rockerismo se puede poner luego dependiendo de cómo lo quieras producir. A la hora de componer, la canción es libre y nace sin género. Pero no nos queremos poner fechas: vamos con calma, canción a canción. Como Cholo Simeone, partido a partido.

¿Ha escuchado algo últimamente que pueda suponer una nueva influencia? Pues el otro día vi a La Pegatina en el festival Río Babel y me encantó: es positividad y superbuen rollo. Ya les había escuchado y en directo me gustaron todavía más.

¿Qué le ha parecido el efecto de ‘Despacito’? Bueno, cada verano hay una canción que ponen hasta la saciedad y este año es esta, y me parece que después de escucharla 20 veces hasta el mismo Fonsi le debe de odiar.

¿Una canción puede llegar a tener demasiado éxito? Sí, a veces piensas: “¡me quieren por esta canción, no por mi físico!” (ríe). A nosotros nos pasó un poco con ‘La raja de tu falda’, que llegamos a quitarla del repertorio de una gira.

Si está estos días en Cádiz, quizá no está siguiendo de cerca la actualidad política en Catalunya, ¿o sí? ¿Ya sabe qué harán el 1 de octubre? Uf…, el tema de la votación es delicado, porque no va a ser una votación, votación, con todas las garantías de un referéndum. Nos tenemos que acercar más todavía a la fecha para decidir.

“Votar es la democracia. Pero habría que votar por todos los temas: educación, sanidad… ”

José Muñoz, de Estopa

Siempre han dicho que están a favor de un referéndum. Hemos dicho que no hay nada más democrático que un referéndum, pero añadiendo que si lo hubiera nuestro voto sería que no. No nos gustaría, no vemos que sea la solución a los problemas.

¿El gobierno español debería permitir votar? Que se pueda votar como lo contrario a una dictadura, sí. Votar es la democracia. Pero habría que votar por todos los temas: educación, sanidad… Tiene que haber referéndums por eso. El problema ahora es que el gobierno y el Govern no se hablan: falta diálogo, que echen unas cañitas, porque hablando se entiende la gente.

A raíz de una de las primeras entrevistas largas de Estopa en EL PERIÓDICO, en el 2001, el entonces presidente Jordi Pujol les puso como ejemplo de catalanes que, cuando en verano van al pueblo, en su caso en Extremadura, hacen pedagogía de Catalunya. ¿Lo recuerda? Sí, perfectamente. Lo seguimos haciendo, porque la gente tiene una idea equivocada de los catalanes: creen que el castellano está perseguido, y a veces nos dicen “es que sois catalanes”, como diciendo “que la cagáis”. Y esto lo tenemos que explicar un poquito. Catalunya es una tierra que acogió y acoge a gente de todo el mundo, y no debería de existir esa fobia, pero los independentistas crean nacionalistas y los nacionalistas crean independentistas, y es un pez que se muerde la cola. Ahora con el 1 de octubre veremos qué pasa, aunque la tensión es más política que ciudadana.

¿No hay fractura social? Creo que es más cosa de los políticos y que la gente ya se ha cansado un poco del temita, porque es el día de la marmota. A mí, llegado un momento, ya me da igual, que me dejen vivir…