Andreu Buenafuente y Berto Romero: "El reconocimiento es más bonito que la fama"

Andreu Buenafuente (Reus, 1965) debutó en el cine en el 2014 con 'El culo del mundo', documental que dirigió y protagonizó y en el que mostraba su vida personal y profesional. Ahora, el 'showman' televisivo vuelve a la gran pantalla, pero con una historia de ficción en la que demuestra sus tablas. Dirigida por Dani de la Orden ('Barcelona nit d'estiu'), 'El pregón', que se estrena el viernes, es una simpatiquísima comedia que el presentador protagoniza junto a una de sus parejas profesionales: Berto Romero (Cardona, 1974). Es la primera vez que ambos profesionales de la risa trabajan juntos en la gran pantalla, donde se ponen en la piel de dos hermanos que fueron ídolos de masas en los 90 gracias a una canción tecno pop. Un solo tema les convirtió en deidades. Pero han pasado los años y ahora son estrellas estrelladas. El personaje de Buenafuente se gana la vida limpiando piscinas y el de Romero, en conciertos de mala muerte. Un día reciben la llamada del alcalde de su pueblo natal (Jorge Sanz, en plena forma) para que escriban y lean el pregón de las fiestas. Está muy bien pagado, así que los hermanos aceptan.

Se ponen en la piel de dos estrellas estrelladas. ¿Hay algo más efímero que la fama?

Andreu Buenafuente: La propia palabra ya es mala. La fama mal entendida. Es más bonito decir reconocimiento. La película es una metáfora de todo esto, dos tipos que lo petaron y luego se desvanecieron.

Berto Romero: La fama es una consecuencia de tu trabajo, que puede venir o no venir. Pero nunca debe ser el fin último porque entonces estás perdido.

¿Entienden la locura en la que caen muchos fans?

B.R.: Yo no, la verdad.

A.B.: Es raro. Esa histeria...

B.R.: Y esos temblores.

A. B.: Es inquietante, sí. Nosotros no lo hemos sufrido. Tenemos alguna fan, pero nada comparado con los cantantes, por ejemplo. Es algo que forma parte del espectáculo. Da color.

Estamos en un hotel de lujo. Nos rodean maquilladores, asistentes de prensa. Hay cátering para ustedes y los periodistas. Esto parece un 'junket' [sesión de promoción] de una película de Hollywood.

A.B.: 'Junket', qué palabra tan rara, ¿verdad? Pero es trabajo. Trabajo en equipo.

B.R.: Se trata de llevar todos los asuntos de la película con profesionalidad. Todo esto de los maquilladores y el cátering no está puesto para que los periodistas penséis que somos importantes. Es porque tenéis que hacer vuestro trabajo. Y nosotros, el nuestro.  Hay que hacer las cosas bien, aunque sea una comedia como esta, sencilla, ligera y sin pretensiones.

{"zeta-legacy-phrase":{"name":"Berto Romero","position":null,"text":"\"Las nuevas comedias espa\u00f1olas podr\u00e1n gustar m\u00e1s o menos, pero la factura es impecable. Espa\u00f1olada ya no es sin\u00f3nimo de cutre\""}}

¿Sin pretensiones? Es una película que hace reír mucho y muchas veces.

B.R.: Cuando digo sin pretensiones me refiero a que 'El pregón' no pretende tener la última gran palabra en el cine. No pretende ser la gran comedia definitiva. No. Es un paso en nuestras carreras, es un ladrillo en la casa de la comedia patria. Quiere provocar la risa, y en eso sí que es ambiciosa. Hemos querido hacer una película comercial, competente y equilibrada.

'Ocho apellidos vascos', 'Ocho apellidos catalanes', 'Anacleto', 'Tres bodas de más'... ¿Es un buen momento para la comedia española?

A.B.: Sí, se está regularizando el uso y el el disfrute de la comedia. Y es muy buena noticia. Como profesional del sector, estoy encantado. Vamos a disfrutar y a cuidar este momento.

B.R.: El público reconoce que la calidad es alta. Pueden gustar más o menos, pero la factura es impecable. Españolada ya no es sinónimo de cutre.

A.B.: El equipo técnico de 'El pregón' ha trabajado con directores y actores internacionales, algo que consideramos un síntoma de recuperación y de profesionalidad. El director [Dani de la Orden] es un tipo que ha estudiado en la ESCAC y que a sus 26 años ya ha rodado ¡tres películas!

B.R.: Tiene la cabeza amueblada. Sabe que el cine es arte, pero también industria.

{"zeta-legacy-phrase":{"name":"Andreu Buenafuente","position":null,"text":"\"En 'El preg\u00f3n' hemos tenido toda la libertad para hacer lo que hemos querido: cantar, llorar, desnudarnos...\""}}

Hasta ahora, Carlos Areces era el rey enseñando el culo en pantalla. Ahora le desbancan ustedes.

A.B.: El culo de Areces es insuperable. Yo me acerco modestamente. Ahora en serio, hemos tenido toda la libertad para hacer lo que hemos querido: cantar, llorar, desnudarnos... 

Con sus tremendas agendas de trabajo, ¿cómo concilian? [Buenafuente, pareja de la actriz y presentadora Sílvia Abril, tiene una hija y Romero, dos niños y una niña].

A.B.: Yo, además de El Terrat, tengo una empresa que se llama Andreu y Los Que Le Ayudan. Si ellos sería imposible. En casa entra un canguro, sale otro. Y cuando hacen falta dos, pues dos. Soy un privilegiado.

B.R.: Para mí, la familia es una prioridad absoluta. He blindado una parte de mi vida para mis hijos. Los llevo al cole y los voy a buscar. A partir de las cinco de la tarde, estoy solo para ellos. También soy un privilegiado. La conciliación es un asunto del que debemos hablar más. Los padres de ahora somos mucho más activos con la paternidad de lo que fueron los nuestros, pero es un camino que hay que continuar recorriendo para que, primero, no caiga todo en manos de las madres, y, segundo, para que todos entendamos que la vida no es solo trabajar y trabajar. También hay que vivir y criar a los hijos. Hay que dar un espacio a la familia. Si falla eso, falla todo. Tengámoslo claro de una vez.