Raquel Sánchez Silva: "En las redes todos somos iguales"

Tras una década trabajando en el canal Cuatro (2005-2015), Raquel Sánchez Silva ha vuelto a sus orígenes: la tele de pago. La periodista y presentadora cacereña (Plasencia, 1973) empezó a ser popular en Canal+ y ahora ha vuelto a un proyecto similar, bajo el paraguas de #0 en la plataforma Movistar+. Y en esta innovadora cadena está al frente de 'Likes un espacio producido por Pablo Motos en el que muestran la vida a través de las redes sociales.  

—¿No es contradictorio crear un programa sobre redes sociales que no es en directo?

—Bueno, esa parte de la interactividad o la reciprocidad no es la esencia del programa. La esencia no es yo te digo y tú me devuelves la pelota. Nosotros lanzamos un montón de pelotas y las vamos a recoger después del programa o al día siguiente. Pienso que esa interactividad ralentiza el ritmo muchas veces. Imagínese un programa de redes en el que sacas una foto que no se ha visto nunca. ¿Qué haces? ¿Cuántos 'tuits' lees? No sé si evolucionaremos con el tiempo en ese sentido. Creo que no. Veo ahora un producto compacto que informa, entretiene y hace reír.

—¿Qué aporta 'Likes' a su carrera?

—Creo que es un cambio grande hacia algo que quería hacer. Tenía muchas ganas de hacer un diario, porque en todos los formatos que he hecho en los últimos años llevaban 13, 14, 16 capítulos y el programa iba muy bien. Pero cuando estabas calentando, estabas supersuelta y alcanzabas tu punto, entonces el programa terminaba. Hice un diario ‘Visto y oído’, pero no duró mucho: solo tres o cuatro meses. Eso no es tiempo para construir un diario. Tengo mucha curiosidad por saber qué se siente con un formato que madura en televisión.

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—Además- sin presión de la audiencia- al estar en una tele de pago, ¿no?

—Es una manera diferente de trabajar, pero también tienes un impacto diferente. Eso también va a ser algo nuevo respecto a trabajar en Mediaset. Es un público diferente que consume televisión de una forma diferente, pero también por eso hay que intentar seducirle y conseguir que esté contigo a muerte. No sé si lo sabremos hacer, pero es un reto que tenemos.

—¿Cómo se fue enterando de los colaboradores que iba a tener 'Likes'?

—Me fueron confirmando la gente conocida que se iban fichando. También me iban confirmando la gente de 'Web therapy', porque tengo amigos allí. Fue como un goteo. No es tan fácil reunir a un grupo así. Gente buena hay, pero encontrar tanta no es sencillo. Esa cantidad de gente haciendo cosas distintas que te quedas enganchada a la tele viendo lo que te están contando. En eso el programa va a ser algo que no se ha visto.

—¿Cuál es el colaborador que promete más?

—No se lo voy a decir. Cada uno tiene un punto diferente. No hacen lo mismo. Carlos Langa es un mundo surrealista que crea universos dentro de las redes y le da una vuelta a todo. El de los 'gadgets', Dani, interpreta muy bien ese mundo. María es una grandísima comunicadora, es una gran sorpresa, una tía que te sabe dar consejos y que la pones delante de una cámara y te preguntas por qué no estaba ya ahí. Álex, el cómico, tiene mucha naturalidad y Arturo es también un descubrimiento.

—¿La clave del éxito podría estar en estos secundarios semidesconocidos más que en los rostros consagrados?

—Totalmente. Sí, me gustaría que fuera así. Que nosotros fuéramos los pilares de inicio para convertirnos en otra cosa en el futuro. Las redes se nutren de personas anónimas y nos han enseñado que ese tipo de personas es capaz de tener 80 y pico mil seguidores, como le pasa a Carlos Langa. A mí me gustaría que, siendo un programa de redes sociales, fuera así. En las redes todos somos iguales y de lo que se trata es de que tú te hagas oír por tu originalidad y lo petes.

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—Muy cariñosa. Ese día sentí pena y se me quebró la garganta y eché mi lagrimilla. Mediaset ha sido mi casa y les quiero mucho. No puedo tener queja.

—¿Necesitaba un cambio porque había cerrado un ciclo con Mediaset?

—Se han juntado muchas cosas. 'Supervivientes' era un proyecto importantísimo en mi carrera, me encantaba hacerlo, pero la cosa se complicaba. No quiero decir que no lo hubiera hecho con mis bebés, pero el escenario era un poco más difícil. Si hubiera llegado el momento y no hubiera tenido otra oportunidad laboral, habría hecho 'Supervivientes' y me habría ido a donde fuera y me hubiera organizado. Pero mi vida cambiaba y me apetecía más estar en Madrid. De repente surge esto, que es un proyecto atractivo y se dio todo. Y además en ese momento no tenía programa en Mediaset. Jamás hubiera dejado tirada a una cadena, sino al revés. Pero somos profesionales. Si yo ahora estoy contigo, pero no tengo un proyecto inmediato y me surge uno muy bonito que encima me permite quedarme en casa con mis niños… Es todo muy razonable. Por eso creo que ha sido una salida normal.

—¿Esperaba una contraoferta de Mediaset que no llegó?

—No. Esa no fue nunca mi intención, porque no me parece bien. No soy así. Yo el año pasado solo iba a hacer 'Supervivientesy, al final, hice también 'Gran Hermano VIP' y luego el debate estando embarazada, que hay que decirlo porque no todas las cadenas dan esas oportunidades a una embarazada, y más de gemelos. Ahí me tuvieron los 13 programas porque a mi me hacía mucha ilusión. Ellos te van nutriendo y te van dando. En el horizonte estaba 'Supervivientes' porque era lo más claro, pero probablemente me hubieran salido otras cosas en Mediaset. Este proyecto me ofrecía el diario, algo nuevo y una estabilidad laboral y familiar. Cuando lo hablé con Paolo Vasile Paolo Vasile (consejero delegado de Mediaset) fue todo muy sencillo, razonable y lógico. Mi amiga Elena Sánchez, que trabajaba en Cuatro, me decía: “Pero si es un regalo. ¡tienes dos niños que cuidar y de repente te sale un programa diario en Madrid!”.

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—No sé… No creo que haya esa idea, que sea algo intencionado y que haya una tendencia de que nos gustan más los chicos que las chicas. Esto de hacer televisión a veces es más casual de lo que la gente se cree. Incluso para nosotros los profesionales llega un momento en que ni siquiera te pones a pensar por qué me han elegido a mi, porque a veces tu eres el tercer nombre que ha salido. A mi me ha pasado en la mayoría de mis programas, que mi nombre no ha sido el primero. Hice 'Pekín express' porque Paula no lo hizo. Todo me ha venido un poco de rebote, de primera o de segunda carambola.

—Hace 10 años estuvo a punto de hacer un programa con Jorge Salvador y Pablo Motos (productor de 'Likes'). ¿Qué pasó para que no lo hiciera?

—No estuve a punto. En ese momento estaban haciendo 'Channel número cuatro' en Cuatro. Yo estaba todavía muy verde, pero como era muy osada quise presentarme al 'casting'. Lo hice porque debieron de decir que pase esa petarda y que diga cuatro frases. Fue esa cosa de soñar a lo grande, que siempre me ha gustado. A mi me han cogido para muchas cosas, pero si echo la cuenta me han rechazado para muchas más. Jorge Salvador estuvo muy amable conmigo y me dijo que había visto cosas de mi que le habían gustado. ¡Y yo tan contenta de que me lo dijera el de 'Crónicas marcianas'!