El Museu del Circ divide a Figueres

La división crece en Figueres a pocas horas del inicio del Festival Internacional de Circ Elefant d’Or, que este jueves abre de nuevo sus puertas hasta el lunes. Hace seis años Genís Matabosch impulsó el certamen y ahora promueve un nuevo gran proyecto, la creación de un Museu del Circ, para el que la alcaldesa de la capital de l'Alt Empordà, Marta Felip, informaba a finales de enero que quería invertir en tres años 1,5 millones de euros. El anuncio encendió la mecha y provocó una crisis política (el equipo de gobierno se ha visto reducido a solo cinco concejales de Convergència sobre 21 totales) y una oposición ciudadana y de asociaciones culturales.  

La deriva ha hecho que el PSC proponga esta semana un gobierno de concentración municipal con la única condición de que queda fuera la actual alcaldesa, que a finales de enero había expulsado a los tres concejales socialistas del gobierno municipal alegando “falta de confianza”. A principios de febrero abandonaban a Felip los dos concejales de Unió Democràtica indicando “divergencias” sobre el plan del museo circense.

DEFENSA DEL PROYECTO

Matabosch, nacido en Figueres, vive apasionado por el mundo del circo hasta el punto que su tesis doctoral, que está ultimando, se centra en la historia del circo en España desde el siglo XIX. Plantea el proyecto del museo en dos grandes bloques: un edificio museístico y una carpa de circo. La ciudad de Figueres cedería un edificio de titularidad municipal, la Casa Nouvilas, situada en el centro y en desuso desde hace años. Este edificio sería rehabilitado y se convertiría en la sede del Museu y de la carpa, que serviría tanto para espectáculos como de escuela para futuros artistas.

"En Europa no existe ningún museo sobre el circo como el que quiero instalar en Figueres, que permitiría la investigación científica a cargo de profesionales -detalla Matabosc a este diario-. En esto seríamos pioneros”. Para llevarlo adelante calcula un presupuesto de 6 millones de euros, pero asegura que, según el plan de viabilidad que tiene preparado, “el Museu del Circ generará beneficios a partir del sexto año de funcionamiento”.

El promotor explica los tres grandes beneficios que recibiría la ciudad de Figueres y por los que defiende que reciba dinero público: “Rehabilitaremos un edificio histórico, proyectaremos a Figueres como la capital del circo y crearemos puestos de trabajo”. 

LA OPOSICIÓN

La oposición al proyecto ha aglutinado a un 80% de las asociaciones culturales y sociales de la capital comarcal y han hecho público un manifestó en Change.org, al igual que el bando contrario. Y dos exalcaldes, el socialista Joan Armangué y el convergente Eduard Puig Vayreda, han publicado sendos artículos apoyando la postura contraria.

La unión de las asociaciones culturales “es una reacción de defensa ante un proyecto del que desconocemos todo y que puede perjudicar a todo el ecosistema cultural”, explica uno de los portavoces, Xavier Cairó. Y recuerda que hace 6 años, “cuando llegó el Festival del Circo a Figueres, el ayuntamiento recortó hasta un 20% las aportaciones a nuestras entidades”. La oposición remarca que no están en contra del proyecto de que Figures tenga un Museu del Circ pero sí de que el ayuntamiento “ceda un edificio histórico" y "ponga dinero público a una iniciativa privada”.  

Al respecto, el escritor y bibliotecario figuerense Sebastià Roig, que también se opone, ha detallado que desde hace años Figueres “no tiene ningún plan de Cultura ni el ayuntamiento ha aportado un programa coherente de prioridades”. 

Finalmente, fuentes del ayuntamiento consultadas por este diario solo han querido manifestar que “no es cierto" que vayan a "recortar las aportaciones a las entidades culturales”. Según detallan, el Museu del Circ “estará en el capítulo de inversiones municipales, mientras que las entidades culturales seguirían recibiendo las aportaciones a través del capítulo de gastos corrientes”.