Muere en Madrid el director de cine Antonio García Molina

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El director granadino de teatro y cine, que también fue novillero, escultor, pintor y guionista, Antonio García Molina falleció ayer en un hospital de Madrid víctima de un cáncer de hígado que le habían detectado hacía un mes, ha informado hoy a

Hoy serán incinerados sus restos en la más estricta intimidad, ha añadido el hijo de García Molina, que fue en su Granada natal novillero con el nombre de "El Chavo" para dedicarse más tarde al mundo del cine como extra en los "spaghetti western" que se rodaban en Almería.

Más tarde se mudó a Venezuela, donde dirigió su primer largometraje, "El regreso de Sabina", de 1976. En este país trabajó durante varios años en publicidad antes de volver a España en 1982.

En 1987 estrenó "Ladrón de chatarra", con La Polaca y Antonio del Real, una producción destinada al público infantil que representó a España en el Festival de Moscú del año siguiente.

Luego vinieron "Seducción Mortal", con Nadiuska, "Sor Juana de la Cruz", una coproducción con México que protagonizó Sofía Mazagatos, y la película sobre el diestro El Juli "Sueño de luces" (1998), que solo estuvo en cartel una semana por "desavenencias" entre el padre del torero y García Molina, que había sido su apoderado durante tres años, según su hijo.

García Molina, que residía en la localidad madrileña de Chinchón y era autor de las memorias "De Chinchón a México" (2000), era, según su hijo, "un genio, un artista, que lo mismo hacía una escultura, como la que hay en El Escorial dedicada a los canteros, que un guión".