entrevista con el cantante

Sergio Dalma: "No me olvido de cuál es mi público natural"

Dalma, cerca del Auditori de Palma donde ha iniciado su nuevo 'tour'.

Dalma, cerca del Auditori de Palma donde ha iniciado su nuevo 'tour'.

NÚRIA MARTORELL
PALMA DE MALLORCA

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El más italiano de los cantantes españoles, Sergio Dalma, ha sacado después de cuatro años su primer álbum de canciones inéditas tras sumergirse de pleno en la canzone en los discos superventas Via Dalma I y Via Dalma II. La gira de Cadore 33 empezó el pasado fin de semana en Mallorca, con un éxito clamoroso.

-¿Por qué ha elegido Palma para  iniciar el tour de Cadore 33?

-Casi siempre empiezo en un lugar diferente. La última vez que estuve en Palma el director del Auditori me sugirió arrancar la gira aquí. Meditamos la idea, llegamos al acuerdo de hacer los ensayos en esta sala, tuvimos la suerte de programar dos días, conseguir sold out las dos noches y, encima, hacer coincidir la primera fecha con San Valentín, para hacerlo, si cabe, más especial.

-Después del doblete en las islas, le espera otro en Barcelona: los días 28 y 29 de marzo. En un escenario nuevo para usted: el Auditori del Fòrum. Y también con todas las entradas vendidas.

-¡Sí! Me hace mucha ilusión. Y en un espacio distinto. Mira que hemos actuado en sitios, y éste nos faltaba. Es volver a casa y reencontrarme con las 3.000 personas que vendrán a verme a cada una de las citas.

-Una vez más, fue sacar el disco y enfilarse en el top de las listas. ¿Uno acaba inmunizándose al éxito?

-Soy un artista que no lo ha tenido fácil. A lo mejor lo que pasa es que estoy recogiendo los frutos de un trabajo, de un esfuerzo. Cada vez quieres subir el listón, pero lo que no puedes pretender es olvidarte de tu público natural. A mí ni se me ocurriría intentar sorprender a los adolescentes, si bien es cierto que tengo seguidores de distintas generaciones.

-Tras dos discos de versiones de clásicos italianos, decidió sacar un álbum de piezas inéditas.

-Sí, a la emoción de sacar un disco nuevo se sumó el hecho de que se trataba de canciones nuevas, lo que hizo que aflorara un nuevo vértigo.

-¿Por qué ha recurrido al productor Claudio Guidetti, el mismo de Via Dalma I y Via Dalma II?

-Nos entendemos muy bien. Tenemos una forma de entender la música muy parecida. Tras el segundo Via Dalma, nos apetecía afrontar este desafío juntos. Y todo fluyó. Ya sabía lo capaz que es de lograr que todo vaya creciendo con los arreglos, de desarrollar la voz como un instrumento.

-Estilísticamente hay cierto viraje hacia ritmos más dinámicos, quizás hacia un pop más rockero. ¿Es intencionado?

-Cada disco de Sergio Dalma es distinto. Intento que haya un tanto por ciento de baladas y de piezas más animadas. En esta ocasión quizás me llegaron más piezas rítmicas, sí. Pero cada vez que me envían temas, más allá del estilo, lo que busco es directamente que me emocione. Y que se adapte a mi forma de cantar.

-Su hijo Sergi, de 18 años, ha dicho que su canción preferida del disco es precisamente una de las más rítmicas: Recuerdo crónico.

-Sí, el autor es Jorge Marazu, que ya me había compuesto Miedo y la había publicado en un álbum anterior. Cuando la escuché, la interpreté como un regalo y vi que podía funcionar muy bien.

-Y de nuevo factura un compacto con regusto triste. Muchos van a acabar convencidos de que Sergio Dalma es un tipo triste...

-¡Es cierto! Y me parece muy curioso. Ahora precisamente con los tiempos que corren lo que hay que hacer es animar, no entristecer. Me gustaría que me llegaran letras más alegres. Más acordes con mi forma de ser: ¡Soy una persona positiva y optimista! Pero este es el talante que tenemos los mediterráneos, que no dejamos de ser masoquistas, entre comillas [risas]

-El título del disco hace referencia a la calle de Milán donde estaba el estudio de grabación. En su caso, todas las calles llevan a... Italia.

-¡Si hasta mi Eurovisión con Bailar pegados fue en Roma! Italia siempre ha estado presente en mi vida. La canción italiana era la que escuchaba en mi casa: Cocciante, Battista... He crecido y he amado con esta música, que tarde o temprano tenía que hacer mía.

-Desde hace 23 años vive en Madrid. ¿Le piden mucho que explique qué está pasando con el tema del soberanismo en Catalunya?

-No. Nunca he tenido la sensación de que no me dejaran ejercer de catalán. Sigo leyendo en catalán, hablo en catalán con mi hijo, con mis padres. Pero no logro ver, no logro vislumbrar una Catalunya fuera de España. Sí creo que estaría bien que se permitiera que el pueblo se pronuncie, y comprobar realmente la voluntad de la gente. Todo esto no deja de ser una situación que han creado los políticos. Falta un diálogo con el gobierno de Madrid. Hay que intentar entender ambas partes y lograr que ambos bandos se sientan cómodos.

-Desde el 2003 ha ido incorporando una pieza en catalán en cada disco.

-Fui idea de José Luis Broc, el que era director de promoción de Polygram, una persona muy querida y a la que le debo mucho. Fue él quien me planteó, ¿por qué no cantas en catalán? Costó convencer a la discográfica. El tema en catalán sale en la misma edición, en Catalunya y fuera. Pero resultó que ese primer año me dieron el Premio de la Música a la mejor canción en catalán (Deixa'm estimar-te). Era una multinacional muy nacional. Ahora que trabajo en la misma compañía que el grupo Manel, ya ni me lo preguntan.