CRÓNICA

Tàrrega lúdica y social

La feria aúna divertimento, crítica, debate y participación

Espectáculo de malabarismo en la plaza del Carme, de Tàrrega.

Espectáculo de malabarismo en la plaza del Carme, de Tàrrega.

IMMA FERNÁNDEZ
TÀRREGA

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Al mejor amigo del hombre se le van abriendo cada vez más puertas. Presentes ya en el metro barcelonés, en FiraTàrrega, al menos en algunos casos comprobados, acceden -y gratis- a las funciones de pago (lo mismo sucede con los críos que de vez en cuando sueltan algún lloro o ingenioso apunte que corta el silencio adulto). «Me han dejado entrar con mi perro en salas, si se porta bien», se congratulaba una espectadora que acudió con su buen amigo -de muy buenos modales, por cierto- a  The Hole & Corner Travel Agency, una simpática e imaginativa experiencia itinerante de Marga Socias. La estupenda actriz guía a los asistentes en un tour telúrico por la ciudad y les descubre rincones con especiales conexiones, según investigó su abuelo, animándoles a comprobarlo.

La misma línea lúdica, itinerante y participativa seguía la propuesta de Deriva Mussol. Más gamberros, los de 1Watt, con el apoyo en la creación del destroyer Ernesto Collado, asaltaban coches y elementos urbanos (las farolas y plantas fueron algunas de sus víctimas).

Las plazas más céntricas se llenaron ayer de jóvenes y familias en busca de divertimento y emoción. Bailarines, clowns, acróbatas y músicos asomaban por cualquier rincón, y también había propuestas con denuncia y carga social. Los italianos de Teatro Necessario dispararon las risas con un pobre músico colgado de una pared tocando un piano heredado de su bisabuelo. Le quieren embargar el instrumento y él se resiste. Vive de él.

En la plaza Major los actores de The Cross Border Project planteaban al público uno de los debates más crudos de esta sociedad envejecida y enferma de alzhéimer. ¿Qué hacemos con la abuela?, inquirían tras una recreación del conflicto que surge en la parentela por el cuidado de los dependientes. Los espectadores eran invitados a asumir los roles de la obra y aportar sus experiencias.

Los niños son los protagonistas del interesante trabajo de Carla Rovira Most of all, you'va got to hide it from the chicks, creado en talleres con pequeños para investigar qué es para ellos el teatro, qué quieren ver y qué se les da. ¿Hay que mostrarles el dolor? ¿Cómo lo viven? son las preguntas cruciales que asoman entre juegos.

A los peques

Como asistentes, el espacio más atractivo para los críos fue el del Theatre de la Toupinese, unas espléndidas y sorprendentes instalaciones de carrousel, pinballs y otras atracciones construidas con insólitos elementos de madera, metal y cuero. En uno de los tiovivos, los padres propulsaban el artilugio mientras sus hijos giraban emocionados entre los sonidos de un órgano.  También se lo pasaban pipa, grandes y pequeños, lanzándose el confeti blanco, cual nieve, que alfombraba la instalación de Xavi Bayona El bosc de van der Graff.

También helaba en la otra punta de la ciudad, en el parc Sant Eloi. Encaramado en un iceberg, el maravilloso clown Leandre, acompañado de Mireia Miracle, trasladó al público a su poético y cálido mundo, habitado por el humor, el absurdo, el optimismo y la belleza. Más fríos se quedaron los que asistieron a la propuesta de la Companyia Ignífuga A house is not a home, con un planteamiento e inicio prometedores que, lástima, no acaba de cuajar.