CICLO MUSICAL PRIVADO

Jóvenes y con talento

Ibercamera abre temporada en el Palau alumbrando una orquesta llamada Da Camera, nombre de una antigua asociación musical

Compenetración 8 Antje Weithaas (violín) y la orquesta, en un ensayo.

Compenetración 8 Antje Weithaas (violín) y la orquesta, en un ensayo.

MARTA CERVERA
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La violinista alemana Antje Weit-haas está tan feliz y nerviosa como sus pupilos de la orquesta Da Camera ante su primer concierto. Esta noche debutan en el Palau de la Música. El auditorio modernista acoge la presentación en sociedad de esta joven formación impulsada por Ibercamera, el ciclo privado de música más antiguo de Barcelona. La familia Prat, que esta temporada traerá otra vez a primeras espadas como el director ruso Valeri Gergiev y a la sublime pianista portuguesa Maria Joao Pires, inicia su temporada apostando por la savia nueva. «En 30 años España ha cambiado mucho y queríamos devolver todo lo que la música nos ha dado apostando por la gente joven», explicó Josep Maria Prat en la presentación de la temporada. «Hace 30 años formar en España una orquesta de cuerda como esta con integrantes del país hubiera sido imposible». La mayoría de ellos se están abriendo camino fuera y actúan en formaciones de prestigio como la Mahler Chamber Orchestra y Les Arts Florissants y la Academia de la Filarmónica de Berlín. Algunos también forman parte de cuartetos que suenan cada vez más, como el Quartet Gerhard, ganador de la última edición del concurso El primer Palau.

«Esta iniciativa es maravillosa. Estoy aprendiendo un montón», explica Judit Bardolet, violinista del Quartet Gerhard. Actualmente estudia con el resto de los compañeros de su grupo un máster en música de cámara en Basilea (Suiza). Para ella, la experiencia estos días en los ensayos llevados a cabo en el Conservatori Superior del Liceu no tiene precio. «Este proyecto es genial y trabajar con Antje es una pasada», explica Bardolet. A sus 27 años es la más joven de los 26 músicos de Da Camera.

A ella le gusta particularmente el nombre de la orquesta porque hace referencia a una asociación musical que potenció conciertos en Barcelona, entre 1913 y 1936, prestando especial atención a la música de la época. La asociación divulgó, por ejemplo, la obra de sus admirados Robert Gerhard y de Arnold Schönberg, que pasó una temporada en Barcelona invitado por su colega catalán.

De Schönberg, padre del dodecafonismo, Da Camera interpretará esta noche una obra tan bella como compleja, Noche transfigurada. Esta pieza, de gran lirismo, cerrará un programa que incluye además la Pequeña serenata nocturna de Mozart y dos obras de Bach: el Concierto de Brandemburgo número 3 y el Concierto para violín, oboe y orquesta.

Una paleta sonora que permitirá calibrar la calidad de Da Camera. «A la hora de elegir a los músicos he tenido en cuenta, más allá de la técnica, su capacidad para tener los oídos bien abiertos y para acoplarse. Trabajan con una entrega total», destaca Jonathan Brown, viola del Quartet Casals, que lidera la nueva orquesta junto a Antje Weithaas.