tú y yo somos tres

"Alfredo, lo de C-C-O-O, es raro"

FERRAN MONEGAL

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Ha concluido esta especie de risibleFalcon Cresten dos capítulos que Tele 5 ha pergeñado (Felipe y Letizia: deber y querer), y cabe coincidir totalmente con lo que advertíaAlfons Arúsen 8TV:«Es una serie de humor». Diría más: les ha salido una charlotada. Solo había que ver al excelente actorJuanjo Puigcorbésumergido en ese papelón que le ha caído encima, la imitación delrey Juan Carlos, vestido con pantalón color sandía, y camisa y americana tono rosa palosanto, y claro, el delirio cromático era colosal. Ya puestos a hacer imitaciones desternillantes, y caricaturas de la voz y de la gestualidad de los originales, hubiera sido mejor apostar directamente porToni Albà, que tiene una larga experiencia al respecto en elPolònia, y hasta en aquel divertidoMicroondasdeLas cerezas deJulia Otero. Quizá el momento más delirante de este final del culebrón ha sido cuando han hecho la recreación (léase parodia) del momento«C-C-O-O»deAlfredo Urdaci(David Bagés) en suTelediariode aquella TVE delaznarismorampante, conLetizia Ortíz(Amaia Salamanca) de copresentadora a su lado. ¡Ahhh! Los guionistas se han inventado un diálogo entre ellos, en plan Teatro Chino de Manolita Chen, en el que hacen decir a unaLetiziaperpleja y extrañada:«Alfredo, ¿vas a decir C-C-O-O?... ¡Es raro!»; o sea, una morcillita de comedia de boulevard quizá con intención de hacer quedar bien a la futura princesa de Asturias, pero que ha resultado finalmente una mala imitación de los esperpentos deValle-Inclán. Mayor atrevimiento ha sido haberse apropiado de las grabaciones auténticas del día de la boda, con elrey Juan Carlos, el de verdad, y laReina, y los Príncipes, entrando en la catedral

-y dentro de la catedral también-, y haberlos incrustado como final del despendolado culebrón. ¡Ah! Se conoce que no había presupuesto suficiente para recrear con cartón piedra ese momento boda-catedral, y lo han resuelto metiendo en la ficción, directamente, a los originales. No sabemos si en la Zarzuela les van a reclamar derechos de imagen.

AL PLATÓ SE VA SIN BRAGAS .- Gracias aCristina Tárregahemos sabido (Esenciales Ana Rosa, T-5) que muchas«personas de la comunicación»antes de entrar en un plató se quitan las bragas. Maravillada se quedó laQuintana. Y añadió entonces laTárrega:«Es para absorber mejor la fuerza que viene de la Tierra». ¡Ah! Qué absorción más bárbara.