Jia Zhang-Ke: "Los chinos creen que comprar cosas lo soluciona todo"

El prestigioso director chino estrena 'Más allá de las montañas', situada en tres épocas distintas entre 1999 y 2025

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FERNANDO GRIMALT

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Jia Zhang-Ke es el más importante de los cineastas chinos actuales. Su última película, 'Más allá de las montañas', estrenada este viernes, se sitúa en tres épocas distintas entre 1999 y 2025 para describir la acelerada inmersión de China en el capitalismo a través de dos retratos: por un lado el de una mujer que en su juventud toma la fatídica decisión de casarse con un empresario; por otro el de su hijo, víctima del desarraigo.

¿Qué le inspiró a hacer 'Más allá de las montañas'? Mi madre y yo vivimos en ciudades distintas. Una vez fui a visitarla y me dio un juego de llaves de su casa, pensó que debería tenerlo. De repente me sentí muy triste. ¿Cómo es posible que hasta entonces no hubiera tenido un juego de llaves de la casa donde crecí? Comprendí que no pasaba suficiente tiempo con ella. Cada vez que iba a verla le daba dinero antes de marcharme apresurado. Finalmente la traje a vivir conmigo a Pekín.

En todo caso, como todo su cine previo la película medita sobre los efectos del cambio económico de China. ¿Está su sociedad enferma de consumismo? Sin duda está obsesionada por los bienes materiales. Los chinos creen que comprar cosas lo soluciona todo pero en cambio solo genera matrimonios rotos, desarraigo y alienación. En ese sentido, la película quiere convencer al público de que hay valores mucho más constructivos que el dinero. Por otra parte, también me interesa reflejar hasta qué punto los cambios tecnológicos han afectado a nuestra manera de vivir y de sentir.

¿De qué manera lo han hecho? En la sociedad tradicional china existía una estructura familiar muy férrea. Los hijos no se movían de casa para poder pasar más tiempo con sus padres hasta que estos llegaran al final de sus vidas. Actualmente, en cambio, los jóvenes literalmente no pueden comunicarse con sus mayores porque estos no entienden nada de internet o redes sociales. En el pasado, cuando padres e hijos discutían al menos se miraban a la cara y ponían sus sentimientos en común. Hoy el mundo es distinto. Conocí a un inmigrante chino en Washington que hablaba a su hijo usando el traductor de Google. 

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De ahí que la película tenga una actitud ambigua respecto a la diáspora china hacia el extranjero… En los últimos dos años muchos de mis amigos han dejado sus cómodas vidas en China para mudarse con sus familias al extranjero, en busca de mejor educación para los niños o simplemente para respirar un aire más puro. Y para muchos de ellos la adaptación no ha sido fácil. En algunos casos se han refugiado en la comunidad china y no se abren a la cultura local. Y sus hijos, por contra, todo cuanto desean es asimilarse al país de acogida cultural y lingüísticamente. Eso hace que entre padres e hijos se genere una brecha tremenda.

Es interesante el modo en que la película usa la canción 'Go west', de Pet Shop Boys, para ilustrar el tema de la migración. Sí, mis personajes quieren ir al Oeste, pero no tanto geográfica como emocionalmente. Pero también la elegí porque es una de mis favoritas y representa el recuerdo que tengo de finales de los 90. Muchas discotecas abrieron en esa época, y cuando a medianoche los djs ponían esa canción, todos nos poníamos a bailarla en grupo. Para mí, 'Go west' es sinónimo de juventud y vitalidad.

Su anterior película, 'Un toque de violencia', tuvo numerosos premios internacionales pero en su país no llegó a estrenarse. ¿Lo hará algún día? Quién sabe. Pensaron que la violencia representada en la película generaría violencia en la vida real, que los imitadores se lanzarían a la calle y el caos se impondría. Yo intenté convencerlos de que no tiene sentido culpar a los directores de los males de una sociedad, pero no ha servido de nada. Pero para mí hacer cine no tiene sentido si no es de forma libre e independiente. Voy  seguir luchando para que mi cine llegue a aquellos para quien primordialmente lo hice. No tiraré la toalla.