CRÍTICA DE CINE

'El invierno': otro lugar en el mundo

Una historia con aires de western sobre el relevo generacional que explota los paisajes de la Patagonia de forma extraordinaria

QUIM CASAS

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Jacques Tourneur dirigió en 1952 un western ambientado en la Pampa, Martín el gaucho, y aunque rodado básicamente en California, tenía magníficos planos capturados en Argentina. En 1992, Adolfo Aristarain realizó una suerte de western, 'Un lugar en el mundo', en paisajes rurales argentinos. Ahora 'El invierno' explota esta geografía patagónica tan particular con un extraordinario trabajo de fotografía y, de nuevo, aires de western, el género que mejor cuadra a la magnitud de estas tierras contrastadas. El paisaje es esencial en una historia sobre el relevo generacional en una granja, el cowboy viejo y cansado que debe buscar otro lugar en el mundo, como en la cinta de Aristarain, y el nuevo trabajador que intenta conservar su bien más preciado.