Al menos una cosa va bien: la novela negra

La BCNegra comenzará pronto en Barcelona con más empuje que nunca gracias al entusiasmo dePaco Camarasa, el librero incansable de Negra y Criminal, y a las circunstancias. Comentaba hace poco el griegoPetros Márkaris, autor de Con el agua al cuello, que la actual crisis está convirtiendo su país en un infierno, pero que todo lo que está pasando es el paraíso para un autor de novela negra. Y me temo que en Barcelona está pasando algo parecido.

En la BCNegra intervendrán este año unos 60 autores. No me extraña, ya que la novela negra siempre ha tenido un fuerte componente de retrato social, y el momento actual da mucho juego. De acuerdo que Barcelona no es la Chicago de los años 20, pero ahora mismo hay elementos que hacen que escribir novela negra en Barcelona ya no sea solamente cosa de policías y ladrones. En la cosecha del 2012 encontramos de todo, pero a mí me ha interesado especialmente, aparte deMárkaris,la novelaFronts oberts, dePau Vidal. Creo que eso de tener un investigador lingüista es muy adecuado para Catalunya, el único país del mundo donde los libros de lengua están en las listas de éxitos.

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Me lo he pasado bien leyendoFronts oberts: he reído por los descosidos y he encontrado interesantes reflexiones sociolingüísticas. Por ejemplo, esta sobre los Mossos: «A la hora de la verdad, el cuerpo tiene tres lenguas de trabajo: el castellano, mayoritario entre la tropa; el catalán, más abundante en los cuadros intermedios, y elcatañol, entre los mandos». ¡Buena!

Por cierto, el Premio Carvalho ha ido a parar este año aMárkaris. Enhorabuena. Pero tengo una modesta propuesta para el próximo año: que se lo repartan los políticos y especuladores que han conseguido crear el ambiente ideal para fomentar la novela negra. Nadie ha hecho tanto como ellos para reavivar el género.