El Festival Sopes del Món reparte unos 700 litros de caldo solidario

El evento incentiva la comunicación entre diferentes culturas desde el 2004

Una imagen del Festival Sopes del Món, en la Via Júlia, el domingo.

Una imagen del Festival Sopes del Món, en la Via Júlia, el domingo.

BEATRIZ PÉREZ / BARCELONA

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Un total de 36 entidades y 22 personas participaron el pasado domingo en la 12ª edición del Festival  Sopes del Món, en la que se repartirton unos 700 litros de sopas de una veintena de países. Este año, debido al impacto de la crisis económica y la cada vez mayor edad de los participantes, ha disminuido el número de cocineros individuales. Sin embargo, ha aumentado el número de entidades participantes, por lo que el número de inscripciones (58) ha sido similar al de otros años.

«Si preparan una sopa de más de 20 litros, les pagamos los ingredientes», matiza Lourdes Ponce, miembro del equipo de coordinación de Xarxa 9 Barris Acull. La entidad ha confirmado que en el domingo se volvió a registrar una gran afluencia de público en el escenario habitual, la marquesina de la Via Júlia.

VALORES

El festival, en el que cada participante prepara una sopa del país que elige (se prepararon sopas de unos 20 países diferentes), tiene como valores la «comunicación y el conocimiento» entre diferentes culturas, explica Rafa Juncadella, fundador de la Xarxa d'Intercanvi de Coneixements (XIC) de Nou Barris, la otra entidad organizadora.

El Festival Sopes del Món se celebra en países como Francia, Italia, Alemania o Nicaragua, entre otros. Juncadella tuvo la idea de organizarlo también en Nou Barris después de un viaje a Lille (Francia) en el 2001.

Y no es gratuito que se celebre en este distrito. «Cuando este festival empezó en el 2004, Nou Barris tenía un 4,2% de inmigración. Actualmente, tiene un 17%», explica Lourdes Ponce.

Sopas de Honduras, Bolivia, Nigeria, Marruecos, China y Turquía, entre muchas otras, fueron preparadas por personas procedentes de esos países en un ambiente eminentemente festivo. Después, todas fueron degustadas gratuitamente por el público asistente. En algunos casos, se registraron colas de hasta media hora.

LECHE DE COCO

Una de las sopas más originales fue la de la Associació de Veïns de Prosperitat: una escudella típica de Andorra con el nombre #DiuenDiuenDiuen. És que ningú pensa en Andorra?. «Participamos en el Festival desde el principio —dice Albert Recio, miembro de la asociación—. Queremos generar fraternidad».

«Aquí hoy no hay color ni raza», añade Carmen López, que preparó un potaje de garbanzos con bacalao. «Era una receta de mi madre. Es una sopa exótica, aunque de Catalunya, con leche de coco y cacahuete».