Nadal no puede con Murray en la Caja Mágica

Andy Murray fue demasiado para Rafa Nadal, que no ha poddido dar continuidad a la buena línea exhibida en semifinales ante Tomas Berdych y se ha visto privado por el tenista escocés de volver a reinar en el Mutua Madrid Open, que había ganado en las dos ediciones anteriores. El número tres del mundo no ha dado opción al todavía número cuatro (6-3, 6-2), que esta semana bajará al séptimo puesto a la espera de si logra detener su descenso en Roma y Roland Garros, las próximas citas, en las que defiende todos los puntos por sus triunfos del año pasado.

Murray, que hasta este domingo no había logrado imponerse al mallorquín en tierra batida en toda su carrera (seis derrotas), ha confirmado esta vez en la Caja Mágica sus progresos en esta superficie, que ya le habían llevado esta temporada a ganar en Múnich su primer título sobre arcilla justo antes de viajar a Madrid, en cuya final se plantó con ocho victorias consecutivas. La novena le ha dado el título madrileño, el primero en un Masters 1.000 de esta especialidad, y ha vuelto a meter en serias dudas al manacorense, que no ha encontrado su derecha, ni ha tenido seguridad en el saque ni ha atesorado la confianza debida en los momentos clave del partido para ponerse a la altura de un rival que tuvo todas las virtudes que a él le faltaron. Empezando por su magnífico revés a dos manos, siguiendo por la manera de hacer correr más a sus bolas y acabando con su mayor consistencia en el fondo en los contados largos intercambios que han mantenido durante un choque decepcionante para el campeón español.

"UNA GRAN SEMANA DE TENIS"

«Evidentemente, no ha sido el partido que quería, el partido que esperaba jugar. Lo intenté hasta el final, pero no pude ganar», ha comentado Nadal tras la final del torneo madrileño, del que, no obstante, dice salir muy satisfecho: «No es agradable acabar así una semana como esta, pero ha sido una gran semana de tenis para mí y he conseguido gran energía para seguir en Roma y Roland Garros».

A la primera rompió Murray el saque de Rafa, que no ganó su primer punto hasta pasados cinco minutos y tardó cuatro más en sumar el segundo sobre el servicio del británico, que no tuvo problemas para mantenerlo y no permitió que el de casa gozara de bolas de rotura hasta el séptimo juego. Fueron dos y las superó con relativa facilidad para mantener a raya al mallorquín, que lo intentó de nuevo en el noveno y volvió a gozar de una bola de rotura tras conectar una gran derecha paralela, pero de nuevo Murray lo volvió a solucionar con un gran saque y un remate inapelable en la red.

La segunda manga empezó igual de cuesta arriba para el nueve veces campeón de Roland Garros. Le rompió el servicio Murray en el primer juego y volvió a hacerlo en el tercero pese a la dura pero discontinua resistencia del número cuatro del mundo, que en esta manga no llegó a disfrutar de ninguna bola de rotura y acabó derrotado en una hora y 28 minutos.