Penguin Random House dona los archivos de Plaza & Janés y Grijalbo a la Biblioteca de Catalunya
La Conselleria de Cultura quiere conservar la documentación del sector editorial y que el sector del libro esté presente en el futuro museo de historia de Catalunya
Penguin Random House ha hecho efectiva hoy la donación a la Biblioteca de Catalunya de los archivos documentales de las dos históricas editoriales barcelonesas que acabaron integradas en este grupo editorial, Plaza & Janés y Grijalbo. La documentación depositada formalmente por la directora general del grupo, Núria Cabutí, forma parte del conjunto de legados, donaciones y adquisiciones que pretenden conservar y hacer consultable en la biblioteca nacional la documentación que explica el desarrollo de la industria editorial catalana.
El 'conseller' de Cultura, Ferran Mascarell, ha apuntado además un objetivo a medio plazo: que todo este legado pase a formar parte del futuro y reformado Museu d’Història de Catalunya (que en la etapa Tresserras fue fue bautizado como Museu de la Societat, aún sin nombre definitivo pero al que Mascarell se refirió ayer en dos ocasiones como "Museu Nacional de Catalunya").
No hace demasiado, compras, cierres y fusiones editoriales acabaron con la destrucción de archivos de importantes editoriales catalanas. En primera instancia, el llamamiento de Cultura a los editores a concentrar estos fondos históricos en la Biblioteca de Catalunya (aunque el Arxiu Nacional de Catalunya y otros archivos locales también conservan numerosos fondos de escritores y editores) pretende garantizar su conservación y acceso por parte de los investigadores.
A medio plazo, ha añadido Mascarell, el objetivo sería "más que crear un centro nacional del libro como el francés, que haya un museo nacional en el que el libro esté presente". Y, si la situación económica de la Generalitat mejorase, emprender una política de becas de investigación sobre los distintos sectores culturales.
El contenido
Los archivos de las editoriales Grijalbo y Plaza & Janés incluyen expedientes de censura, informes editoriales, contratos, correspondencia con autores y agentes y 25.000 fotografías que utilizadas en grandes obras enciclopédicas o ilustradas. "Esta documentación ayuda a entender el proceso de cómo trabaja una editorial por dentro", ha explicado Núria Cabutí.
La compra del fondo Tusquets
Las aportaciones documentales de las editoriales que han respondido a la llamada de las instituciones han sido hasta ahora desinteresadas. Otra cosa muy distinta es lo que sucedió con la incorporación de un millar de documentos vendidos por los herederos de la editora Esther Tusquets por 366.000 euros, una cifra que la Associació d’Arxivers i Gestors de Documents de Catalunya calificó de "francamente indecente" en un duro comunicado. La Conselleria de Cultura ha sostenido que esa valoración se hizo conforme a una tasación independiente, cuyo contenido sin embargo no ha hecho público.
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