Cinco razones para ver (o no) los Goya

Eva Hache, en su primera intervención en la gala de los Goya.

Eva Hache, en su primera intervención en la gala de los Goya.

JOSÉ CORBACHO

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1.Porque te gusta el cine

Te gusta que te cuenten historias. Que te hagan reír, llorar, emocionarte, indignarte o simplemente que te entretengan. Y no digamos si perteneces a esa especie en extinción a la que le gusta ir al cine: salir de casa, pasar por taquilla, entrar en una sala, esperar a que se apague la luz y... disfrutar de una experiencia unipersonal tan maravillosa que solo el onanismo bien interpretado puede superarla. Y además, te gustan esas historias, sin importarte si vienen de América, de Asia, de África o de L'Hospitalet de Llobregat. Personalmente me cuesta entender a los que dicen «no veo cine español», igual que me costaría entender que un aficionado a la pintura me dijera «no veo pintores holandeses». Y más cuando desde aquí se pueden explicar historias tan diferentes comoBlancanieves, Grupo 7, Lo imposible yEl artista y la modelo.

2. Porque te gustan los Premios

Crees que dar premios y recibirlos es algo que está bien. Y te gusta cuando dan los Oscar, los Emmy, los Grammy, los Nobel, el Balón de Oro o sobre todo, cuando tus hijos vuelven contentos a casa con algún premio que les han dado. O simplemente porque te sientes bien cuando le dices a alguien que ha hecho bien su trabajo o le das las gracias o un beso, o un abrazo. Sí es así, también lo pasarás bien con los Goya.

Porque dar y recibir está bien. Ruego no saquen esta última frase fuera de contexto.

3. Porque te gustan las emociones

Y los premios conllevan emociones. Gente que ríe, que llora, que se bloquea, que incluso moquea. Porque es un momento importante en su carrera profesional, pero también en su vida. Porque el cine es algo más que un trabajo. (¿Cómo? ¿Ha dicho un trabajo? ¡Vamos hombre!) Pues sí. Y un trabajo duro. Muchas horas de esfuerzo y de incertidumbre, porque nadie te asegura que todo eso a lo que has dedicado tanto vaya a salir bien. Y aun así, siempre quieres volver a intentarlo.

Y por los premiados ríen, lloran, se bloquean y moquean. Porque no es nada fácil llegar hasta ahí. Y también emociona ver a gente que se sale del guión cuando agradece y cuando se queja y cuando protesta... Al fin y al cabo, ¿hay alguien en su sano juicio que no esté de acuerdo en decir un «no» a algo como la guerra, el terrorismo, las catástrofes ecológicas, los desahucios o los recortes?

Prueben a poner un «sí» delante de cada una de las palabras anteriores, a ver cómo se sienten.

4. Porque te gusta pasar el rato

Lo sé. Aquí ustedes pueden pensar: «¿Pasar el rato viendo la gala de los Goya? ¡Anda ya!».

Matizo: No es fácil. Son 29 premios. Sin contar con el discurso del Presidente ni con el recuerdo a los que se fueron. Veintinueve premios. Solo nombrando a los nominados, dando el Goya y que lo agradezcan se van cuatro minutos por premio. 29 x 4 = 116 minutos de liturgia. Y eso no nos lo quita nadie. Pero es que por eso se llaman Premios Goya. Y habrá que darlos, digo yo. Lo complicado es hacer de una gala (de cualquier gala) un programa de televisión. Eso es otro cantar.

Está claro que nos podríamos reunir la gente del cine en una sala, dar los premios, que los medios informaran de ello y santas pascuas.

Pero, a ver, ¿por una sola noche al año (repito, una sola noche) que el cine español y la gente que lo hace posible ocupe el horario de máxima audiencia en nuestra tele pública, se va a hundir el mundo? Creo que no.

Reconozco que con esta reflexión, habrá quien no esté de acuerdo... Entre ellos el diario Abc,por lo que he leído últimamente.

Paréntesis: en este sentido, el de convertir los Goya en un buen programa de televisión, «me llena de orgullo y satisfacción» (que diría Juancar) haber podido dirigir y presentar la gala durante dos años (junto a Manuel IglesiasyEmilio Pina, director y productor de la gala de ayer) e inaugurar ese formato de presentadorshowman con parodias de las películas nominadas, con humor, canciones e improvisación, que luego han seguido, y mejorado (como no podía ser de otra manera),BuenafuenteyEva Hache.

Por eso, entre tanto sube y baja de premios y premiados siempre hay grandes momentos deentretenimiento. Y además, casi siempre estáSantiago Segura.

5. Porque te gusta criticar

No te gusta el cine, y mucho menos el que se hace en España (panda de cómicos, vividores, facinerosos sin oficio ni beneficio); no te gustan los premios (ni los abrazos, ni los besos); no te gustan las emociones (si eresMourinho, estás perdonado) y no te gusta pasar el rato (¿seguro que tus constantes vitales son correctas?), pero claro, te encanta criticar.

¿Pues qué mejor que la gala de los Goya para hacerlo? Podrás criticar vestidos, peinados, discursos, premios, criticar el cine, criticar la tele, criticar al mundo entero... ¿Te gusta, eh?

Porque, si tampoco te gusta criticar, ¿qué narices haces viviendo en España?

¡Viva los Goya y viva el cine!

(Escrito antes de ver la gala)