La Comissió de la Dignitat rescata el archivo de un fotógrafo de la guerra civil

El fondo, de mil fotografías de autor aún desconocido, salió a subasta por 7.500 euros

Josep Cruanyes, con copias de las fotografías adquiridas por la Comissió de la Dignitat

Josep Cruanyes, con copias de las fotografías adquiridas por la Comissió de la Dignitat / EL PERIÓDICO

EL PERIÓDICO / BARCELONA

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La Comissió de la Dignitat ha adquirido por 7.500 euros, recaudados tras una convocatoria urgente a los colaboradores de la entidad, un fondo fotográfico de la guerra civil en Catalunya que había salido a subasta en internet. Las fotografías, un millar de negativos conservados en tres cajas por la familia de un militar francés que sirvió en los campos de refugiados en 1939, salieron a subasta en el 2010 con un precio de salida de 25.000 euros sin que nadie se interesara por ellas y hace unas semanas estuvieron a punto de ir a parar a alguna institución de otro punto de España, ha explicado hoy en rueda de prensa el portavoz de la Comissió, Josep Cruanyes.

Una vez adquirido el fondo, aún debe iniciarse un proceso de investigación para averiguar quién fue su autor, que según Cruanyes debió de ser algún fotógrafo profesional activo en Barcelona al menos desde 1931. En el 2010, la sala de subastas Soler i Llach intentó atribuir las imágenes al fotoperiodista Joan Andreu Puig Farran, cuyo archivo de la guerra desapareció en los campos del sur de Francia, pero según Cruanyes ninguna de las fotografías examinadas hasta ahora coinciden con ninguna de las publicadas en su día por Puig Farran.

Las pistas

A partir del contenido de las imágenes se pueden esbozar sin embargo algunos datos que ayuden a identificar la autoría. Todas las imágenes corresponden a los lugares de los frentes de Aragón y del Segre (Fuentes de Ebro, Grañén, Berdegal, el Montsec, Montgai, Vilanova de Meià, Baldomà, Linyola y Sanaüja, en los que estuvieron destacadas entre 1936 y 1939 la columna Macià-Companys, la 30ª división del Ejército Popular en la que se integró posteriormente y además otra unidad reclutada en Catalunya y perteneciente también al XII Cuerpo de Ejército, la 24º división, por lo que se supone que fueron tomadas por un fotógrafo llamado a filas e integrado en estas unidades. Puig Farran estuvo movilizado, aunque se desconoce en qué unidad, y otro fotógrafo destinado a la 30ª división, Francesc Boix, el fotógrafo de Mauthausen, debería quedar descartado por motivos de edad, ya que nació en 1920 y el fondo incluye también fotografías de preguerra, algunas de ellas de las elecciones de 1931.

Las fotografías reflejan momentos de la vida cotidiana, tanto en el frente como en los cuarteles generales de estas dos divisiones, de las 143 y 146 brigadas mixtas y del XII Cuerpo de Ejército, con una visión distinta de la épica habitual de los reporteros de guerra, además de imágenes de sus comisarios políticos y jefes miliares, como Víctor Torres, Jaume Girbau y Felipe Galán. El material incluye negativos de 35 mm. desde inicios de los años 30 (lo que, según Cruanyes, apuntaría a un fotoperiodista) y de 127 mm. (propio sin embargo de cámaras de aficionados). En su día, los expertos que examinaron el material no consideraron que su calidad plástica correspondiese a ninguno de los reporteros de primera fila del fotoperiodismo de la época, entre los que sí se incluiría Puig Farran.

Entre los datos que pueden ayudar a identificar la autoría de las imágenes, figuran algunas fotografías que Cruanyes cree que corresponden al fotógrafo y muchas de una mujer que podría ser su novia o esposa, identificada como Maria Fabregat.

La compra ha sido posible gracias a aportaciones de entre 20 y 1.000 euros de 53 personas vinculadas a la Comissió de la Dignitat, de la editorial Ara Llibres y de la revista 'Sàpiens'. Con los 10.000 euros recogidos se proyecta organizar una exposición en cuanto el proceso de investigación, del que se ha responsabilizado la asociación Fotoconnexió. El destino final del fondo será el Arxiu Nacional de Catalunya.