'Después de nosotros': Convivir tras el amor

Tras 'Los caballeros blancos', filme sobre los cooperantes de una oenegé en Chad, el director belga Joachim Lafosse regresa al terreno por el que es más reconocido, el de títulos como 'Perder la razón'. En 'Después de nosotros', o 'La economía de la pareja' en su título original, explora con minuciosidad, tensión y delicadeza una situación límite. Un matrimonio decide separarse. Han estado juntos 15 años y tienen dos hijas. Viven en una casa que ella ha pagado y él ha reformado. El marido, interpretado por el también director Cédric Kahn, no puede costear el alquiler de un piso, por lo que la esposa, Bérénice Bejo, acepta, no de buen grado, que se quede un tiempo en la casa que antes compartieron.

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La situación es insostenible, por supuesto. ¿Cómo convivir con alguien a quien has amado y al que ahora no quieres ni tocar? Lafosse lo muestra con el realismo que le confieren los dos actores, espléndidos, pero también con la sabia mesura del tiempo, los silencios, las catarsis y el empleo puntual de una música que describe extraordinariamente bien los estados de ánimo en dos momentos clave.

Las relaciones con la madre de ella (la recuperada Marthe Keller) y con las niñas, o la secuencia de la cena con unos amigos que antes fueron compartidos y ahora deberán tomar partido, pincelan un mundo que se desvanece, pero la película se construye sobre todo a partir del soberbio cara a cara entre la pareja.